• CAPÍTULO 33 •

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Te recomiendo escuchar "Manta Ray" de J. Ralph y Anhoni mientras lees este capítulo 🌱

Se encontraba con su cuerpo encogido bajo las mantas, con las rodillas dobladas y aferradas en un abrazo. Arrullándose lo más que podía, pues se sentía entumecido y a pesar del soleado medio día y que comenzaba ya a iluminar la habitación.

El pequeño felino paseándose sobre las mantas, corriendo de punta a punta sobre su cama y como si se percatarse de que algo ocurría. Seguramente desconociendo aquella habitación que había ya olvidado, extrañado del porqué el aroma del alfa no se hallaba por ningún lado.

Tae.

Un sollozo escapando desde lo más profundo de su pecho, esmerado en amortiguar lo mordiendo su labio inferior y así el beta no le volviese a preocupar su estado. Habiéndole cuidado desde que había regresado de la playa y se había rehusado a cenar.

Debes ser fuerte.

Sus ojos ardiendo y sintiéndose sensibles. La cabeza doliendole y el rostro sintiéndose seco, debido a los días en los que el llanto no decidía abandonarle. Negándose a tomar la prenda del alfa y que había sacado a escondidas unas horas atrás de su habitación. Tan solo por el afán de su omega por sentirle y que este le hiciese saber que todo estaría bien.

Más nada lo estaría.

-¡M-mientes! - había gritado con tanta fuerza que su cuerpo había desestabilizado. Sintiendo que el peliplata le intentaba sostener, más eso sólo le haciéndole sentir más frustración, por lo que le volvió a empujar - ¡Nooooo! - sus manos rápidamente viajando hasta su cabeza y presionando allí con ahínco. Un acto tan inconsciente, que apenas podía dar cuenta del dolor que aquello le provocaba - ¡E-estás m-mintiendo ellos n-no pueden! ¡No p-pueden dejarme s-solo!

Eso, no podía ser posible. Su mente repitiéndose una y otra vez, mientras sentía sus piernas demasiado débiles como para seguir de pie. Sus rodillas desnudas recibiendo el golpe de la arena, raspando un poco cuando cayó sobre ella.

- N-no me hagan esto-o - su pecho latiendo con rapidez, percibiendo como el aire parecía acabarse y le costaba respirar. Como si algo adentro de él se quemase.

- Tranquilo c-cariño. Estoy aquí - susurró Taehyung, más sus palabras eran difusas y su cabeza seguía doliendo. Distinguiendo cómo este envolvía con sus brazos, estando demasiado ensimismado como para atinar a responder a sus palabras.

- E-ellos me lo prometieron - la oración saliendo en medio de un sollozo que le hizo inclinarse hacia adelante, para luego volver a gritar - ¡Nooooo! ¡P-por favor noo!

El vientre doliendole en una pequeña punzada, que fue casi imperceptible para él. Sin embargo, su lobo instó a llevar una de sus manos a ubicarla allí. Como si implorase que a su cachorro no le lastimara aquello, como lo hacía a él.

Duerme bebé, duerme.

- ¿Q-quienes ellos mi amor ? - preguntó el alfa con la voz temblando y de seguro el cuerpo también.

- Papá... - dijo el pelinegro con más voz desgastada y rasposa. Bastando unas palabras más, para que el alfa se percatara que no estaba respondiendo a su pregunta, tal vez ni siquiera le había oído -... m-mamá... ¡mi mamaaá! - el sonido de su propia voz sintiendo lo irreconocible, provocándole la sensación de náusea sobre el estómago.

Sus manos enterradas sobre el arena, apretando en vano pues esta desvanecía entre sus manos. Observando como que esta de pronto se transformaba y hallaba sus manos hundidas en el barro.

El gran lago y la neblina tenue que solía haber allí, ubicado frente a él. Con la inmensidad de las montañas rodeandole como debía ser, resguardando su clan.

𝗘𝗔𝗥𝗧𝗛𝗤𝗨𝗔𝗞𝗘   ᵀᵃᵉᵏᵒᵒᵏ ᴼᵐᵉᵍᵃᵛᵉʳˢᵉ .•*¨¨*• ❀*̥Donde viven las historias. Descúbrelo ahora