R. O. T. B. A. S. |4|

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-¿Qué? ¿Ella es la Diosa Gu?

-¡Si! Es una chica increíble, y muchas personas la consideran su ídolo. ¡Estoy tan emocionado de verla en la vida real! Debo tomar una foto para recordar este momento.

Dicho esto, muchas personas sacaron sus teléfonos para tomar fotos.

Du Laifeng también se sintió honrado cuando Tang Haifeng apareció a su vista, a pesar de que vino aquí por Gu Ning. ¡Nunca antes había conocido una figura tan importante!

-¡Es un placer verlos, Maestro Tang, jefa! —Du Laifeng los saludó con respeto.

Al escuchar eso, los espectadores se sorprendieron al saber que esta tienda de antigüedades era de Gu Ning.

Tal vez fue porque Gu Ning era una famosa empresaria exitosa ahora, por lo que no estaban tan asombrados de que Gu Ning fuera dueño de otra tienda.

Li Fengxia y Du Mingda no se atrevieron a hacer nada para lastimar a Gu Ning después de escuchar las noticias.

Tang Haifeng recibió la llamada del Maestro Xiao en el momento en que llegó, el Maestro Xiao le preguntó si ya había llegado, y dijo que lo iba a encontrar.

Cuando Tang Haifeng le dijo al Maestro Xiao dónde estaba, el Maestro Xiao se sorprendió, porque era la tienda de Gu Ning.

¿Desde cuándo Gu Ning se convirtió en la nieta de Tang Haifeng? El maestro Xiao pensó para sí mismo.

El maestro Xiao estaba confundido, pero supuso que tal vez Tang Haifeng trató a Gu Ning como su nieta, sabía quiénes eran los miembros de la familia Tang; de todos modos, la niña tenía que ser muy sobresaliente si Tang Haifeng la apreciaba.

El Maestro Xiao luego fue a la tienda de antigüedades de Gu Ning junto con su aprendiz, en poco tiempo, llegaron y se encontraron con Tang Haifeng y los demás.

-¡Hola, Xiao, ven aquí! Déjame presentarte. —Tang Haifeng no podía esperar un segundo más para presentarles a Gu Ning— Esta es mi nieta, Gu Ning.

-¡Hola, abuelo Xiao, tío Chang! —Gu Ning los saludó cortésmente.

Al escuchar eso, Tang Haifeng se sorprendió. 

-Ningning, ¿conoces a Xiao?

-Bueno, el abuelo Xiao y el tío Chang visitaron mi tienda ayer —dijo Gu Ning.

-¡Ja, ja, Tang, he visto esas antigüedades reales antes que tú! —el Maestro Xiao dijo con satisfacción.

-¿Qué? Ningning, ¿por qué no me llamaste primero? —Tang Haifeng estaba disgustado.

Gu Ning explicó inmediatamente con una sonrisa: 

-Me encontré con el abuelo Xiao ayer, así que él vio esas antigüedades reales antes que tú.

Aun así, Tang Haifeng todavía estaba un poco infeliz.

-Tang, ¿desde cuándo has tenido otra nieta? —preguntó el Maestro Xiao con curiosidad.

-¿No crees que ella se parece mucho a Yunfan? —dijo Tang Haifeng.

El Maestro Xiao no le prestó mucha atención hasta ahora, porque solo se había encontrado con Tang Yunfan varias veces y estaba perdiendo la memoria como un anciano.

Echó un vistazo más de cerca a la cara de Gu Ning, y se sorprendió al descubrir que Gu Ning realmente se parecía mucho a Tang Yunfan; se le ocurrió una idea, y él redondeó los ojos en estado de shock.

-¿Es ella la hija de Yunfan...?

-Correcto, pero aún no es el momento de hacerlo público. —Tang Haifeng interrumpió al Maestro Xiao antes de que pudiera terminar su oración.

Al escuchar eso, el Maestro Xiao cerró la boca, pero sintió curiosidad sobre por qué Tang Yunfan de repente tuvo una hija.

Después de eso, se entregaron muchas cestas de flores bajo el nombre de Jade Beauty Jewelry, Charm y el Grupo Tanghuang.

El Maestro Lei también llegó un tiempo después, Zhao Yiru también apareció.

Todos venían con cestas de flores, lo que hizo que la calle antigua se llenara de flores frescas.

Los amigos de Tang Haifeng que eran miembros de la Asociación de Antigüedades llegaron uno tras otro. 

Uno de ellos era su cabeza.

Dado el alto estatus social de Tang Haifeng, sus amigos eran figuras importantes.

Tang Haifeng presentó a Gu Ning a sus amigos después, y todos estaban tan curiosos como el Maestro Xiao sobre Gu Ning; sin embargo, Tang Haifeng les dijo que no era el momento de hacerlo público, por lo que no preguntaron más.

La llegada de esas figuras importantes causó sensación en la calle antigua, muchos amantes de las antigüedades junto con los propietarios de otras tiendas de antigüedades corrieron a echar un vistazo.

Varios miembros de la Asociación de Antigüedades eran visitantes frecuentes de la calle de antigüedades, por lo que supieron que muchos de sus amigos estaban allí; en los minutos siguientes, todas las personas estaban ocupadas saludando y charlando entre sí, llenas de ruido.

Cuando eran las 10:10 am, comenzó la ceremonia de apertura; Du Laifeng pronunció el discurso, luego destapó el letrero y tres palabras "Xiangyun Antique-store" fueron expuestas ante los ojos de todos.

Al ver el letrero, muchos se sorprendieron.

-¡Jesús, es la tienda de antigüedades Xiangyun!

-¿Es muy famoso?

-¡Por supuesto que es! La tienda de antigüedades Xiangyun es muy famosa en la industria de antigüedades en este momento.

La tienda de antigüedades Xiangyun ya había ganado cierta fama en la industria de antigüedades antes de que Gu Ning se hiciera cargo, y fue mucho más famosa después de que Gu Ning se convirtiera en su nuevo jefe.

Para sorpresa de la mayoría de los espectadores, Xiangyun Antique-store tenía una sucursal en la Ciudad B ahora.

Las artesanías de la tienda de antigüedades Xiangyun siempre fueron populares, y muchos propietarios de otras tiendas de antigüedades se sintieron bastante estresados después de saber que había muchas antigüedades reales; sin embargo, nadie se atrevió a causar problemas, porque todos sabían que Gu Ning tenía buenas conexiones en todo tipo de industrias.

Después del discurso de Du Laifeng, Gu Ning dio un breve discurso de reconocimiento; y cuando terminó, llegó el momento de cortar la cinta.

Tang Haifeng, el Maestro Lei y el jefe de la Asociación de Antigüedades hicieron el corte de la cinta juntos.

Luego, la gente entró para apreciar las artesanías y las antigüedades reales.

Los espectadores estaban más interesados en las artesanías, mientras que los amantes de las antigüedades se centraron en las antigüedades reales.

Había una pared de exhibición hecha de vidrio a prueba de balas en la habitación, donde se colocaron antigüedades reales. 

La historia y el precio de cada antigüedad estaban escritos en una tarjeta al lado.