one - shot's || BBB ✓

Wakiya Murasaki

Séptima trompeta

- ¡Estúpidos humanos, su destrucción acabará con el toque de la última trompeta ;cuando la puerta del Génesis sea cerrada y el caos reine el universo! - aquel rubio con ojos rojos y mirada perdida elevó su mano, de ella apareciendo una trompeta de oro con el número siete impregnada en diamantes dorados

La chica de ojos verdes miraba aterrada como aquel muchacho de orgullo inquebrantable era elevado por tres pares de alas celestiales que salían de su espalda hacia el oscuro cielo cubierto de nubes carmesíes y decorada con un ejército de miles de ángeles ,liderados por cuatro de seis alas gigantescas

El fin del mundo ya estaba comenzando

Ella a como pudo logró levantarse, su espalda ardiendo en un incesable dolor y su mente siendo atacada por miles de recuerdos que su alma le enviaba

Elevó su mirada y una voz en su interior le llamó. Debes matarle, antes de que él te mate a ti.

- No - se dijo, respondiendo a aquella voz - hayare la forma de no terminar así, no otra ves -inconcientemente dejó salir lágrimas que no sabía que tenía retenidas

- ¡Debes hacerlo, ___! - otro rubio le hablo desde atrás, luciendo un traje que extrañamente le parecía familiar - ¡Mikaela está siendo obligado, debes desacerte de él antes de que toque la séptima trompeta!

- ¡Pero Rantaro! - sollozó

No quería. No deseaba ver cómo los dos se mataban por milésima vez obligados por seres los cuales se autoproclaman traicionados

¿Que tipo de tabú había roto hacía siglos? ¿Porque sus pecados y el de su amado no eran perdonados, almenos solo los de Wakiya?
No recordaba el deseo que habia vuelto realidad en su primera vida, y no recordaba porque el nombre tanto de Miguel, y Mikaela les sonaban nostálgicos

Solo sabía que su yo de antes le dictaba con gritos desgarrantes que no lastimara a su amado ángel.

Aquel ángel que tocaba una melodía aterradora haciendo el llamado del fin del tiempo ,un ángel con un rango más alto que todos los de su alrededor

El Serafín del final

La ira, el amor, dolor y tristeza abarcaban su corazón, atacandolo como infinitas dagas queriendo que este explotara y dejara salir todo su poder. Uno que no quería dejar salir, sabiendo que terminaría como todas las veces anteriores

Suspiros y un fluido de color negro rodeandola haciéndose formas de alas mal formadas que la la elevaba a los cielos

Una rara espada de sal platinada, parecida a un cetro en su mano y en su cabeza, un par de cuernos

La segunda trompeta ,el rey de la sal

Sus ojos ahora de un vívido e impecable escarlata haciendo resaltar unos destellos verdes que salían como rayos de su cuerpo

La última pelea, la reencarnación del ángel Miguel [Mikaela] y el Serafín corrompido Luzbel [Yuuichirou], peleando obligados a cumplir el castigo por sus pecados. La maldición del renacimiento y el ciclo infinito de sufrimiento