Bright side of the sun (Moonsun)

7

"Como tú quieras,

siempre tomas las riendas

(...)

Prometí no terminar contigo,

comenzaré a liberarme de tus brazos

y viviré como me plazca

(...)

Estoy lista para seguir mi propio

camino.

(...)

Esto no es divertido,

la forma en que lo haces,

esto se termina ahora."

Egotistic-Mamamoo

💟💟💟

Los padres de JiHo se habían divorciado cuando él tenía apenas 13 años. Estaba pasando por una etapa que ya de por sí era difícil y con las constantes discusiones de sus papás se había vuelto aun peor. Se había sentido culpable de la separación, y tuvo la creencia de que ese matrimonio había terminado por su causa. Él recordaba lo miserable y sólo que se sentía durante su adolescencia, gracias a todos los problemas que atrajo el divorcio. Había sido una experiencia realmente desagradable.

-No quiero que DakHo pase por eso. Sé cómo se siente vivir un proceso de divorcio. Es en verdad lamentable, más si hay hijos de por medio. Sobretodo porque el nuestro aún es muy pequeño. -explicó JiHo cuando su esposa preguntó sobre su negación.

-Debiste pensar eso antes. Además, si la experiencia del divorcio de tus padres fue mala para ti, fue porque eligieron el camino difícil. -discutió puesto que tenía conocimiento de la situación que vivieron sus suegros. -El hecho de no ser voluntario, no sólo hace más largo el proceso, sino que imagino que además es más traumante. Nosotros podemos hacerlo fácil, sin tener que pelear. Y ambos podemos seguir en contacto con el niño. Esto va a ser un asunto fuerte para él, pero podemos hacerle el menor daño posible si solamente aceptas que nos divorciemos cuanto antes...

-Vamos, no puedes estar hablando enserio, Yong.

-Oh, estoy hablando muy enserio.

-¿Sólo así? ¿quieres que nos divorciemos sin siquiera tratar de arreglarlo? Al menos merezco otra oportunidad, ¿no lo crees?

-No debías esperar a que yo lo supiera para tratar de arreglarlo. Esperé mucho tiempo, dándote más de una oportunidad. Tuviste mucho tiempo para recapacitar, para decidir cambiar tú mismo.

Él negó. -Aun así, no estoy dispuesto a dejar que esto termine de este modo. Si tú quieres destruir nuestra familia, no será con mi consentimiento.

-No puedes ser tan descarado. Si tanto te importa nuestra familia, ¡¿por qué fuiste a meterte con esa mujer?! -para ese momento sus ojos ya estaban llenos de lágrimas de ira, que se negaban a salir y terminaban acumulándose.

-Porque me enamoré... -admitió finalmente.

-¿Entonces por qué no te quieres divorciar? -preguntó la rubia volviendo a bajar la voz.

-Sé que no quieres escuchar ninguna explicación, pero escuchame... Yo te amé, Yong... Con todas mis fuerzas. Me encantaba la idea de haberme casado contigo... Pero después de aquel día... -suspiró recordando el episiodio esquizofrénico de su esposa. -Tú estabas completamente transtornada...  Y, sinceramente... Me dio tanto miedo. Me paralicé y no supe qué hacer. Me sentía tan inútil después de eso. A raíz de ese día supe que no podría llevar una vida normal contigo... Que yo no era la persona indicada para ti, porque no puedo lidiar... -hizo una pequeña pausa, buscando las palabras correctas.

-¿Conmigo? -adivinó la rubia.

-No, no era eso lo que quería decir... Me refiero a que no puedo sobrellevar tu enfermedad. Eso podría ser peligroso para ti, para mí e incluso para el niño. Y... Siendo franco... Es algo que personalmente me inquieta. -Hubo un largo silencio en el que el ambiente se volvió incómodo y lleno de tensión. -En ese tiempo yo estaba inseguro de querer seguir con nuestro matrimonio... Y entonces... Apareció ella... -dijo bajando la mirada. -En ella encontré el alivio y el descanso para mis angustias... Con el tiempo me enamoré... Sentir todas esas emociones de nuevo me devolvieron la vida... Pensé en decírtelo desde el principio, pero creí que ocultarlo sería lo mejor para mantener unida nuestra familia... Sobre todo por el bien de DakHo. Jamás lo hice con el propósito de que tú sufrieras...

-Aún así he sufrido... -debió suponer que su maldito transtorno habría sido el causante... Después de todo, Eric también la había dejado cuando le diagnosticaron la esquizofrenia... Fue una tontería pensar que con JiHo sería diferente. -No voy a pedirte que sigamos juntos, ni que dejes a esa mujer, o que me prometas cambiar... Solamente quiero estar en paz. Sin necesidad de crearnos más problemas...

-No voy a aceptar eso, YongSun. Piensa en nuestro hijo...

-¡Tú eres quien no pensó en nuestro hijo! Tampoco lo estás haciendo ahora...Es por él que quiero que lo resolvamos de la manera más tranquila y rápida posible. Yo ya no lo soporto, Dak no merece vivir en una mentira como ésta, e incluso tú mereces tu libertad para poder estar con quien realmente amas. -Sus propias palabras le dolían. La vampiresa, que continuaba escuchando todo, volvió a sentir aquel impulso que jalaba su cuerpo deseando arrastrarlo hasta estar junto a YongSun, pero consiguió reprimirlo. -No entiendo por qué te empeñas en hacerlo tan difícil.

Él miró al suelo. Parecía estar pensando... La rubia tuvo la esperanza de que entendiera sus palabras y que se diera cuenta de que lo mejor era terminar con todo de una vez. Sin embargo, su esperanza desapareció cuando lo vio negar repetidamente, sin levantar la mirada. -Ya lo dije y lo sostengo. No voy a darte el divorcio, por lo que tú tienes que quedarte aquí, conmigo. -La rubia rodó los ojos y comenzó a caminar hacia su habitación, al parecer no iba a obtener nada de una conversación civilizada y no tenía ánimos de discutir. - De todos modos mientras estemos casados no puedes dejarme a menos que quieras llevar cargos por abandono de hogar. -Advirtió. -Menos aun podrías llevarte al niño, eso te daría más problemas. -Continuó hablando JiHo mientras iba detrás de ella hasta que llegaron a su habitación.

-¿Crees que no lo sé? quiero hacer las cosas bien, no voy a irme a ningún lugar hasta que nuestro matrimonio haya terminado de manera legal. -dijo YongSun mirando con palpable furia a su esposo, su rabia creció al verlo sonreír triunfante. -Sin embargo, si voy a quedarme aquí, no pienso volver a dormir contigo, jamás.

-¿Estás echándome de aquí? -preguntó con cierta sorpresa. -No puedes hacerlo, también es mi habitación.

-No puedo sacarte de la casa, pero si de la habitación. -respondió ella cruzándose de brazos. -Si no te vas tú, me voy yo. -dijo mirándolo con fijeza durante algunos segundos en los que no hubo respuesta. -Bien, como quieras. -Añadió y se dispuso a salir, pero JiHo la detuvo tomándola por el brazo.

-Quedate aquí, ya me voy. -dijo inexpresivo y se giró para salir de la habitación, se dirigió a la de su hijo. Abrió la puerta y lo encontró profundamente dormido, se acercó y lo movió un poco. -Dak... -el niño se removió al tiempo que articulaba "¿Sí?" -Yo... Tuve una pesadilla. ¿Puedo dormir contigo? -preguntó y recibió un adormilado "mjm"

Continuará...