Ces - 51 Nueva Especie

Capítulo 25 - El enemigo mas Inesperado

- Nos sigue persiguiendo - chillo Lucía mirando por la única ventana de la sala de control señalando el satélite o nave de la NASA que venía a destruir su nave.

- ¡Acelera mas! - exclamó Lucía

- No puedo, ¡estoy al máximo! - se lamento Daniela

- Un poco más, un poco más - insistió Lucía pataleando el suelo

- Va en serio, no puedo más - deploro Daniela tensa

- Dejame, tiene que haber una palanca de emergencia, en el manual de control de la nave lo ponía, seguro que debe des estar por aquí - dijo Lucía girándose y yendo en a Daniela, Daniela se apartó para dejar buscar a Lucía.

- Lo sabia, mira aquí - exclamó Lucía señalando una mini palanca escondida entre los propulsores - solo había que darle al botón de "Emergencia" y todos los botones ocultos, peligrosos, misteriosos o de emergencia salen y -

- deja de hablar dale a la palanca de una vez - interrumpió Daniela, Lucía a regañadientes le dio a la pequeña palanca.

La nave la nave se tambaleo y salió disparada, tan rápido que Daniela y Lucía se cayeron al suelo.

- Mira, hemos dejado atrás al satélite destructivo - comentó Daniela mirando por la ventana de rodillas.

- ¡Yuju! - clamo Lucía feliz

- No creo que se rinda, buscará la dirección en la que vamos y nos seguirá hasta destruir la nave - artículo Daniela sumida en sus más profundos pensamientos.

- Ya tienes razón, seguro que nos seguirá, al menos a distancia -

- Pero al menos nos hemos librado de momento -

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Irina sintió una sacudida en la nave. Se despertó. Miro por la ventana y vio la nave Ces - 51 desaparecer dejando una corriente de humo.

¿Cómo era posible? se preguntó Irina algo recelosa.

El verdadero problema ahora era que se había quedado sola vagando por el espacio, con pocas provisiones y sin encontrar a los alienígenas.

Ya sabía yo que no era buena idea dormirme ahora, se dijo Irina enfadada.

No tenía nada que hacer, entonces en ese justo instante, momento avistó algo, un puntito negro, parecido a un satélite que seguía a la nave Ces - 51 a toda velocidad ¿Y si eran los alienígenas? era su única posibilidad para sobrevivir.

Irina rápida como una bala, se puso el cinturón y encendió los propulsores. Pero antes de eso aviso otra cosa. Era otro mini nave que se había quedado en el mismo lugar que ella vagando por el espacio. También pudiera ser que fueran alienígenas. No sabía a qué seguir, ¿al mini satélite o la mini nave?

Las dos cosas podrían ser alienígenas.

Las dos cosas podrían ser alienígenas.

Solo podría seguir a una... solo había una cosa con la que tomar la decisión.

Irina se giró, y cogió un pequeño cuaderno en la parte trasera de la nave... ¡Pero si era el cuaderno que había desaparecido de Lena!

Irina sabía muy bien que no estaba bien robarle cosas a las personas pero esto era importante para su misión.

Abrió por las últimas páginas y buscar la información que quería saber, lo encontró entre las últimas páginas y empezó a leer:

"3/6/2126

Querido diario:

hoy he estado muy preocupada, ¡no encuentro mi cuaderno de copia!, y no solo eso, la nave Ces - 51 ha salido disparada sin apenas dejar rastro. Los alienígenas y yo nos hemos quedado aquí sin seguir a la nave para recopilar nuestros planes"...

Irina leyó una y otra vez la última frase, si según Lena ellos no se había movido de sitio... esa debía de ser la nave alienígena, pero ¿era tan pequeña? además esa mini nave era del mismo tamaño que la suya... no habría espacio para todos... Pero no tenía más opción que acercarse a esa nave.

Irina reactivo el propulsor y se fue acercando a la nave lentamente.

Según se iba acercando se le iba aclarando la imagen de quien iba al mando, no era un alienígena, sino un humano... era un humano de pelo largo, y rubia recogido en dos trenzas, llevaba puesto un traje espacial.

- ¿Alyssa? - murmuró para sí Irina incrédula, ahora todo tenía sentido, era Alyssa que había ido a buscarla.

Se quitó el cinturón, salió de su nave y toco la puerta, Alyssa se asomo a ver y se encontró con la mirada de Irina y sus profundos ojos marrón.

- ¡Irina! - grito Alyssa llorando, se puso el casco y salió en encuentro con su amiga. - cuanto te he echado de menos -

- ¡Alyssa! -

- Bueno ven, que tengo prisa, acoplaremos nuestras naves y en busca de los extraterrestres - empezó a decir Irina cogiendo a Alyssa.

CONTINUARÁ EN EL SIGUIENTE CAPÍTULO

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