Capitulo 2

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— ABEL TE ESTOY HABLANDO

— ¿Qué quieres cariño? Estoy viendo una película.

— Íbamos a ir a la fiesta de Merry.

— ¿Quien es Merry?— Dije sin despegar la vista del televisor.

— Estás gracioso hoy, Merry mi compañera de la agencia de modelaje. Anda vístete que llegaremos tarde.

— No iré.

— Oh claro que irás.

— No, no iré. Estoy cansado, trabajé todo el día.

— Consume un poco de cocaína, no lo sé, pero vístete.

— Ve tu sola, yo no iré.

Gritó, me lanzó una toalla en la cabeza, siguió gritando, lloró un poco, me maldijo por cuarta vez y luego entendió que yo no iba a cambiar de opinión y se fue sola a la fiesta de su maldita compañera. Últimamente nuestra convivencia estaba volviéndose cada vez peor, me molestaba que ocupara mi lado de la almohada, tener que acompañarla a esos malditos eventos de beneficencia, sacarle 3000 fotos para que publique en su cuenta de instagram. Necesitaba paz y que dejara de quejarse todo el tiempo por estupideces. Bella se llevó mi auto preferido en modo de venganza, mi teléfono empezó a sonar, convencido de que sería ella, atendí casi gritando.

— Espero que no hayas destrozado mi auto.

— Lo siento señor Tesfaye ¿Interrumpo?

— ¿Anto? ¿Eres tú?

— Si, llamaba para decirle que cambiaron el horario de nuestra reunión con los ejecutivos, Patrick me dijo que no contestas sus llamadas.

— Lo siento, no tenía el teléfono en sonido. Que lindo es escuchar tu voz.

— Pareces enojado ¿Todo esta bien? ¿Necesitas hablar?

— La estúpida de Bella se llevó mi carro y sólo espero que no lo haya estrellado contra algún árbol ¿Tú cómo estas?

— No creo que vaya a hacerte eso, yo bien, terminando un informe para mañana ¿Tú qué hacías?

— Miraba una película vieja de terror: Psicosis.

— Me encanta esa película y Hitchcock es mi director de cine preferido.

— ¿Hablas en serio?— Me sentía como un niño al teléfono, nunca antes había hablado con nadie sobre directores de cine.

— Si, cuando era pequeña miraba todas sus películas junto a mi abuelo. Es un recuerdo hermoso de mi infancia ¿Sabes? Tengo unas fotografías originales de algunas escenas de películas de los 60.

— Me encantaría poder verlas algún día, deben valer una fortuna.

— No lo creo, no tengo ningún objeto de tanto valor en mi vida. Lamentablemente esas fotografías quedaron en la casa de mis padres en Argentina.

— Podemos ir juntos a conocer a tus padres.

— Quedarías encantado con la comida que cocina mi padre y con los postres de mi madre.

— Seguramente, nada mejor que la comida hecha en casa.

— Lo único es que... No se como decirlo.

— Anda dime ¿Qué sucede?

— Que no somos una familia con lujos, yo prácticamente huí de Argentina por su situación económica y siempre que puedo les envió regalos desde aquí.— Sentía vergüenza en su voz, lo que me recordaba a mis épocas en las que no era millonario y mi madre debía trabajar horas extras para pagar mis estudios.

Where you belong | The WeekndDonde viven las historias. Descúbrelo ahora