𝙒𝙝𝙤 𝙙𝙤 𝙮𝙤𝙪 𝙡𝙤𝙫𝙚?; 𝙟𝙤𝙤𝙝𝙮𝙪𝙠.

19

—Aún no puedo creer que hayas tirado por la borda lo que te esperaba en Australia Minhyuk -su padre caminaba de un lado a otro por toda la habitación. Minhyuk estaba cabizbajo, no por respeto, sino que no quería ver a los ojos al hombre que decía ser su padre y no lo apoyaba ni lo quería. —No tienes ningún futuro favorable con ese chico, ¿es que no lo comprendes? -su padre se le acercó alzando su rostro para que lo mirara.

Minhyuk soltó una risa en voz baja, obviamente el hombre mayor lo había escuchado.

—¿Que demonios te causa tanta gracia? -preguntó con una pizca de enojo.

—He podido salir adelante padre, y muy bien sin tu ayuda -contó el menor.

—Tu deber es aquí, y cumplir con tu puesto designado -le espetó el hombro soltando su mentón para alejarse de él.

Minhyuk negó levemente. —No necesito nada de esta familia -se atrevió a decir el chico. Logrando un asombro en el rostro del hombre mayor.

—Pues escúchame muy bien Lee Minhyuk, aunque tu no quieras cumplir tu deber como hijo mayor, no te dejaré alejarte de esta familia, aunque me cueste mucho jamás volveré a dejar que escapes. -terminó golpeando un poco fuerte su escritorio con su puño cerrado.

Minhyuk rió mentalmente, si pudo escaparse hace un tiempo, no le sería difícil volver a lograrlo. Pero el menor no se esperaba que su padre le cumpliera lo dicho.

...

Mientras tanto en Berlín, se encontraba un Jooheon deprimido llorando mientras se encontraba acostado de espaldas boca arriba viendo al techo. No había podido dejar de llorar desde que se llevaron a su novio. Pero en realidad, ya había pasado una semana entera, y no había hecho más que estar encerrado en su casa. Además de tener muchísimo miedo, tampoco sabía que debía de hacer. No tenía ni idea de lo que debía de hacer para poder ayudar a su novio.

Se levantó de la cama sollozando mientras limpiaba las lágrimas de sus mejillas. Se duchó rápidamente y después se vistió. Se sentó recostándose al respaldo de su cama, agarró su laptop y buscó la pagina de vuelos. Si o si regresaría a Seúl lo antes posible, se había cansado de estar ahí acostado todos los días llorando y llorando sin poder hacer nada. Compró sus boletos de ida rápidamente, su vuelo saldría a la noche en su país y llegaría como al medio día del siguiente día a Seúl.

Comenzó a hacer su equipaje, en realidad no se llevaría mucho, ya que su plan era devolverse sano y salvo junto a su novio para poder seguir viviendo felices allí alejados de la familia Lee.

Trató de dormir por un tiempo después de terminar de hacer su equipaje, y con equipaje se refería a su mochila de la universidad con sus cosas importantes como laptop, audífonos, iPad y cargadores. También alguna que otra prenda de ropa para poder vestirse estando allá, aunque en realidad tendría planeado quedarse en su antigua casa con su familia en su estadía allá.

Durmió unas cuantas horas hasta que dieron las 9:00 pm, su vuelo saldría a las 11:30 pm.

Se colgó la mochila en su espalda y luego sacó snacks de la alacena en su cocina, las guardó en su mochila y después salió de su departamento para ir a tomar un Uber que lo llevara rápidamente hacia el aeropuerto.

...

Mientras tanto en Seúl, el padre de Minhyuk le había cumplido lo de no volver a dejar que escapara. Que hasta lo mantenía encerrado en su propia habitación día y noche, una habitación nueva que su padre le había mandado a construir con todo lo necesario para que no tuviera que salir de allí, baño privado, sala de estar y cocina, era más como un departamento justo en su propia mansión. Fuera de la habitación habían dos guardias día y noche para vigilar al menor, al igual que rodeando la mansión entera por dentro y por fuera, la seguridad de su hogar de ahora en más parecía más una cárcel que otra cosa. Hasta habían cámaras de vigilancia en su habitación, lo hacían sentir incómodo. Pero el menor llevaba la semana entera sin comer ningún bocado de comida, en ese momento moria de hambre, pero no accedería a brindarle alimento a su estómago ya que lo estaba más haciendo por huelga que por otra cosa.

Quien rayos pensaría que te tendrían secuestrado en tu propio hogar, era una maldita pesadilla para Minhyuk. Lo peor era que pensaba día y noche a cada segundo en su novio, enserio que lo extrañaba demasiado, sentía que se volvería loco sino volvía a verlo pronto.

—Debes de comer lo que te preparan, o al menos prepárate algo tu mismo -escuchó la voz de su padre fuera de su habitación. Minhyuk simplemente ignoró su comentario tapando su cabeza con una almohada.

Escuchó como su puerta se abría, levantó su cabeza rápidamente de debajo de la almohada y vio a su mejor amigo entrar por el umbral de la puerta y acercarse rápidamente a él que lo envolvió en sus brazos justo al tenerlo frente suyo. Se dejó ser y comenzó a llorar en el hombro de Wonho, mientras escuchó como le colocaban llave por fuera nuevamente a la puerta.

—Solo por unos minutos -escuchó a su padre decir y después como se alejaba de allí.

—Te extrañé muchísimo Minhyuk Hyung -soltó el menor alejándose un poco de su mayor.

—Yo a ti, pero esto me sorprende -admitió el mayor de los dos. —¿Como es que mi padre accedió a dejarte verme? -preguntó con curiosidad.

El menor se alzó de hombros. —No estoy seguro, pero de lo que si estoy seguro es que te ves horrible -bromeó.

Minhyuk rió y después golpeó suavemente el hombro del contrario.

Rieron unos minutos y después Minhyuk notó un pequeño enrojecimiento en el cuello de su menor. Golpeó su hombro nuevamente. —Veo que te va de maravilla con Hyungwon. -rió MinHyuk.

Si hoy se rasco la nuca riendo. —Si -aceptó avergonzado. —¿Que tal a ti? -preguntó con curiosidad, ya que en realidad no conocía lo que había ocurrido.

—Mi padre mandó a personas a secuestrarme de Berlín para regresarme a Seúl, Jooheon se quedó allá solo -le informó. Wonho lo veía muy sorprendido al escuchar eso. —Y si preguntas sobre lo que creo que preguntas, pues no, no lo hemos hecho aún -se alzó de hombros con un pequeño sonrojo en sus mejillas.

—¿Queee? -Wonho no podía creerse lo último que dijo su amigo. —No es posible, quiero decir, han vivido casi un año entero y, ¿aún no han tenido relaciones sexuales? -dijo incrédulo.

Minhyuk negó. —No hemos hecho el amor aún -le corrigió sin más.

Wonho suspiró. —Pues ya deberían, quiero decir es algo necesario, ¿no es así? -preguntó. —Vamos, no me digas que no has tenido las ganas.

—De que he tenido, claro que si he tenido, pero he preferido esperar, no se, siento que lo he hecho hasta que sea el tiempo perfecto, cuando suceda sin preguntar o querer, sino que suceda naturalmente estando juntos sin más -contó con un brillo en los ojos el mayor.

—Entiendo, enserio me gustaría ayudarte a -Minhyuk le cubrió la boca al instante.

Acercó su rostro al del mayor y le susurró al oído. —Las paredes escuchan -le informó. Wonho asintió y notó las cámaras de vigilancia dentro de esa inmensa habitación.

...

Mientras tanto Jooheon llegó a Seúl después de varias horas de viaje, cansado y sin ganas de nada le llamó a su hermano mayor y él aún con una inmensa sorpresa lo recogió. Llegaron a su antiguo hogar, lloró por mucho tiempo en los brazos de su madre mientras su padre lloraba en silencio viendo a su hijo desaparecido después de mucho tiempo. La familia estaba completamente feliz de volver a ver a su hijo, pero notaron que el menor no sólo lloraba por felicidad al regresar, notaron sus ojeras notorias y sus ojos rojos. Su pequeño estaba más triste que nunca, y aunque así fuera lo apoyarían en cada momento hasta poder volver a ver su hermosa y única sonrisa.