Jamais, jamais (II)

capítulo 6.

Billie.

Es increíble lo mucho que puedo aprender con solo mantener la boca cerrada.

Avril y Ariana son hermanas.

Avril está casada, sin embargo de alguna manera, la convencí de tener una especie de relación inapropiada. Y es bastante reciente, lo cual no me lo esperaba. También parece extraño que haya recurrido a ella en busca de consuelo, sabiendo que ______ y Ariana se encontraban juntas.

Basada en lo que he aprendido de Billie —de mí— no me veo queriendo estar con alguien que no sea ______.

¿Venganza? Tal vez solo usaba a Avril para conseguir información sobre ______ y Ariana.

Paso los próximos diez minutos reflexionando sobre lo que he aprendido mientras me abro camino en el campo en busca del departamento de deportes. Todo se ve igual: las caras, los edificios, los estúpidos carteles de motivación. Por último me doy por vencida y entro a un aula vacía. Tomo asiento en una mesa junto a la pared del fondo y abro la cremallera del morral repleto con mi pasado. Saco los diarios y algunas cartas, organizándolas por fechas. La mayoría de las cartas son entre ______ y yo, pero algunas son de su padre, escritas para ella desde la cárcel. Esto me entristece. Existen unas pocas de personas desconocidas; amigos de ella, supongo. Esas notas me molestan; llenas de poca profundidad, angustia adolescente y mala ortografía. Frustrada, las lanzo a un lado. Tengo la sensación de que lo que sea que pasa con nosotras tiene poco que ver con alguien más.

Agarro una de las cartas que le escribió el padre de ______ y la leo primero.

Querida, Manicito:

Recuerdas porque te llamaba así, ¿verdad? Eras tan pequeña cuando naciste. Nunca había sostenido a un bebé, y recuerdo que le dije a mamá: ¡Es pequeña, igual que un pequeño maní humano!

Te extraño, cariño. Sé que esto debe ser difícil para ti. Sé fuerte para tu hermana y tu mamá. Ellas no son como nosotros, y necesitan que te ocupes de las cosas por un tiempo. Hasta que vuelva a casa. Confía en mí, me estoy esforzando para regresar con ustedes. Mientras tanto, he estado leyendo un montón. Incluso leí ese libro que te gustó tanto. El de la manzana en la portada. ¡Wow! Ese Edward es... como lo dijiste... ¿de ensueño?

De todos modos, quería hablar contigo de algo importante. Así que escúchame, por favor. Sé que has conocido a Billie por mucho tiempo. Es una buena chica. No la culpo por lo que hizo su padre. Pero tienes que mantenerte alejada de esa familia, ______. No confío en ellos. Ojalá pudiera explicártelo todo, y lo haré algún día. Pero, por favor, mantente alejada de los O'Connell. Billie es solo un peón en el juego de su padre. Temo que te usen para llegar a mí. Prométeme, ______, que te mantendrás alejada de ellos. Le dije a mamá que utilizara el dinero de la otra cuenta para sobrevivir por un tiempo. Si es necesario, vende sus anillos. No querrá hacerlo, pero véndanlos de todos modos.

Te amo, papá.

Leo la carta dos veces para asegurarme de que no se me escapa nada. Lo que sea que paso entre mi padre y su padre fue grave. El hombre se encuentra en la cárcel, y por lo que leo en la carta, no cree que su sentencia sea justa. Eso me hace preguntarme si mi padre es en realidad culpable.

Pongo la carta en una nueva pila para mantenerla separada. Guardo todas las cartas que pueden significar algo en su propia pila, si volvemos a perder nuestros recuerdos, no tendremos que perder tiempo leyendo las cartas que no sirven para ningún propósito.

Abro otra carta que parece ha sido leída cientos de veces.

Querida, ______ bebé:

En verdad, te enojas cuando tienes hambre. Te transformas en una devoradora. Es como si ni siquiera fueras la misma persona ¿Podemos conservar barras de cereal en tu bolso o algo? Es solo que me preocupo por mis dedos. Los chicos comienzan a comentar que soy una sometida. Y sé que eso parece. Ayer, corrí como un joven leopardo para conseguirte un balde de pollo y me perdí la mejor parte del juego. Me perdí la mayor remontada en la historia del fútbol. Todo porque estoy tan a̶t̶e̶r̶r̶o̶r̶i̶z̶a̶d̶a enamorada de ti. Tal vez soy una sometida. Te veías muy sexy con toda esa grasa de pollo en la cara. Rasgando la carne con los dientes como una salvaje. Dios. Solo quiero casarme contigo.