R. O. T. B. A. S. |4|

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-¡Nunca había visto a una persona tan snob!

-Tú... —la Sra. Lin estaba molesta, pero no sabía cómo responder. 

Parecía que se dio cuenta de que lo que acababa de decir no era justo.

-Yu Zi, ¿Cómo puedes ser tan fría? —la Sra. Lin no estaba dispuesta a rendirse.

-¿Soy de sangre fría? —Yu Zi tenía una sonrisa irónica— Déjame ser honesta contigo, me siento muy disgustada cuando pienso en tu hijo que me engañó.

-Creo que la señorita Yu tiene razón. —una mujer noble salió de la multitud en este momento— Usted es la señora Lin, ¿verdad? Tú también eres mujer, ¿puedes tolerarlo si tu marido te engaña? Si puedes, no tengo nada más que decir, porque tenemos valores opuestos.

Cuando la Sra. Lin vio a la noble mujer, se sorprendió y se levantó de inmediato. 

-S-Sra. Yang.

La Sra. Lin conocía a esta Sra. Yang sin duda, y era obvio que la Sra. Yang no era una mujer normal dada la actitud de la Sra. Lin hacia ella; de hecho, la Sra. Yang nació en una familia súper rica y se casó con un alto funcionario del gobierno.

Aunque la familia de la Sra. Yang era solo una familia súper rica común, y su esposo tampoco era un funcionario muy importante, la familia y el esposo de la Sra. Lin apenas eran comparables a los de la Sra. Yang.

La Sra. Lin conocía a la Sra. Yang, pero la Sra. Yang no la conocía.

-Señorita Yu, ¿está soltera? —la Sra. Yang le preguntó a Yu Zi con esperanza en sus ojos.

-Sí —dijo Yu Zi sin pensarlo más.

-Creo que la señorita Yu es una joven muy destacada. ¿Te importaría conocer a mi hijo algún día cuando estés libre? —dijo la Sra. Yang. 

La Sra. Yang estaba haciendo arreglos para que Yu Zi y su hijo se conocieran.

-¿Qué? —Yu Zi se sorprendió y se sintió tímida.

La Sra. Lin también estaba asombrada, no podía creer que la Sra. Yang estuviera dispuesta a presentarle a Yu Zi a su hijo; si Yu Zi pudiera casarse con la familia Yang, ¡se convertiría en miembro de una familia súper rica y poderosa! 

Pensando en eso, la Sra. Lin era reacia a aceptarlo, pero ahora no se atrevía a decir nada.

-¿Te importaría? —la Sra. Yang entendió que sorprendió a Yu Zi, pero no le importó. 

Solo pensó que Yu Zi era una buena chica, así que esperaba que Yu Zi pudiera conocer a su hijo y ver qué pasaría.

La familia Yang no era una familia común, por lo que era poco probable que la Sra. Yang eligiera a Yu Zi por su jefa; la Sra. Yang se sintió atraída por la habilidad sobresaliente y los buenos modales de Yu Zi. 

Además, la carrera de Yu Zi no sería tan exitosa como el negocio de la familia Yang, a menos que ella tuviera la habilidad inusual de Gu Ning; por lo tanto, si Yu Zi pudo casarse con la familia Yang, tuvo mucha suerte.

-Por supuesto que no —dijo Yu Zi de inmediato.

Aunque conocía el propósito de la Sra. Yang, no creía que hubiera algo malo en ello; todavía era demasiado pronto para decir si podría estar junto con el hijo de la Sra. Yang, ella podría ir a hacer un nuevo amigo de todos modos.

-Excelente, ya tengo tu número, así que le diré que te contacte más tarde; pueden compartir una comida y ver una película juntos o algo así —dijo la Sra. Yang con una sonrisa feliz.

Yu Zi se sonrojó un poco.

La Sra. Lin sabía que no debería quedarse más tiempo, así que se fue en silencio; cuando regresó a casa, hizo mucho ruido para desahogar su ira, e incluso despertó a Lin Tianyou, que estaba tomando una siesta.

-¡Eres muy ruidosa! ¿No podrías estar callada por un tiempo? —Lin Tianyou levantó la voz con ira.

-¿Que pasó? —Lin Tianyou salió y le preguntó a su madre.

-Fui a la tienda de Yu Zi en este momento —dijo la Sra. Lin.

Al escuchar eso, Lin Tianyou frunció el ceño. 

-¿Por qué?

-Solo quería preguntarle por qué te rechazó —dijo la Sra. Lin molesta.

-¿Y entonces? —Lin Tianyou preguntó a toda prisa. 

Sabía que Yu Zi no cambiaría de opinión, pero aún tenía esperanza.

-¡Expuso tu traición justo en frente de todos en público, y me sentí muy humillada! —dijo la Sra. Lin en un tono ofendido.

Lin Tianyou no dijo nada. 

Estaba decepcionado, pero no estaba sorprendido porque Yu Zi le había dicho lo mismo.

-Como Yu Zi te rechazó, puedes volver a estar con Zhao Xiaoxuan. —la Sra. Lin perdió la esperanza de Yu Zi, y también estaba enojada con la actitud de Yu Zi. 

A pesar de que Yu Zi era una diseñadora famosa ahora, no la aceptaría.

-Ya he roto con Zhao Xiaoxuan —dijo Lin Tianyou.

-No, solo dile algo dulce y ella te perdonará como siempre —dijo la Sra. Lin. 

No se dio cuenta de lo grave que era.

-No lo creo, encontró la escena de mí rogándole a Yu Zi que me perdonara —dijo Lin Tianyou. 

Ahora se sentía completamente arrepentido, porque Yu Zi no lo aceptaría y Zhao Xiaoxuan también rompió con él; aunque sabía que Zhao Xiaoxuan lo amaba mucho, entendió que ella no lo perdonaría esta vez. 

En realidad, no tenía intención de recuperar a Zhao Xiaoxuan dada la forma en que lo había tratado cuando estaban juntos.

-¿Qué? —la Sra. Lin estaba sorprendida— ¿Cómo puedes dejar que te atrape en el sitio? ¡Si ella no está dispuesta a perdonarte esta vez, no puedes heredar las propiedades de su familia en el futuro! 

Justo en este momento, la Sra. Lin finalmente se dio cuenta de lo grave que era.

-¡No tengo ni idea de qué hacer ahora! —Lin Tianyou dijo con impaciencia.