- ¿Cómo entraste?
- Dejas la llave de repuesto debajo de la alfombra, un clásico- ella se encogió de hombros. Raven avanzó con los tacones en mano, los dejó cerca del recibo junto con sus llaves y la cartera. Si Rose había logrado entrar tan fácil, no quería pensar en quien mas pudiera hacerlo, tenia que cambiar de lugar aquella llave.
De repente se le hizo poco normal que ella estuviese ahí, sin ningún aviso, solo porque si.
- ¿Que pasa? ¿Mamá y papá están bien? - Raven se acercó a su hermana.
- Si, están en casa, no te preocupes.
- Entonces, ¿Porque estás aquí y a esta hora? - Raven chequeó el reloj en la pared y daba las siete de la mañana, lo que quería decir que viajó durante la noche para poder llegar ahí tan temprano. No sonaba nada bien.
- Podría preguntar algo parecido, ¿En dónde estabas? ¿En dónde está Jason? - Rose evaluó el departamento con fingida curiosidad.
- Trabajando, sale desde muy temprano- Rose evaluó como su hermana intentaba evitar sus ojos a toda costa.
- ¿Y tú estabas...? - arqueó una ceja evaluando las manchas de arena en las botas de su pantalón, su maquillaje estaba intacto pero sus ojos eran brillantes y mostraban que no había dormido nada.
- Estaba con unos amigos del trabajo- se encogió de hombros.
- ¿Que está pasando, Raven? - su hermana mayor se levantó y camino hacia ella evaluando el temor en sus ojos. Su sencilla camisa de algún grupo musical y sus jeans revelaban que aquella visita no había sido planeada con anticipación.
- Estoy haciendo lo que me dijiste que hiciera hace meses, tengo buenos y salgo con ellos a pasar el rato, eso es todo. Estoy disfrutando mi vida.
Rose asintió y miró el pasillo que llevaba a las habitaciones mientras se mordía el interior de su mejilla.
- Mamá llamó un par de veces- se cruzó de brazos y suspiró- Vió a Jason en casa de sus padres y resulta que renunció a su trabajo, aquí, en Los Angeles, y se fue... sin ti- Raven tragó saliva- ¿Están teniendo problemas? ¿Que no me has contado, Rave?
Raven tomó una bocanada de aire y camino hacia el sofá para sentarse en el, dejo los tacones a un lado y pasó una mano por su rostro. No sabia que Jason había renunciado, pensaba que se había ido a algún hotel, o con quien sea que se estaba viendo, y no sabia como Rose conocía mas de lo que había salido de sus labios.
- Se terminó- ni siquiera se atrevió a mirarla a los ojos, simplemente observaba la mesa con gesto ausente.
- ¿Se terminó? - Rose palideció un poco y luego parpadeó.
- Tenías razón, si veía a otras chicas- una risa cruel e irónica abandonó la garganta de Raven.
- Mierda- Rose se sentó junto a su hermana menor rápidamente y tomó su mano. - ¿Te engañó ese hijo de puta? Dios cuando regrese voy a castrarlo.
- No- sonrió suavemente. - Estaré bien, lo prometo.
- Dios, ¿Cómo te enteraste? No me digas que lo encontraste aquí o algo porque me regreso ya mismo a asesinarlo.
- Rose por Dios, deja los pensamientos violentos- ella sacudió la cabeza y Rose tomó la poca paciencia que le habían regalado y suspiró lentamente para calmarse y escuchar. - No lo descubrí. Él me lo dijo, o eso dió a entender-sacudió la cabeza notando que solo sentía decepción. - Estuvo actuando raro por un tiempo y ya al final supongo que la culpa le ganó, me lo dijo hace unos días.
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Meet me in the hallway |N.H| #PGP2021
FanfictionTERMINADA (Historia ganadora a la categoría mas votada en Fanfiction Premios Gemas Pérdidas 2020) Los Ángeles, 1990. Niall solo la ve en el pasillo de su edificio todos los días. Ella estaba robando su corazón sin querer. Raven vive un cuento de amo...