𝑹𝒆𝒎𝒆𝒅𝒚 -Shingeki no Kyojin-

IV

La chica pasó varios años bajo el comando de Levi. Había resultado ser uno de los soldados más eficientes de toda la legión, y era especialmente buena en lucha cuerpo a cuerpo.

Una vez se abrió al resto, resultó ser una chica inocente y alegre. Era muy fácil encariñarse con ella. 

Se llevaba de maravilla con Petra y con Hanji y era la mano derecha de Levi.

Erwin era como un padre para ella. Habían descubierto el año en que nació. En ese momento tenía 21 años, sin embargo cuando dejó de estar malnutrida y ganó el peso que necesitaba parecía un par de años más mayor.

Todo el mundo la conocía por la manera de llegar a Levi sin ser decapitados, ya que el capitán parecía incapaz de enfadarse con ella pese a su humor de perros.

Rain era una chica pecosa, con el pelo rojo caoba largo, siempre recogido en una trenza o una cola, y unos ojos azul eléctrico. 

Delgada y bajita, lo que le hacia adorable, y desgraciadamente para ella, poco intimidante. Y lo que hizo a los soldados pensar que era mucho menor de lo que era realmente cuando llegó.

Era conocida por saber siempre cuando le mentían. Nadie podía mentir a Rain, ya que era muy observadora y se daba cuenta de los patrones de las mentiras de la gente. 

Por todo esto, en cuanto la conoció, Eren no pudo evitar sentirse atraído. 

Ella era la más calmada del escuadrón de Levi, quitando obviamente al susodicho, fue la primera en confiar y acercarse a Eren y él le estaba tremendamente agradecido.

Estaban a punto de salir en la primera expedición de Eren, el cual se reunirá por fin con sus compañeros, pese a que no por mucho tiempo. Le pidió a Rain que lo acompañase para presentarla a sus amigos.

Esta accedió algo extrañada ante su petición.

—Eren! —Ambos se giraron al escuchar ese grito. Venía por parte de Armin, que era seguido por todos sus compañeros de promoción. 

—Chicos... —ellos empezaron a hablar de sus cosas, mientras tanto Rain estaba al lado de Eren, algo incómoda sin saber que pintaba allí. —Esta es Rain Rozanov. Está conmigo en el escuadrón. 

—un placer—Dijo ella con una sonrisa. 

—Oh dios! De verdad eres Rain Rozanov? —Armin la miró con brillitos en los ojos y se le acercó, Rain echó su cuerpo atras por reflejo—Como sobreviviste tanto tiempo por tu cuenta fuera de los muros? 

—No hablamos de eso—dijo Hanji apareciendo y poniendo sus manos en los hombros de Rain. Rain sonrió incómoda.—Os la puedo robar? 

—... Perdón no quería-

—No pasa nada, Armin. Me siento alagada—dijo ella con una sonrisa. —Bueno, Eren me tengo que ir. Diviértete con tus amigos y acuérdate que tienes que estar con nosotros antes de salir. 

Se había creado una forma de avance en la que Eren se encontraba en la posición más protegida de todas. 

—Donde estabas? —Volviendo después de hablar con Hanji, Oluo le llamó la atención a la chica, imitando a Levi. 

—Eren quería presentarme a sus amigos de promoción —Dijo ella alegre preparando a Arion.—Son majos. 

—Cada vez que os separéis del grupo tenéis que reportármelo.—Dijo Oluo. 

—Oluo tus imitaciones son horribles, basta—se quejó Petra. —El capitán no habla así! 

—Pues yo creo que lo imito a la perfección—Dijo Oluo con una sonrisa—Tu que crees, Rain?... Rain? 

Rain se había quedado mirando al grupo de Eren. De repente todos habían decaído. Rain se hizo una idea de lo que había pasado casi al instante, ya que había visto esas expresiones en sus compañeros más de una vez. 

—Sí... —Murmuró mientras se iba con Arion—Lo que tu digas Oluo. 

Detrás de ella Oluo celebraba y le restregaba la respuesta de la pelirroja a Petra, que intentaba hacerle ver que Rain ni siquiera le estaba escuchando. 

Eren sintió una mano en su hombro. Al girarse se encontró con los ojos azules que habitaban en su mente últimamente. La chica, que todavía tenía las riendas de Arion en su mano, le sonrió al chico de forma empática. 

—Estás bien? —Dijo con una voz suave. A él se Le llenaron los ojos de lágrimas. Marco y Rain eran parecidos en muchos sentidos. Ambos comprensivos, amables y alegres. Positivos pese a tener un pasado oscuro y un futuro aterrador. Ambos capaces de motivar a todo un ejército con unas pocas palabras. Incluso compartían esas pecas que ambos tenían en la nariz y las mejillas. Sin poder evitarlo Eren abrazó a la pelirroja, le recordaba tanto a Marco que por un momento temió perderla del mismo modo. La chica comprendió, y correspondió el abrazo poniéndole una mano en el pelo y la otra en la espalda. No fue hasta entonces que Eren se dió cuenta de sus actos y se sonrojó —Esto es parte del trabajo Eren. Llora lo que tengas que llorar, supéralo y lucha por aquellos que caen, porque te observan, y solo quieren verte triunfar. 

Rain repitió lo que le dijo Levi poco después de conocerla. Ella había decidido regirse por ello, y era parte de lo que la había sacado adelante. 

Le acarició el pelo con cariño, detrás suyo vió a varios de los compañeros del chico llorando. 

Se separó de Eren y le encontró sonrojado y llorando. Ella sonrió al verlo así con sus pulgares le quito las lágrimas de la cara. 

—Nos vamos en 30 minutos! —se escuchó a Erwin. 

—Ya han oído cadetes—la chica se dirigió al resto, con una sonrisa pero la voz firme.—aprovechad el tiempo que tengáis juntos. Confío en que os volveré a ver a todos. Ya me han hablado de lo capacitados que estáis, aún así no bajéis la guardia. 

Todos se quedaron callados mirándola, cuando de repente y al mismo tiempo hicieron el saludo militar, incluido Eren. 

—Sí, señora! —Gritaron todos al unísono. Rain se río y Arion dio un par de golpes en el suelo con sus cascos. Después de eso Rain volvió con su escuadrón dejando a los jóvenes solos. 

—Donde estabas, mocosa? —al volver la recibió Levi. Rain miró a Oluo con una mirada de "observa, se hace así" a lo que el resopló. 

—Estaba con Eren y sus amigos —Dijo ella—parece que han perdido a un compañero. 

—No te encariñes tanto con el crío, no durará mucho.—Dijo Levi a lo que Rain se rió porque en su momento le dijo lo mismo a Erwin sobre ella. —¿Que te hace tanta gracia? 

—Nada nada—dijo ella. —Dinos, cual es el plan. 

Levi explicó el plan con calma, igual que lo hicieron el resto de capitanes a sus respectivos escuadrones. Después de unos minutos por fin salieron fuera de la muralla.