Billie.
Me estaciono a un lado de la carretera. Aprieto el volante, en un intento de calmarme.
Todo se ha ido. No tengo ni idea de quién se las llevó. Es probable que alguien esté leyendo nuestras cartas en este momento. Leerán todo lo que nos escribimos para nosotras mismas, y dependiendo de quién se las llevó, tal vez parezca certificablemente loco.
Agarro una hoja de papel blanco que encuentro en el asiento trasero, y comienzo a escribir cosas. Todo lo que puedo recordar. Estoy molesta, porque no puedo recordar ni siquiera una fracción de lo que estaba en las notas dentro de la mochila. Nuestras direcciones, las contraseñas de nuestros casilleros, nuestros cumpleaños, todos los nombres de nuestros amigos y familiares; no recuerdo nada de eso. Lo poco que puedo recordar, lo anoto. No puedo dejar que esto me detenga de encontrarla.
No tengo ni idea de a dónde ir después. Podría visitar la tienda de tarot de nuevo; ver si ha regresado allí. Podría intentar encontrar la dirección de la propiedad que tiene la puerta que está en la foto en su habitación. Ahí tiene que haber una conexión con la tienda de tarot que muestra esa misma foto.
Podría conducir hasta la cárcel y visitar al padre de ______, ver lo que sabe.
«Sin embargo, la cárcel probablemente es el último lugar al que debería ir en estos momentos.»
Agarro mi teléfono y comienzo a revisarlo. Me desplazo por las fotos de anoche. Una noche de la que no recuerdo un solo segundo. Hay fotos de ______ y de mí, fotos de nuestros tatuajes, fotos de una iglesia, fotos de un músico callejero.
La última foto es de ______, de pie junto a un taxi. Parece ser que estoy del otro lado de la calle, tomándole una foto mientras se prepara para montarse en el coche.
Esa tenía que ser la última vez que la vi. En la carta decía que ella se subió al taxi en la Calle Bourbon.
Amplío la foto; mi emoción queda atrapada en mi garganta. Hay una placa en la parte delantera del taxi y un número de teléfono a un lado.
«¿Por qué no pensé en esto?»
Anoto el número de teléfono, la matricula del taxi y marco el número.
Siento como si por fin estuviera progresando.
...
La compañía de taxis casi se negó a darme información. Al final convencí al operador que era una detective y que necesitaba interrogar al conductor sobre una persona desaparecida. Eso es solo una mentira a medias. El tipo al teléfono dijo que tenía que consultarlo y devolverme la llamada. Se demoró cerca de treinta minutos antes de que mi teléfono sonara de nuevo.
Fue con el propio conductor del taxi con el que hablé esta vez. Dijo que una chica que coincide con la descripción de ______ paró su taxi anoche, pero antes de que él la pudiera llevar a cualquier parte, le dijo que lo olvidara y cerró la puerta y se fue.
«Ella simplemente... ¿se fue?»
¿Por qué haría eso? ¿Por qué no se reencontraría conmigo? Tenía que saber que yo me encontraba probablemente cerca de la próxima esquina si ahí fue donde nos separamos.
Tenía que tener una agenda. No recuerdo una sola cosa sobre ella, pero basado en lo que he leído, todo lo que hace parece tener un propósito. ¿Pero cuál pudo haber sido su propósito en la Calle Bourbon a esa hora de la noche?
Las únicas cosas que se me vienen a la mente son la tienda de tarot y la cafetería. Pero en las notas, afirma que ______ nunca se presentó de nuevo en la cafetería, basada en la información de alguien llamada Clairo. ¿Iba a encontrar a Ariana? Siento una punzada de celos al pensar en ello, pero casi estoy confiada de que ella no lo hubiera hecho.
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Jamais, jamais (II)
FanfictionBillie tiene el tiempo en su contra, al mismo tiempo que muchas verdades se revelan ante ella, mientras que otras sólo complican todo. Ahora todo está fuera de control y la desaparición de ______ la ha puesto en un aprieto, ya que Billie es el únic...