~Capítulo 1~

1.3K 131 79
                                    

Narra Catra🍦:

Hoy hace un dia más caluroso de lo normal por lo cual he sudado mucho, odiaba eso pero tenia que terminar de empacar mis cosas para la mudanza, mi ahora antigua casa estaba llena de cajas que contenian ropa y objetos mios, los muebles y lo demas ya lo tenía en la nueva casa, talvez iba extrañar este lugar pero me mudaba por mi bien, pronto estaria en un lugar con mejores opotunidades y no lo iba a desaprovechar.

Algunos dias despues de terminar todo el tema de la mudanza me encontraba paseando por mi nueva casa, era simplememte hermosa y mucho mas espaciosa que la anterior, lo cual hacia que estuviese feliz de haber tomado la decisión de mudarme, me dirigí hacia la terraza y me senté en una de las comodas sillas que habia allí, desde aqui tenia una increible vista, podia ver casi todo el vecindario y los enormes edificios a lo lejos, me sentia muy afortunada de haber tenido la oportunidad de mudarme aqui, ahora solamente faltaba presentarme en mi nuevo trabajo, sabia que tendria que trabajar bastante duro pero eso ya no me importaba con tal de poder pagar esta casa y tener un buen sueldo.

Luego de unos minutos relajandome y disfrutando de la debil luz del sol que aún habia, escuché que tocaban el timbre ¿Quién podria ser? Aún no conocia a nadie en este vecindario, dude en abrir la puerta pero al final me decidi en hacerlo, al abrir pude ver a una chica rubia de ojos azul brillante, llevaba ropa casual y tenia una muy bonita sonrisa, no iba mentirme a mi misma, aquella rubia era sin dudas muy guapa.

-eh h-hola, disculpa por venir sin invitación pero hace unos dias ví un camion de mudanza y supuse que eres nueva en el vecindario asi que pense en traerte un regalo de bienvenida y de paso preséntame y conocernos un poco.-Dijo un poco nerviosa aquella rubia, le regale una pequeña sonrisa ya que su gesto me parecia bonito, ví que traia una caja decorada y supuse que ese seria el regalo que me vino a traer.

-Anda pasa, no te quedes ahí parada.-Dije haciendole señas con la mano para que entrara a mi casa, ella me hizo caso al instante, le dije que podia sentarse donde quisiese asi que se dirigio hacia uno de los sofás de la sala y se sentó.

-Me llamo Adora, me alegró mucho saber que iba a tener una nueva vecina y más ahora que veo que eres joven.-Me contó, aquella chica parecia bastante alegre.

-Soy Catra, ¿asi que llevas mucho tiempo viviendo aqui?.-Le pregunté.

-Unos cuantos años, desde que decidi que queria vivir sola, mis padres me apoyaron bastante y gracias a ellos pude terminar de comprar mi casa.

-Que afortunada, los mios no se pueden dar el lujo de apoyarme pero esta bien, yo me las arreglo sola.- Agregé.

-Ya veo, y ¿En que trabajas?.-Me preguntó curiosa Adora.

-En una gran empresa, no tengo un puesto muy alto pero tengo un buen suelto.-Le respondí.-¿Y tú en que trabajas?.-Le devolví la pregunta mientras me drigia hacia mi nueva cocina.

-Trabajo en la pasteleria de mis padres, me encanta mi trabajo.-Dijo dandome una sonrisa lleva de felicidad.

-Es bueno que te guste tanto tu trabajo, ¿Deseas algo de beber?.-Le pregunté.

-Cualquier cosa esta bien, gracias.-Me respondió, asi que preparé dos tés para luego llevarlos hacia aquel sofá y sentarme junto a Adora.

-Me encanta el té.-Dijo luego de darle un sorbo.

-Sabes, no conozco muchos lugares por aqui, tal vez algun dia podrias invitarme a salir y enseñarme algunos.-Le dije sonriendo, era verdad que no conocia muchos lugares pero podria facilmente investigar por internet, esta vez no lo haria solo para que aquella rubia de sonrisa brillante saliese conmigo. Vi que se sonrojo un poco ¿Qué estara pensando?.

-Cl-claro, me podrias dar tu número para mantenernos en contacto.-Aun seguia un poco sonrojada, me gustaba el rojo de sus mejillas.

-Bien.-Dije para luego intercambiar números, después de unos minutos mas hablando de varias cosas ella se tuvo que ir. Aquella chica que acababa de conocer hoy habia captado mi atención.

Luego de unos minutos me acordé de que aquella chica me habia dejado un regalo, asi que me dirigí hacia la caja decorada que habia dejado en una de mis mesas, la abrí y pude ver un hermoso pastel de color rosa claro, no dude en servirme un trozo para luego sentarme y provarlo, era muy dulce y estaba delicioso, tal vez era el mejor pastel que habia provado en mi vida, mientras aun seguia deleitandome con el sabor de aquel pastel, no pude evitar acordarme de aquella rubia que habia dejado una dulce sensación en mi corazón.

Más Dulce Que El Azúcar (Catradora)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora