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Sin embargo, Feng Xueqin no se rendiría a pesar de que sabía que Gu Ning no era simple; por lo tanto, ella simplemente estaba cavando su propia tumba, y nadie podía detenerla.

Lu Qiuting finalmente se dio cuenta de lo grave que era, y no se atrevió a decir una palabra más.

-¡Jesús, ella es tan increíble! —Tong Wen estaba conmocionada.

-Escuché a Gu Ning decir que Feng Xueqin había conspirado contra su madre muchas veces, razón por la cual estaba tan enojada; creo que la familia Tang aún no lo sabe, de lo contrario habrían tomado medidas. Como ambas están aquí, puedo irme ahora. Oh, ya he pagado los honorarios médicos —dijo Liu Xinqi, y luego se fue de inmediato. 

Había invitado a Feng Xueqin a divertirse con él, por lo que se sintió un poco culpable y pagó la tarifa por ella.

-Creo que deberíamos decirle a Pinghui —dijo Tong Wen, porque no sabían cómo lidiar con eso.

Lu Qiuting llamó a Feng Pinghui de inmediato y le contó lo que había sucedido.

Cuando Feng Pinghui lo escuchó, estaba furioso. ¡Feng Xueqin era realmente un alborotador en su familia! En este momento, no sentía simpatía por Feng Xueqin en absoluto, sino solo quejas.

Eran casi las 10 de la noche cuando Gu Ning regresó a su casa en Huafu Hills, pero Leng Shaoting todavía no la había contactado; se sintió un poco preocupada, pero no sabía si debía llamarlo en caso de que lo interrumpiera.

Justo cuando Gu Ning estaba a punto de abrir la puerta de su casa, Cao Wenxin salió de la suya con una mirada ausente en su rostro. 

Cuando Cao Wenxin vio a Gu Ning, ella le dijo: 

-Me muero de hambre. ¿Por qué no salimos a comer pescado a la parrilla juntos? 

Al escuchar pescado a la parrilla, la boca de Gu Ning se estaba haciendo agua, así que aceptó.

Había una calle de refrigerios nocturnos al otro lado de la carretera de Huafu Hills, por lo que caminaron directamente hacia allí.

-¿Que pasó? Pareces triste hoy  —preguntó Gu Ning con preocupación.

-Nada, simplemente no estoy de buen humor —dijo Cao Wenxin. 

Obviamente no le diría a Gu Ning que echaba de menos a Xin Bei.

Como Cao Wenxin no estaba dispuesta a decirle, Gu Ning no preguntó más.

Fueron a una popular tienda de pescado a la parrilla y pidieron un pescado a la parrilla junto con dos botellas de cerveza.

Era muy popular y muchas personas esperaban en la fila, pero esta tienda era la favorita de Cao Wenxin, por lo que estaban dispuestos a esperar mucho tiempo.

Mientras esperaban el pescado, Cao Wenxin ordenó un plato de verduras para aliviar su hambre.

Aunque Cao Wenxin nació en una familia súper rica y poderosa, no era muy quisquillosa; no importaba si era comida costosa o una merienda barata y común, ella comía lo que le gustaba. 

Cao Wenxin no era como algunas personas ricas que pensaban que eran mejores que las personas comunes y que despreciaban los refrigerios nocturnos.

Sin embargo, media hora después, varios hombres agarraron el pescado de Cao Wenxin y Gu Ning, y les dijeron que esperaran el siguiente.

Gu Ning y Cao Wenxin, por supuesto, no lo tolerarían, especialmente cuando Cao Wenxin estaba de mal humor; se enojó de inmediato y alzó la voz. 

-¡Que mierda! ¿Cómo puedes ser tan desvergonzado? ¿Cogiste nuestro pescado e incluso nos dijiste que esperáramos el siguiente? ¿Quieres pelear? —diciendo eso, Cao Wenxin se arremangó y parecía que quería pelear.

-¡Oh, tienes bastante genio!

Uno de los hombres se divirtió con la acción de Cao Wenxin, para sorpresa de Gu Ning y Cao Wenxin, el hombre dejó de discutir con ellos. 

-No estoy interesado en pelear con una chica. Bien, puedes tener el pescado a la parrilla primero.

Cao Wenxin estaba decepcionada de que el hombre se rindiera y dijo con insatisfacción: 

-Pensé que podría tener una pelea. ¡Eres tan cobarde! 

Al escuchar eso, el hombre estaba disgustado. 

-¿Qué dijiste? Quieres pelear, ¿verdad? Voy a golpear a un hombre más tarde, si te atreves a vencerlo por mí, pagaré la factura por ti.

Antes de que Gu Ning pudiera decir algo para detener a Cao Wenxin, Cao Wenxin estuvo de acuerdo sin dudarlo. 

-Claro, cumpla su palabra.

No le faltaba dinero para pagar el pescado a la parrilla, pero ansiaba pelear en este momento.

-Wenxin... —Gu Ning miró a Cao Wenxin. 

Era obvio que ella no estaba de acuerdo.

Al escuchar la voz de Gu Ning, Cao Wenxin también se dio cuenta de que no era apropiado, por lo que dijo: 

-Bueno, olvídalo.

Después de eso, ella se sentó.

Los varios hombres no dijeron nada más, y el pescado a la parrilla todavía estaba colocado en la mesa de Gu Ning y Cao Wenxin.

-¡Qué gracioso es que Qiao Guanxiang, agente de un famoso cantante, me haya llamado para pedir prestado dinero! —dijo el hombre que acaba de discutir con Cao Wenxin.

¿Qiao Guanxiang? ¿No es el ex novio de Xia Yichu? Gu Ning pensó para sí misma, pero no dijo nada.

-¿Te llamó para pedir prestado algo de dinero? ¿No es él muy rico? ¿Por qué hizo eso?

-¡Exactamente! Es el agente de un famoso cantante después de todo. —los otros dos hombres estaban confundidos.

-Me dijo que el cantante resultó herido y que no puede cantar, por lo que no pueden ganar dinero; lo que es peor, también tienen que pagar daños y perjuicios por los acuerdos que firmaron antes —dijo el hombre.

-Bueno, no creo que pueda volverse pobre de la noche a la mañana solo por eso, tiene al menos varios millones de yuanes.

-Estoy de acuerdo, a pesar de que carece de dinero en este momento, ¿Cómo podría llamarte para pedir prestado algo de dinero? Afirmó ser tu amigo cercano antes de convertirse en agente, pero fingió no conocerlo una vez que tuvo éxito. ¡Creo que es un hombre desvergonzado!

-¡En efecto! ¡No le prestes dinero! 

-Por supuesto que me negué, de hecho, no me dijo toda la verdad, porque ahora está drogado, que es la verdadera razón por la que necesita dinero desesperadamente.

-¡Oh, esa es la verdadera razón! Creo que varios millones de yuanes apenas son suficientes para que él pague las drogas.

Cuando Gu Ning y Cao Wenxin casi terminaron de comer, Leng Shaoting llamó a Gu Ning.

-¿Donde estas ahora? —preguntó Leng Shaoting.

-Estoy comiendo pescado a la parrilla con Wenxin en la calle nocturna. ¿Ya terminaste? —Gu Ning preguntó.

-Sí, voy a volver, tomará alrededor de 20 minutos. ¿Me esperarás allí o irás directamente a casa? —preguntó Leng Shaoting.

-Ya casi hemos terminado, así que creo que iremos directamente a casa —dijo Gu Ning.

-Genial —dijo Leng Shaoting, luego colgó.

Cao Wenxin miró a Gu Ning, parecía que ella quería decir algo, pero no lo dijo en voz alta.

-¿Qué? —Gu Ning preguntó.

-¿Es Shaoting? —Cao Wenxin preguntó.

-Sí —dijo Gu Ning, pero Cao Wenxin no dijo nada más.

Después de pagar la cuenta, se fueron juntos.

R. O. T. B. A. S. |4|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora