la diafanidad de pensar

¿LA IGNORACIA ES LA FELICIDAD?

      Que daría por borrar un suceso deprimente, cuánto costaría sacar algo de mi mente, si ser feliz es olvidar me parece estridente.

viví momento aberrante, donde me sentí humillado, donde destrízate mi moral, en ti confié y tuve que regresar a pie, me destrozaste la real verdad.

No creía que fuera a pasar, para mí era una herejía, no aceptarme a mí mismo por tu culpa, pase de los perores momentos, no era el destino, ni soy el predilecto, me negué a mí mismo por ti.

Siento rabia porque no sabía que era lo correcto, rabia porque había momentos Que quería y se fueron, rabia porque me cambiaron lo imperfecto por perfectas causas.

No me canso de negarme, estoy abrumado por ti, gracias por castigarme sin saberlo, tumbado con el estado de ánimo pésimo, gracias por enseñarme en camino gracias por apañarme por un parvo de tiempo, aún vivo.

¿Que si es la felicidad? Pues sí, pero la vale pena recordar, y sobre todo enfrentar esos vituperios y seguir, varios sentimientos negativos sirven para el crecimiento propio.

De mi con mucho amor.

Para: mis ganas de no saber que querer.