Un chico que ama los calcetines amarillos, con muchísimas ganas de vivir. Así se puede definir a Doyoung, de tan solo dieciséis años. Un chico que padece de anemia falciforme, condición que ha tenido desde su nacimiento y que ha venido cambiando su...
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"La sexualidad esto...La sexualidad lo aquello..."
Doyoung quería ser partícipe del viaje astral en el que estaban sumidos algunos de sus compañeros, pero lo único que hacía era escuchar el tema del que la profesora estaba hablando, simplemente para torturarse con dudas sobre si mismo y sentirse culpable por no saber qué hacer. Estaba harto de la escuela, estaba harto de las clases, estaba harto de las tareas, estaba harto de los parciales. No tenía que decírselo a nadie, estaba seguro de que su sumamente expresiva cara, lo decía absolutamente todo. Parecía que los profesores no la captaban, o simplemente se hacían los estúpidos.
Tomo la botella de agua del piso, sus manos sudaban frio, sintiéndose débil una vez más. Era lo que se había buscado desde la mañana, cuando su padre se enojó con él de la nada y lo hecho del comedor sin que pudiese siquiera desayunar. Deseaba poder llegar a terminar sus clases para poder comer algo, pero en esos días lo único que hacía era saltarse comidas, solo para evitar tener cualquier tipo de argumento con su padre.
La profesora termino su discurso sobre cómo ser heterosexual te hacia la mejor persona del mundo y que no tener relaciones hasta casarte te elevaría directamente al cielo. Entonces Doyoung rodo los ojos rápidamente, alabando el timbre de terminación de la hora. Si escuchaba a la anciana cinco minutos más, iba a decir cosas, cosas que lo mandarían a la dirección.
La anciana se despidió aristocráticamente, había una especie de hora libre después de orientación, así que Doyoung iría a la biblioteca a hacer su tarea atrasada. Tarea que era en grupo con Yeongue, por lo que decidió despertarlo dándole un librazo. El librazo resonó por todo el salón, desacomodo el cabello y desnivelo los redondos lentes de Yeongue. El chico se quejó en un gruñido, se sobo las cienes mientras levantaba su rostro malhumorado.
_ ¿Qué estuviste haciendo toda la noche? _Doyoung fingió leer el libro mientras pasaba las hojas una por una.
_Cosas... _ Yeongue se acomodó los lentes con ambas manos, desvió su mirada hacia abajo.
Doyoung soltó un bufido, llevo sus ojos a Yeongue. _ ¿Cosas como hacer la tarea de Yoonbin? _
_Yo..._ Yeongue siguió evitando la mirada de Doyoung, mantenía sus ojos mirando directamente al pupitre.
_Yeongue mírame..._ Doyoung intento que el de gafas lo mirase, pero este seguía evitándolo a toda costa.
_Si tan solo estuvieses en mi lugar, entonces talvez entenderías porque dejo que me use de esa forma. _Yeongue golpeo su frente contra el pupitre, lo hizo un par de veces más, hasta que Doyoung lo detuvo poniendo su mano entre la madera y la frente del azabache.
_ ¿Por qué dejas que te use? _
Yeongue acomodo su rostro para ver a Doyoung, se notó como intento contener unas lágrimas, pero estas no dieron tregua y terminaron mojando las manos de Doyoung. _Porque estoy enamorado. _
