Sakura

Capítulo 34: Esto queda entre asesinas, Vorona

{Narrador Omnisciente}
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Luna llena, diosa de la sensualidad y la belleza, astro de nacimiento, crecimiento y muerte... reina de la noche y de las estrellas ¡Que se alza en el cielo en su máximo esplendor! ¡Única espectadora de lo que estaba ocurriendo esa noche!
-Autora: Omnisciente ¿Qué haces? ¿ Intentas invocarme a mí? 😶

-Omnisciente: Solo quiero embellecer y ponerle drama a la narración ¡Arriba omniscientes!

-Autora: Haz lo que tú quieras, hoy no estoy a tope para regañarte.

-Omnisciente: ¿Y eso?

-Autora: Un día malo... :'(

-Omnisciente: Anímate, seguro que escribir te alegra el día ☺

-Autora: Gracias :')

La luz amarillenta de la ventana era la única que se podía ver e todo el bloque. Todos los demás dormían plácidamente en sus camas, todos menos el informante y su secretaria.
Mantuvieron un largo e incómodo silencio, o por lo menos le parecía incómodo a Izaya. Su brazo ya estaba vendado gracias a la pelicobre, que estaba muy seria, con la misma mirada de rabia que aquella vez que pelearon en el puente.
-Izaya: Yumi-san...
-Yumi: Te he dicho que no me gusta ese apodo.
-Izaya: ¿Cómo sabías que fue Vorona? ¿Nos viste?
-Yumi: De estar ahí te ayudaba.
-Izaya: ¿Y cómo...?
-Yumi: Antes dijiste si era adivina
-Izaya: ¿Y lo eres?
-Yumi(se dirige al ventanal y mira impasible): Algo parecido, como a cientos de personas en el mundo tengo sueños premonitorios heredados por mi familia paterna.
-Izaya: ¿A dónde vas?
-Yumi: A ajustar cuentas.

Dicho esto cerró la puerta, dejándole solo dentro. El informante ya sabía que iba a hacer, y como no, quería verlo escondido en primera fila... y de paso ponerla a prueba.

Narradora Yumi
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La he visto, la he visto por el ventanal mirándome. Me hierve la sangre... cálmate Yumi, si no quiero dejarme llevar tengo que mantener la cabeza fría. Aunque puede que no sea ella, sigo a mi instinto y como siempre, no me falla. La vi en un parque, sentada tan tranquilamente como si hace 15 minutos no hubiera disparado a alguien, viendo su móvil. Me mira y se levanta del asiento, para luego acercarse a mí.
-Vorona: Te esperaba.
-Yumi: Estarás contenta, disparaste a Izaya y no cumpliste el trato que hicimos, que ninguna interfiera en la pelea de Shizuo e Izaya y por lo tanto no dañarles.
-Vorona: Él era el único que sabía el paradero de Shizuo. Scorpio mencionó tu nombre ¿Quién eres para él?
-Yumi(agudiza la mirada): ¿Scorpio? No sé de qué me hablas.
-Vorona(apunta con la pistola a un árbol): Pues te sacaré información por las malas. ¿No Orihara?

El informante salió con una sonrisa despreocupada y alzó los brazos con un aire burlón.
-Yumi: ¡I-Izaya!
-Izaya: ¡Hola Yumi-san!
-Vorona: Si no me cuentas nada le dispararé.
-Izaya: No creo que Yumi te diga nada-(la mira de reojo)- ni siquiera por mi vida sería capaz de contarlo.
-Yumi(sombreada): Asesina.

{Narrador Omnisciente}
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El informante se apartó de la trayectoria de la bala, quedó el proyectil clavado en el tronco de un árbol. Vorona volteó la cabeza para atrás y la vio con su sonrisa de siempre, era escalofriante pensar que siguiera sonriendo en una situación de vida o muerte para un ser querido suyo. La ojivioleta sin perder ni un instante disparó otra vez, mientras Yumi las esquivaba con gran agilidad. Se acabaron sus balas y mientras recargaba, Yumi no disparaba por el miedo de darle a él. Vorona se dió cuenta y aprovechó esa debilidad para conseguir lo que quería, colocó su pistola detrás de la nuca del pelinegro.
-Vorona: Quédate quieta o disparo.