Capitulo 11 - venías a saludarLA

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- Va, suéltalo ya, ¿qué ha pasado con Paul idiota?

Ahí estaba, sabía que sacaría el tema, solo era cuestión de tiempo. Evidentemente había estado hablando con ella sobre él, aunque tampoco me había dado tiempo a contarle demasiado, ya que había llegado justo días después de nuestro acercamiento. Además, sabía que quería soltarme el sermón en persona. Así que ya estaba preparada, pero pensé que tardaría más, la verdad.

- No ha pasado nada, no se qué quieres que te diga. - Me encogí de hombros, realmente no había pasado nada.
- Claro, pasaros una noche entera bailando, otra bebiendo vino y hablando, otra te regala dos cuadros maravillosos y te dice que "nada que no se pueda arreglar bailando contigo" y no ha pasado nada. ¿TU ME VES CARA DE TONTA OLIVIA MARTÍNEZ?
- A ver, si que ha pasado eso. Pero no hay nada más, simplemente hemos pasados momentos ¿bonitos?
- Habéis pasado momentos íntimos que no tienes con un amigo Olivia, o no por lo menos con alguien que quieres que en un futuro sea solo tu amigo. ¿Tú sentiste algo?
- No, bueno no lo se, me sentí cómoda, protegida, cuidada, especial, no sé explicarlo. Como si realmente fuese alguien para él. Pero no estoy ni enamorada, ni encaprichada ni nada.
- Y yo no digo eso, digo que deberías dejarte llevar amiga. No todos te van a hacer llorar...
- No vayas por ahí Ona, no es por él.
- Oh claro que es por él, no me vas a decir ahora que en ningún momento de los que has pasado con Paul se te vino ese a la cabeza y te asustaste - asustaba de verdad lo que me conocía
- Si, claro que si, pero no tiene nada que ver. Solo creo que no hay nada entre nosotros, tal vez conexión de amigos, no se, cariño también.
- Dios mío hija, lo que tu digas, pero tiempo al tiempo.

Y así estuvimos hablando hasta tarde, yo al día siguiente me tendría que ir a la reunión así que me fui a dormir antes de Ona, que seguramente se quedó hasta las tantas de noche. Al despertarme me vestí rápido (falda larga de flores, camiseta verde claro, los collares, pendientes dorados sencillos, el maquillaje de siempre, el anillo de mi abuela del que no me separaba y ya estaba lista), cogí el bolso, que esta vez sería un bolso de tela ya que después nos iríamos de visita, y salí de casa, después de la reunión ya recogería un café y así vería a Sophie que hoy trabajaba en la cafetería. La reunión fue rápida, como siempre, a las 10.30 ya estaba de camino a casa con el trabajo que tendría que entregar mañana por la mañana antes de que ellos hiciesen la reunión. Por la tarde me pondría a ello.
Llameé a Ona para intentar despertarla y a la cuarta llamada lo conseguí. Así que quedamos en vernos en la cafetería de los abuelos de Sophie y Alaric.

- Ona, ya estás aquí, pasamos y pedimos algo. Luego iremos a dar una vuelta y te llevaré a comer a un sitio que bueno, una maravilla - dije abrazando a mi amiga.
- Me parece bien, siempre que incluya ir a comer.

Le presenté a Sophie y Alaric a Ona, menos mal que ellos sabían español, o hubiese sido difícil. Como estaban también sus abuelos en la cafetería, nos sentamos los cuatro a desayunar con unos cafés, unos pasteles de la abuela de los chicos y obviamente, on colacao para Ona. Me encantó ver a mi amiga tan cómoda con mis amigos de aquí, se sentía familiar. Estuvimos hablando de mi vida aquí, de nuestra vida en Barcelona, contando anécdotas, hablando de qué planes teníamos todos, etc. Estábamos muy a gusto riéndonos cuando de repente entró Paul al local, como siempre, manchado de pintura, lo que me hizo sonreír.

- PAUL ¿CÓMO TENGO QUE DECIRTE QUE NO ENTRES MANCHADO, QUE PARA ALGO TIENES EL BAÑO DE DETRÁS? - ya empezábamos, iba a ser divertido.
- Perdona, solo venía a saludar. - dijo mirando en mi dirección.
- Oh no, venias a saludarLA que es diferente - dijo Alaric riéndose.
- Anda, fíjate tú, el famoso Paul - dijo Ona con una sonrisa que me asustaba.
- ¿El famoso Paul, Olivia? - pude notar que el calor me subía a las mejillas, ya no era divertido.

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¡Bonjour chicos!
Espero que estéis todos muy bien y que estéis pasando esta situación de la mejor manera posible. Aquí ya es verano desde hace unas semanas, yo hace como 3 que estoy de vacaciones. Ya la semana que viene vuelvo a mi pueblo, por lo que tendré más tiempo de escribir y actualizar.
De momento, aquí tenéis un nuevo capítulo de Paris en sus Ojos, espero que os guste muchísimo y lo disfrutéis.

Nos vemos pronto, un abrazo enorme

PARÍS EN SUS OJOSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora