Ending Scene | KookTae

Capítulo 9

El tibio clima que poco a poco comenzaría a ser más frío, las hojas anaranjadas que se movían y caían con el agradable viento dieron la bienvenida a septiembre y, con ello, el cumpleaños de Jungkook.

Oficialmente, era un adulto de treinta y cuatro años.

Un amargado adulto de treinta y cuatro años.

Su cumpleaños no era una fecha muy relevante para él, principalmente porque desde hace un par de años lo pasaba solo y no había nadie que lo saludara, así que simplemente lo consideraba una vuelta más al sol.

Una vez listo para salir de su habitación, suaves golpes se escucharon en la puerta. Colgó su mochila en su hombro y abrió la puerta, encontrándose con el sonriente rostro de Chanyeol.

—Buenos días— Saludó, un poco extrañado de que el más alto estuviera ahí cuando solían encontrarse en el hospital todos los días.

—Buenos días— Respondió y ensanchó su sonrisa (si es que eso era posible). —Feliz cumpleaños—

Jungkook abrió sus ojos aún más por la sorpresa y su corazón dejó de latir por un segundo. No sabía qué decir ni cómo reaccionar.

—G-Gracias...— Susurró.

—No es nada, ¿cuántos años cumples?—

—Treinta y cuatro— Respondió en el mismo tono.

—Vaya... eres un año menor que yo, deberías llamarme hyung—

Fue ahí cuando las neuronas del azabache finalmente hicieron sinapsis. —¿Cómo... cómo te enteraste?—

—Oh...— Dudó un poco su respuesta. —Se supone que no debo decirte, pero... te parece un poco extraño cuando nunca me lo dijiste, ¿no?_ El aludido asintió. —Taehyung me lo dijo, ¿cómo es que lo sabe si no se conocían?— Alzó una ceja. —Porque no se conocían, ¿cierto?—

Jungkook tragó pesado y trato de calmarse para no sonar angustiado. —No tengo idea...— Mintió.

Chanyeol por supuesto no le creyó, pero decidió abandonar momentáneamente el tema al verlo tan abatido. —Bien, ¿nos vamos?—

El azabache asintió y siguió al castaño en completo silencio.

Taehyung lo recordaba y se había tomado la molestia de decirle a Chanyeol...

Flashback

—Bien— Dijo el azabache mientras se sentaba junto al castaño en una de las bancas de la universidad, ignorando los murmullos de quienes pasaban a su alrededor por ser "el dúo de raritos". —¿Seguimos con las preguntas y respuestas?— El contrario suspiró y asintió para que continuara. —¿Color favorito?—

—Verde— Respondió. —¿El tuyo?—

—Rojo, ¿preferencias musicales?—

—No tengo un género definido en específico, si la canción me gusta lo suficiente la descargo, aunque podría decirse que tengo cierta preferencia por canciones lentas— Lo miró. —¿Y tú?—

—Me gusta el pop— Sonrió. —¿Cuándo es tu cumpleaños?—

—Treinta de diciembre—

—Oh... un día antes de año nuevo... el mío es el primero de septiembre—

—¿De verdad?— Preguntó sorprendido.

Asintió, un poco desconcertado. —¿Por qué reaccionas así?—

Suspiró. —Ese día es el aniversario fúnebre de mi padre—