el principe heredero del sol

13°

Que nervios chaval-dijo el español ya parado esperando a aquella mujer que le robo el corazón.

El español tenia la vista panoramica , veia a todos y cada uno de ellos.

Realmente estaba nervioso aquel español , realmente este seria su primer matrimonio ,oh bueno , su primer matrimonio con la bendición de Dios.

[Con Virú]

Mexico tienes los anillos?-dijo la bicolor antes de irse a recibir a su madre.

Si los tengo estan aqui-dijo el tricolor con los anillos ,tales posaban en una almohadita.

Bueno , te dejo ,debo salir para recibir a la señorita Italia-dijo la bicolor.

Virú , que hacias con Rusia?-dijo e tricolor enojado , no le agradaba nada aquel soviético.

Oh , el vino a recogerme cuando estaba con la señorita Italia-dijo la bicolor acomodándose su vestido.

No me gusta que estes con ese chico-dijo el mexicano.

Señorita Virú ,ya es hora de que valla con su madre-dijo un señor que trabajaba ahi. 

Ah , si ,ahora tengo que ir , ahi te veo mex-dijo la bicolor llendo donde la salida para recibir a la italiana.

[Con Virú]

Señorita por aqui- dijo aquel señor.

Si-dijo la bicolor siguiendo al señor , pero lo que no conto que un chico con gafas se encontrara caminando.

Ahm ,lo siento-dijieron al unisono aquel niño de gafas y "la" bicolor.

Disculpame -dijo aquel joven ayudando a levantar a la bicolor.

Tranquilo , yo tambien por no fijarme -dijo la bicolor avergonzada.

Señorita debemos ir donde su madre-dijo el sujeto al regresar.

Oh si , disculpa me tengo que ir-dijo la bicolor acomodandose su vestido.

Ah-el joven no pudo decir nada , solo sabia que aquella rosa de tela que cayo del vestido de la bicolor.

Quien eres?-se dijo para si mismo aquel joven con lentes.

[Con Italia]

Estas lista?-dijo la francesa sentada al lado de la italiana en aquella limosina blanca.

Si-dijo con notables nervios aquella tricolor.

Tranquila , hoy sera el mejor dia de tu vida-dijo la francesa intentando calmar nuevamente a la italiana.

Madre ya llegamos-dijo el canadiense viendo por la ventana.

La puerta fue abierta por un mayordomo blanco.

De ahi bajaron las amigas , y el canadiense.

Bueno , debemos entrar-dijo la francesa - voy a estar entrando con Canada , tu tranquila.

Okey...-dijo la italiana agarrando su buque de rosas blancas.

Vamos madre-dijo la bicolor con la canasta llena de petalos de flores.