Capítulo 48: Angustiosa verdad detrás de la piadosa mentira

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-Autora: ¡Bien, comencemos a...! -(ve el estudio lleno de globos y confeti con forma de corazones)- Oh, no. Ya empezamos...

-Omnisciente(con un ramo de flores): Autora-chan, vida mía, yo por usted soy capaz de traerle al dios Apolo a sus pies si su inspiración escasea. Usted es la musa que reside en mis cuerdas vocales. Solo la luz de las estrellas y la belleza de la luna puede servirme como comparación para describir mi gozo al narrar su historia. Ni la intensidad del fuego ni la furia de Zeus puede compararse a los clímax de su creación.

-Autora(mano en la frente): Dios mío, dios mío...

-Suegra de Omnisciente: ¿¡Cómo que clímax!? 😡

- Omnisciente: ¡Suegrita, no malpiense! >:v Ejem... ¿Dónde me quedé?

-Alan(hilo de voz): Leyendo el tercer párrafo.

-Autora: ¡Alan! ¡Por todos mis lectores! Tienes muy mala voz.

-Alan: Leí demasiado la otra vez.

-Omnisciente: ¿Cómo no te vas a quedar sin voz si narras un capítulo ENTERO por día? Los capítulos de la autora son larguísimos. Si yo narrara un capítulo por día me quedaría afónico, o peor, padecer de disfonía ¡Y eso es lo peor para un narrador! Por eso solíamos quedar varios días para narrar un capítulo, y haciendo recortes con las otras grabaciones para para no provocar lesiones innecesarias en las cuerdas vocales ni en la garganta. Es que Alan... ¿Cómo puedes descuidarte tanto?

-Autora: Que remedio. Tendré que recurrir de nuevo a ti, Omnisciente. 😥

-Alan: Tampoco tengo tan mala voz. Puedo seguir narrando... siempre y cuando sea breve.

-Suegra de Omnisciente: No deberías. El novio de la amiga de la prima de mi marido fallecido, que en paz descanse-(hace la señal de la cruz)- quedó ronco de por vida por hiperfunción vocal. Y si sigues abusando de tu voz podrías padecerla también.

-Autora: En la gente normal la hiperfunción vocal no es tan exagerado.

-Omnisciente: Mientras que para vosotros abusar de la voz se cura con un buen hábito y descanso, para los de condición «omnisciente» es uno de los mayores causantes de pérdida de la voz. Tenemos la laringe y la glotis mucho más desarrollada y sensible que el resto. Cualquier cosa podría provocarnos laringuitis, disfonía, afonía etc.

-Autora: Pues bien que gritas... -_-

-Omnisciente: Mis cuerdas vocales están acostumbradas ;v

-Alan: No me hace falta la suplantación de una alma caricativa-(a la autora)- Yo leeré. Pero por favor, por mi salud, que no supere las 4.000 palabras...

-Autora: ¡Entendido!

{Narrador Alan, el omnisciente}
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Empieza a tomar fotos de su presa. Kánaye procura que la chica de gafas no lo vea. Ante unas voces que gritan su nombre se asusta y se esconde detrás del muro.
-?: ¡¡Hola Anri!! ¡Estamos aquí!

Asoma la cabeza con cautela. Los ya conocidos amigos de la chica corrieron a su encuentro. Como era costumbre, el rubio se adelanta al de cabello negro, que ya agotado intentaba alcanzarle. Ella les saluda tímidamente y el chico de cabello negro regaña al otro por armar tanto alboroto en plena vía pública. Él ya sabía todo de cada uno de ellos.
-Mikado(tira de su manga): ¡Kida-kun! No grites tanto, estás haciendo un escándalo y todos nos están mirando.

SakuraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora