Sakura

Capítulo 12: Celty Sturluson

{Narrador Omnisciente}
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Lo primero que vió al abrir los ojos fué al mismo Izaya tranquilo de la otra noche. Al parecer estaba cansado, Yumi se levantó perezosamente y se dirigió a su nuevo cuarto a buscar algo de ropa. Al abrir la puerta vió a las hermanas del pelinegro encima de su nueva cama, las dos se abalanzaron a abrazarla y como de costumbre Yumi intentaba apartarse para que no muriera aplastada.
-—Mairu: Yumi-chan ¿Qué haces en la casa de Izaya tan temprano?
—Izaya(recostado en la pared con su típica sonrisa): No hagáis como si no lo supiérais. En la madrugada os lo comente...
-—Yumi: ¡Izaya!
—Izaya: No quería que se volvieran locas cuando vinieran y tú tuvieras que contarles lo ocurrido.
—Mairu: ¡Fantástico! ¡Ya nos exhibiste!
—Kururi: Yumi

Llama la atención de la pelicobre, que se da la vuelta y la mira.
-—Kururi: Gome'nasai
-—Yumi: No pasa nada. Son cosas que pasan
-—Mairu: ¿Estás segura de que no ha sido un accidente? Algún enemigo...
-—Yumi: ¡Qué va! ¡Qué va! De hecho...
-—Mairu: Yumi-chan, como nos das pena queremos ayudarte en lo que se refiere a la ropa. ¡Vámonos a Ikebukuro! ¡Te invitamos!
-—Yumi: ¿No será que me invitáis y yo lo pago todo?
-—Kuriri: No, te lo compramos.
-—Mairu: ¡Es una forma de agradecerte por la ropa que nos compraste!
-—Yumi: No hace falta tanta molestia, de verdad...
-—Mairi: ¡Vámonos!
-—Yumi: Izaya...
—Izaya(riéndose): Tómate el día libre

Cada una la coge de la mano y se la llevan a la calle. Al llegar Mairu se suelta de su mano y se para firme en la carretera, un taxi se detiene para no atropellarla y Kururi empuja a Yumi dentro del coche. Mairu entra y le dice la dirección. Fué todo extraordinariamente rápido.
-—Yumi: ¿Vuelven a rodar otra película de Kasuka?
-—Mairu: No ¡De verdad que queremos ayudarte!
-—Kururi: ¿Y el regalo para Celty?
-—Mairu(susurrando): No digas nada...
-—Yumi: Lo escuché, no pasa nada. De hecho muchas gracias por querer comprarme ropa en este momento...

Durante todo el trayecto estuvieron en silencio, pero no era un silencio incómodo. Yumi perdía su mirada en el paisaje que se podía disfrutar desde la ventana, aunque por más que quería no lograba dejar de pensar. El taxista las dejó en el lugar indicado y recibió su dinero. Nada más salir las gemelas arrastraron literalmente a la pelicobre por las calles e hicieron que se probara todo tipo de ropa.
-—Mairu: ¡Vamos a esta tienda!
-—Kururi: No, a esta
-—Yumi: ¡A dónde queráis pero hay que salir de la carretera!

Preguntaron la hora a un señor y les dijo que eran las 14:50.
-—Yumi: ¿Pero tanto tiempo ha pasado?
-—Mairu: ¡Yumi estamos 21 de diciembre! El día más corto del año
-—Kururi: Solsticio de invierno
-—Yumi: ¡Espera! ¿Ya vamos a acabar el año?
—?: ¡Oye, mirar por dónde pasáis!
-—Yumi: ¡Lo siento!
-—Mairu: Vieja gruñona...

Se metieron en casi todas las tiendas. Las gemelas mientras ella se cambiaba se iban a comprar un regalo para la jinete sin cabeza. De vez en cuando la pelicobre se llevaba un susto al no ver al par. Entraron en una tienda de ropa juvenil con hermosas camisas y vestidos.
—Yumi: Espera ¿Cómo podréis permitiros gastar tanto?
-—Mairu(emocionada): ¡Un tal Takeru nos lo dió!
-—Yumi(deja una camisa verde): No deberíais confiar en extraños. ¿Sabéis por lo menos quién es?
-—Kururi: Compañero de Iza-nii
-—Mairu: Más bien él es un tipo que entrega su información a alguien. Se llevan bien ¡Y nos dió este dinero de parte de su jefe!
—Yumi: Esto no me da buena espina...
—Mairu: ¿Esto es todo lo que te llevas?
Tú tranquila, que nos dió mucho dinero.
—Yumi: En ese caso me voy a los probadores a probarme esto...
-—Mairu(coge un vestido azul oscuro): ¡Qué bonito! ¡Te quedaría muy bien, lo compramos! ¿No Kuru-nee?
-—Kururi: Si
-—Yumi: No se si lo usaré alguna vez...
-—Mairu: ¡Pruébatelo!
-—Yumi: ¡Primero lo que llevo!