Te Reto a Descifrarme

Capitulo 3: ¿Por qué lo dices tú?

Camine molesto como pocas veces en mi vida, realmente la bruja rubia que cargaba en mi hombro tenía una habilidad especial para sacarme de quicio y mostrar mi peor lado.

Ella se retorcía mientras gritaba todo tipo de palabras en ruso que no podía ni quería entender.

Durante varios temerosos momentos que creí genuinamente que nos íbamos a caer por las escaleras, por suerte todas y cada una de las veces logré recuperar el equilibrio en el último segundo salvándonos a ambos.

Mi mano picaba de ganas de darle una nalgada a la rubia que no dejaba de revolverse, inicie una cuenta mental contando todas las razones por las cuales sería una mala idea.

Razones que desaparecieron de mi cabeza cuando los dientes de la rubia se clavaron en la parte baja de mi espalda, los pensamientos racionales se me borraron y antes de que me diera cuenta el sonido del impacto resonó por el pasillo de mi habitación.

La cual por algún milagro, habíamos logrado llegar sanos y salvos.

-¡Tú maldito пещерный человек (1)!, ¡¿Cómo te atreves a ponerme una mano encima?!-.

¿Yo qué?, ¿Qué diablos me llamo?

La tuya también por si acaso.

-Cállate, has acabado con mi paciencia el día de hoy, de no ser porque eres amiga de la hija de mi Prez estaría sacando tu culo a empujones del club-.

Eso era cierto, nunca me gusto que hubiera dramas sin sentido en el club, siempre tuvimos mierdas suficientes que atender que estar haciendo de niñera de mocosas que por traer una moto o una chamarra de cuero ya eran lo suficientemente duras para enterar en este mundo.

En general, este no era un ambiente en el que puedes entrar como si fuera una visita al centro comercial, debías estar dispuesto a enterrar tu pasado para transformarte en una nueva versión en cuanto te daban tu primer parche de prospecto.

Y la mayoría de las veces las personas no están listas para soltar todo y no dar marcha atrás.

¿Y quién las puede culpar?, la mayoría tampoco tuvo un pasado tan miserable como el nuestro.

-¡Bájame en este momento si quieres tener hijos en el futuro!-. Me volvió a amenazar ganándose el segundo azote de mi parte.

Sonreí un poco por el sonido de indignación que dejo escapar, realmente me producía placer molestarla.

Cruce los pocos metros que quedaban a la puerta de mi habitación con la diversión burbujeando desde el fondo de mi estómago. Abrí y nos metí dentro asegurándome de cerrar con seguro.

A diferencia de Hell, mi cuarto siempre estaba limpio y en perfecto orden, detesto la suciedad.

Mi cama, a diferencia de casi todos los cuartos, era de un tamaño king size, (dos colchones matrimoniales juntos), que ocupaba casi un tercio del espacio, pero que era mi mayor placer y adoración.

Sabiendo lo suave y cómoda que era, no tuve ningún remordimiento cuando lancé a la bruja por el aire hasta aterrizar en ella. Y solo fueron todos los años de costumbre que evitaron que me riera a carcajada limpia de la cara de espanto que tenía la rubia.

-Я проклинаю тебя в этой жизни и в следующей. Надеюсь, у тебя на ногах грибок, и женщины сбегут от тебя из-за своего неприятного запаха (2)-. Casi podía ver el fuego que le salía de los labios mientras pronunciara lo que fuera que estuviera diciendo.

Y justo como si no tuviera ganas suficientes de ahorcarla, la bruja rubia busco desesperadamente a su alrededor hasta que se contentó con mis almohadas para comenzar a lanzármelas con saña.