𝒀𝒖-𝑮𝒊-𝑶𝒉! 𝑵𝑮

Capítulo 15

Capítulo 15

-¿El la beso a la fuerza?

-Si, mi hermana forcejeaba y el no la soltaba. Así que cuando vi lo que pasaba me puse furioso, lo rete a un duelo para tomar venganza, pero perder un duelo no es suficiente castigo, yo quería que se sintiera realmente mal.

-Y dime, ¿qué fue lo que pasó? ¿Lo mataste y escondiste el cuerpo? -preguntó la castaña como broma, pero manteniéndose lo más seria posible.

-No, lo derroté y deseé tanto que algo malo le pasara, que se desmayó. Estuvo en coma por cuatro meses -contó el moreno tricolor con el semblante decaído.

-Esas son coincidencias. ¿De verdad te crees tan poderoso como para desearle el mal a alguien y que pase? No sabía que eras tan irracional y supersticioso.

-Créeme que yo tampoco quise creerlo, pero por alguna razón sentía que yo lo hice, así que cuando me dijeron que había despertado fui a visitarlo. Enseguida me vio se cubrió con los brazos y me pidió que no lo volviera a enviar a ese lugar.

-¿Ese lugar? -preguntó la castaña con notoria curiosidad.

-Dijo que lo mandé a un lugar oscuro y con monstruos horribles que lo asesinaron una y otra vez sin poder morir. Es absurdo pero el estaba tan convencido de que eso le paso, que tuve miedo de jugar duelos, y los abandoné por un tiempo.

-Que historia más loca. Y dime, ¿por qué volviste a jugar?

-Bueno, amo los duelos y solo juego en buenos términos. Si odio a alguien y le deseo algun mal, no lo reto a un duelo. Solo lo golpeó hasta que pida clemencia, es más sano.

-Eso es bueno, no odias a mi hermano -dijo acompañado de una leve risa.

-No, solo quería que dejaran de molestar a los otros estudiantes, pero no le deseaba nada malo. Es más, no me pareció un chico malo, me pareció un chico estupido, que es diferente.

-No te negaré que es algo idiota aveces. -El egipcio soltó una pequeña risita al escuchar ese comentario-. Pero así lo quiero. Ahora dime, ¿crees que las personas en coma de estos dos últimos días, fueron atacadas por alguien con un poder similar al tuyo?

La cara del moreno era de total asombro, la miraba confundido y con los ojos bien abiertos.

-¿Qué te pasa? ¿Dije algo malo? -Ahora ella parecía estar enojada.

-No, solo que no puedo creer que estes dando mi historia como cierta tan fácilmente. No parecías alguien que cree en cuentos de hadas.

-¿Para que pierdo mi tiempo contigo si me lo pagas riéndote de mí? Eres un completo tonto.

No quería que ella se fuera enojada con él. Pero antes de poder disculparse con la chica que se puso de pie para largarse; ella se dio la vuelta y siguió hablando.

-Una persona muy cercana y querida por mí, puede ver el pasado y el futuro. Así que no tengo razones para no creerte.

-Es verdad, tu hermana. Yo escuché de ese rumor pero no sabía si era cierto.

-Lo es -afirmó con confianza-. Si tú quieres te ayudare a investigar esto en secreto.

-¿En serio harías eso por mi?

Ella no respondió y se acerlo a el estirando la mano.

-¿Qué? -preguntó el egipcio confundido.

-Dame tu celular desbloqueado.

Le pareció raro pero obedeció. Después de todo se lo pedía la chica más linda que había conocido.

-Listo, toma. -Le devolvió el aparato y se dio la vuelta alejándose del moreno.

Revisó los contactos del celular de primera. Luego de mirar varias veces, encontró el nuevo contacto; "TheQueen".

-Estoy seguro que le gusto -dijo para si mismo sintiéndose victorioso.

Por otro lado Berenice, Maxi y Mei decidieron regresar al colegio a ver como seguia la preliminar.

-¿Crees que ya tengan a los ocho finalistas?

-No lo se Mei, pero nos juntaremos con los chicos y si ya han acabado iremos a tu casa a contarle todo a tus padres -dijo la morena.

La pelirroja suspiró molesta.

-No les diran nada. Berenice, mis padres van a mudarse -dijo con tristeza en la voz y su amiga se sorprendió por la repentina noticia.

-¿Se iran muy lejos?

-Bere, quiero contarlo cuando estemos todos juntos.

-Esta bien -dijo la egipcia mientras le acariciaba el hombro a su amiga.

Mientras tanto el de cabello blanco las ignoraba completamente, caminando adelante y con la cabeza en alto. Tenía una expresión de estar aburriendose de ellas.

-Sabes, por más que haya ayudado a encontrarme, me cae muy mal este tipo.

Berenice rio por el comentario y no tardaron en llagar al colegio, encontrando a Hayato, Makoto e Izumi en la entrada.

-¡Mei! -gritaron al unísono y se acercaron a ella, siendo abrazada primero por Hayato.

-Chicos, estoy bien -dijo para tranquilizarlos y respondió con felicidad el abrazo de su amigo.

-¿Ya tienen a los ocho? -preguntó Berenice.

-Faltan un par de duelos creo -dijo Makoto.

-Mei, ¿estás bien? -se oyó la voz de Aknamkanon que venía corriendo, al haberla notado de lejos.

-¡Bien, no paso nada! -respondió la chica con una sonrisa, y la luz parpadeante de las pulseras dieron la alerta de que ya tenian a los ocho, y por hoy se acabaron los duelos.

-¡Vamos a ver! -exclamó un alumno que entro corriendo con sus amigos. Así que lo chicos decidieron hacer lo mismo.

-Atención alumnos. Ya tenemos a los ocho y les daremos un día para prepararse para la fase final de estas clasificatorias. Solo tres podrán compartir en las intercolegiales.

Tomo algo de aire para seguir sin perder de vista los rostros nerviosos de lo estudiantes.

-Los ocho son: Makoto Jonouchi, Aknamkanon Moto, Miku Moto, Hayato Honda, Seto Kaiba Jr, Izumi Jonouchi, Megumi Kaiba y Kaito Yamada.

Las quejas de que todos los años era lo mismo; siempre ganando los hijos de duelistas legendarios, se dejaron oír con rapidez.

-¿Cómo Seto Jr. es uno de los ocho si nunca antes compitió en ningún torneo? Por lo que yo sabía era un asco jugando duelos.

-No deberían permitir que profesionales como Megumi Kaiba participen en eventos como estos. Gana todos los años.

-No deberían competir si tienen profesionales en su familia tan siquiera. ¡Tienen ventaja!

-¡Apoyemos a Yamada kun!, nadie es duelista en su familia.

Aknam resopló molesto al escuchar todas las quejas de sus compañeros.

-Chicos, vámonos mejor. Así descansan para la próxima ronda, y les cuento algo importante en un lugar más cómodo -propuso Mei Otogi.

Sonrieron y asintieron como respuesta, siguiéndola fuera del colegio.