-¡Bienvenidos sean todos a nuestro maravilloso proyecto! -Anunció la voz cantarina de un juglar que danzaba alrededor-. Hoy nuestra compañía itinerante tiene el placer de ofrecerles a los habitantes de esta plataforma una invitación singular... ¡Hey...
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¡¡El castillo de la reina malvada se encontraba de fiesta!! Era el baile anual de invierno y todos los soberanos estaban invitados a la gala. En una esquina se podía ver a un caballero Piñatero acompañado de un gato naranja y un extraño ser con cascabeles, a su derecha, escondido entre la oscuridad, se encontraba el ejecutor Kyler acompañado por un raro demonio y por último, sentada en el centro de la sala, vistiendo un delicado vestido de oro y plata, se encontraba Regina observando con aburrimiento la fiesta.
—Su Majestad, no se le ve contenta ¿le pasa algo? —preguntó Henry, su leal sirviente.
—Me encuentro aburrida, todos los años son lo mismo y ya me aburro. —contestó ella mientras se le escapaba un bostezo.
—¿Le gustaría realizar una entrevista? —preguntó Henry aprovechando la oportunidad para que la reina entrevistara.
—Si, no estaría mal, aquí esperaré mientras lo traes.
Henry desapareció entre la multitud, apareciendo minutos después acompañado de una hermosa dama.
—Bueno —dijo la reina acomodándose en su asiento, comencemos con esto. ¿Como y hace cuanto distes con la plataforma naranja? La joven la miró un poco asustada y en leve susurro respondió.
—Hace unos cuatro años por medio de una amiga que ya tenía Wattpad.
—Y desde entonces ¿cuántas obras tienes publicadas?
—Un total de 4 —respondió ella abrazándose el cuerpo, la verdad se veis muy nerviosa.
—No estés nerviosa —le dijo la reina —hoy estoy de buen humor, así que dime, a la hora de escribir, ¿en qué te inspiras? ¿Como es tu proceso creativo?
—Pues —dijo la joven más calmada —me inspiro en vivencias personales o en lo que observo a mi alrededor, dado que las personas en sí y ciertas situaciones tienen mucha información que se puede utilizar. A veces también me inspiro en la música.
—Y cuando lo haces, eres de las que investiga antes o se deja guiar por las musas? —preguntó interesada la reina.
—En realidad sí investigo si así lo requiere algún tema y a la vez me dejo guiar. Busco un equilibrio entre las dos
—Y ¿Que encontrarán los lectores entre las páginas de tus obras?
—Pues muchas reflexiones sobre lo que a veces creemos que es lo correcto, cuando vemos solo lo que queremos ver, también encontrarán algo de misterio, acción y amor.
—Ahora háblame de tí —pidió la reina mirando de arriba a abajo a la joven
—¿Cuales son tus gustos? Pelis favoritas, series, libros, escritores...
—Pues me gusta mucho escuchar metal, música épica, medieval, nórdica...de casi todo la verdad. Mi película favorita definitivamente es Star Wars. Series la verdad es que no suelo ver. Adoro los libros de fantasía, de vampiros, paranormal y de misterio y escritores, la verdad es que no tengo ninguno que sea mi favorito, dado que cada uno tiene su estilo que los hace únicos.
— ¿Hay algún género género que te gustaría escribir y no t atreves?
—Mmmm —reflexionó —Me gustaría escribir un fanfic, pero la verdad es que no me atrevo. —¿Que eslógan propondrías para una campaña Mundial de lectura?
— Creo que sería: leer te permite ver más allá de lo que tus ojos perciben.
—Me gusta ese eslogan —estuvo de acuerdo la reina. Regina iba a formular la siguiente pregunta cuando Henry se aclaró la garganta y acercandose al oído de la reina, le dijo.
—Señora, ella es una de las ganadoras de los premios lust, recuerde preguntarle sobre eso.
—A, si, gracias Henry —la reina miró a la joven y preguntó. — cuéntame de tú experiencia en los premios lust, ¿estuviste de acuerdo con el proceso evaluativo? ¿Algún consejo?
—La verdad es que fue una experiencia muy buena, más el hecho de saber qué aspectos debía mejorar. Por otra parte, no hay nada que decir en cuanto al proceso evaluativo, a mi parecer se ejecutó todo de una buena manera.
—Me complace escuchar eso, ahora, ya para culminar, ¿qué le aconsejarías a los nuevos escritores?
—Que nunca se rindan y que sean perseverantes a pesar de las dificultades que se le puedan presentar en el camino y que luchen por sus sueños. Eso es lo más importante.
La reina le agradeció a la joven y esta, despidiéndose con la mano, desapareció en la multitud.
La reina sonrió complacida mientras Henry se le ha cercana y extendía su mano.
—Lo hizo bien su Majestad —le dijo —ahora ¿me haría el honor de poder bailar conmigo este vals?
—Con gusto lo haré —respindio ella sonriendo. Ambos se internaron en la multitud y bailaron toda la noche.
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