Mine (Stucifer)

Capítulo 23

El embarazo iba bien, Stiles ya tenía cuatro meses y lucía orgulloso su barrigota, que para los más cercanos era de embarazado y la gente ajena a ellos de comer mucho. En el infierno gracias a Lucifer Abaddon y Crowley estaban reinando juntos, eso fue conseguido después de que Rowena mencionara que ella había ayudado a Lilith y Abaddon acabara con ella de la forma más cruel que jamás nadie había inventado. 

Lucifer no estaba del todo contento con tener el estatus de Arcángel caído, quizás solo fuera una treta de su padre y con e tiempo sus alas volvieran a ser blancas, pero no podía decirlo con certeza, aunque sí que estaba aprovechando su aumento de poder. Lucifer había aceptado casarse, pero sería a través de los rituales de los lobos, tenía claro que sí debía ser bajo la mirada de un dios no fuera bajo la mirada de su padre.

- ¡Basta ya! Estoy embarazado no inválido.- Dijo Stiles antes de liberarse del agarre de Isaac y Liam, estos hicieron una mueca y se fueron dejando al hechicero en el salón del loft.- Déjame ir contigo al infierno.- Suplicó mirando a Lucifer, este sonrió antes de acercarse y coger la barbilla para dejar un beso suave en sus labios.

- No puedo dejarte bajar en tu estado.- Este resopló antes de que Lucifer mordiera su labio con suavidad.- Solo sera una noche, debo controlarlo es mi reino.- Stiles asintió con cansancio antes de abrazar al demonio con fuerza.

- Dile Aba que suba algún día, se le echa de menos.- Lucifer sonrió antes de asentir y besar los labios de este de nuevo.- E invita a Crowley a la boda, el infierno puede estar unas horas sin rey.- Lucifer se rió antes de asentir mirando a Isaac, este se acercó y ayudó a Stiles a sentarse ganándose otro resoplo de su parte.

Lucifer desapareció antes de que los gritos empezaran, nunca había sentido dolor de cabeza hasta que los lobos empezaron ayudarle hacer todo. Lucifer  fue recibido por muchos papeles y una Abaddon enfadada, cogió lo papeles y quemó los que no importaban o estaban mal. Mientras que los otros los archivo, cada vez más almas recolectadas. Lucifer se acercó a la sala del trono donde ahora había dos tronos, Crowley y Abaddon estaban sentados en ellos.

- ¿Habéis hecho lo del purgatorio?- Abaddon asintió y Lucifer estuvo de acuerdo con eso. Suspiró antes de sonreír mirando ambos demonios.- Stiles quiere que vengáis a la boda, es pasado mañana, con que dejéis a uno de los demonio al cargo durante unas horas todo irá bien.- Abaddon saltó llena de alegría antes de reírse contenta abrazando a Lucifer.

- ¿Pero eso no es como todo lo que no representas?- Lucifer lo miró mal antes de resoplar enfadado.

- Por eso no me voy a casar como mi padre manda, sino como un diosa pagana dicta.- Dijo haciendo que Crowley sonriera divertido con la situación. Abaddon desapareció dejando a los dos solos.- Habrá cazadores y ángeles, así que por favor compórtate y nada de tratos con mis invitados.- Le dijo a Crowley antes de pasearse por su infierno. Debía asegurarse que todo saliera bien.

*

Lucifer estaba feliz, la ceremonia había sido bonita no iba a mentir. Para su sorpresa Dios había bajado a presenciarla y no estaba enfadado por no casarse bajo sus reglas. Lucifer le preguntó por su estatus de Arcángel caído y su padre le explicó que era su regalo de disculpas. No contento con todo eso le había dado otro regalo a Stiles, este viviría tantos años como su pareja lo hiciera, quitándoles así un problema a la pareja que ahora se miraba felices. Ya que el miedo de la muerte de Stiles había sido un pequeño malestar en los pensamientos de Lucifer. En esa celebración Stiles consiguió convencer a Lucifer de que invitara a su padre al nacimiento del pequeño, como mínimo conocerlo y a regañadientes el demonio había aceptado esa petición haciendo que el hombre abrazara con cariño a su hijo predilecto. Noah y Parrish se tensaron un poco al conocer al padre de Lucifer pero al ver que no planeaba hacer nada malo se relajaron, Dios quedó maravillado con la pequeña criatura que su hijo había creado, fuera lo que fuera la pequeña niña era una hermosura. Todos comieron y bebieron sintiéndose a gustos con todos, con únicamente un total de cinco humanos todos podían hablar de todo sin preocupación. Peter sorprendió a todos los invitados apareciendo con Christopher como pareja, haciendo que hasta los Winchester quedaran atónitos.

- ¿Sabes? Viendo a todos comer entre risas me hace ver que no era tan mala idea lo de casarme contigo.- Dijo Stiles mirando a Lucifer mientras éste acariciaba la barriga de este, Lucifer puso una mueca antes de acercarse y besar los labios de este con cariño.

- Gracias Stiles, me tranquiliza saber que habías dudado.- Stiles se rió con cariño antes de apoyarse en el hombro de este.- ¿Ibas a huir?- Preguntó divertido, Stiles asintió antes de subir la mirada divertido.

- Claro, como puedo correr tanto con esta pequeña sandía encima.- Dijo antes escuchar la risa del demonio mientras abrazaba con cariño y miraban a sus familias y amigos.

Todos hablaban y pasaba un buen rato. Incluso la gente había empezado hablar con Dios. Stiles acabó sentado en el regazo de Lucifer antes de empezar a besarle con cariño, las manos de Lucifer acariciaron el cuerpo de este mientras disfrutaba de la sensación de la barriga de Stiles haciendo presión. Crowley carraspeó interrumpiéndolos antes de sonreír y darle su regalo de bodas.

- Debo volver para controlar a los demonios.- Dijo mientras veía a Stiles sacar un conjunto de joyas de apariencia muy cara.- No se exactamente de qué siglo son, pero eran de la realeza, así que disfrútalas.- Dijo antes de despedirse de ambos y volver al infierno. Stiles cogió la cadena fina de oro antes de mirar a Lucifer que encogió los hombros.

- Debe ser alguno de sus tesoros, no te dejes influenciar por el precio que deberían tener.- Dijo antes de rodear la cintura de este y acariciar la barriga con cariño. 

Stiles suspiró mientras veía a sus invitados esperaba que no recibiera más regalos de ese tipo, no estaba acostumbrado. Stiles sonrió mirando su mano donde el anillo negro descansaban, había decidido mantener ese anillo de compromiso como su alianza mientras que Lucifer llevaba uno negro también pero con tres piedras preciosas de color ámbar, como sus ojos de brujo. Ahora estaba casado, y en espera de un hijo, no podía pedir más.

*****

Siento comunicaros que quedan como mucho dos capítulos de esta historia. Muchas gracias por el apoyo y un beso enorme para todos.

❤❤❤❤❤❤❤