Capitulo 35

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Purre

Estábamos listos para dormir, Pili ya había llevado a Mer a su habitación y ella están por quitarse el maquillaje.

No es muy temprano, alrededor de la media noche.

Se supone que los gemelos llegarían los últimos de febrero.

Pero no nos preocupamos, apenas es primero de marzo.

Estaba en la cama revisando mis redes sociales.

Cuando Pili comenzó a quejarse por un dolor que venía de su vientre.

- ayúdame no te quedes ahí - dijo entre respiraciones.

- bien, tranquila, no te alteres, respira- le decía con calma acercándome a ella

- toma el maldito bolso y vamos al hospital- gritó enojada

Vaya que se puso de ma humor.

- yo voy a ir caminando hacia la salida, vos ve pos la niña y ya vemos donde le dejamos- dijo manteniendo la calma.

Al menos ella si puede mantenerla.

Muy rápidamente fui a despertar a Mer.

Se quejó un poco pero la cubrí con una cobija y la dejé en la sala.

- te llevo al auto y vuelvo por la pequeña- le dije y asintió.

Todo pasaba tan rápidamente

Cuando regrese por America, aproveche para llamar a la mamá de Sarah .

Su casa quedaba en el mismo fraccionamiento que el nuestro.

- hola, señora Quintanilla- le dije en mi tono más normal posible

- hola Purre qué pasa - dijo amable

- Pilar ha entrado en labor de parto y queríamos ver si se podía quedar con ustedes esta noche - esta vez si hable muy rápido.

Tome a mi hija en brazos mientras con mi oído sostenía el teléfono.

- si claro, los esperaré afuera de la casa- dijo al teléfono y colgó

Mer aún con cara de dormida se subió al auto

Iba en la parte trasera como su mamá.

Pilar tenis cerrados de los ojos y tenia respiraciones entrecortadas

Tomó la mano de nuestra hija

- hija escúchame bien, tus hermanos están por nacer, pasarás la noche en casa de Sarah y por la mañana te llevarán al hospital- dio un largo bostezo mientras asentía con la cabeza .

- acelera no aguantó el dolor - gritó, estaba tensa.

- cálmate, no te pongas así, de este modo no llegaremos a nada - trataba de mantenerme sereno para no alterarla más.

Es madre primeriza de cierto modo.

- lo dice quien no tiene ningún dolor y dos bebes va a salir de tu va...

- mamá puedes soltar mi mano, es mucha presión- dijo Mer dulcemente

- esta bien mi cielo - Pili dejo en el aire la mano de la niña

Llegamos a la casa y la señora estaba fuera de esta.

Mer supo que era tiempo de irse.

- adiós mamá, adiós papi, los amo- dijo abriendo la puerta para caminar hasta los jardines de la casa de Sarah

Por Siempre Nuestra Donde viven las historias. Descúbrelo ahora