Capítulo 13: Malum.

69 3 1
                                    

Ya era sábado, y la euforia se sentía en el Gran Comedor. En especial se podía sentir la emoción de los alumnos de tercer año al ser su primera ida al pueblo. Todos se encontraban charlando y desayunando el extenso banquete que siempre les ofrecía el colegio.

Harry, Ron y Neville hablaban sobre conocer la nueva tienda sobre Quidditch del pueblo e ir a tomar una deliciosa cerveza de mantequilla en la taberna de Rosmerta. Aunque Ginny también quería conocer la nueva tienda, le entusiasmaba aún más visitar el local de helados mágicos, que había escuchado, tenía más de 200 sabores, y siendo una loca por los helados no tenía ningún plan de faltar, y claro, tenía pensado involucrar a sus amigas en su glotonería.

Hermione conversaba con las chicas sobre las tiendas nuevas de Hogsmeade, pero sabía que ella nos las conocería en ese viaje. La reunión con Pansy era más importante que ir a la nueva tienda de plumas y pergaminos del pueblo. Apenas había probado su desayuno en todo el rato, pues los nervios sobre lo que se venía no la dejaban en paz. De tanto estar concentrada en sus pensamientos, apenas pudo sentir cuando sus amigos se levantaron de sus asientos.

- ¿Qué ocurre? - Les preguntó ella.

- Ya es hora de ir a Hogsmeade Hermione.

- Eh no, yo... creo que hoy me quedó en el castillo chicos. - Menciono la castaña, y sabía que debía inventarse algo mejor sin que la interrogaran tanto. - Siento un malestar en el estómago.

- ¿En verdad? ¿Por eso no has probado tu comida? - Pregunto Ron al acercarse a ella.

- Exacto. - Dijo algo nerviosa. - Creo que mejor iré a mi cuarto a recostarme y leer un libro mientras se me pasa.

- ¿Quieres que me quede contigo? Podemos estar en la sala común hasta que te sientas mejor.

La chica se enterneció por la idea de su novio, así que le dio un suave beso en la mejilla al pelirrojo. - Tranquilo Ron, sé que estas emocionado por ir, y no me pasará nada, estaré leyendo. - Contestó Hermione, sabiendo que le crecería la nariz como Pinocho por la sarta de mentiras que le estaba inventando a sus amigos y novio, pero Merlín sabía que era importante su cita con Pansy.

Sus amigos se alejaban mientras ella se hacia la despistada tomando el camino hacía su sala común. Cuando los chicos ya no se veían, regresó sus pasos y se dirigió hacia el lugar donde habían acordado Pansy y ella. Sentía su corazón palpitar rápido, quizás fuera por la excitación de querer saber más sobre aquella extraña nota, pero algo le decía que había otra razón de su reacción.

- Hola Pansy. – Saludó Hermione a la chica pelinegra, mientras con la mirada buscaba a una segunda persona.

- No hay nadie aquí Hermione. – Respondiendo a la extrañeza de la leona. – Pero nos espera en otro lado.

- ¿Por qué?

- Es mejor que nadie nos vea conversando, y menos sobre ese tema. – Dijo Pansy bastante seria. – Vamos que no le gusta esperar, le gusta la puntualidad tanto como a ti.

- Espera Pansy. – La chica volteo hacía Hermione. – Si el tema que trataremos es tan importante y peligroso a la vez, quisiera saber si esta persona con la que hablaremos es tu completa confianza.

- Hermione, ahora te considero una amiga. – Pansy se acercó a ella y le tomó de las manos. – Yo no traiciono a mis amigos, y créeme que haré lo que pueda para ayudarte y que la persona con la que hablaremos es de mi completa confianza, ahora tú confía en mí por favor. - Hermione la vio a los ojos y comprobó que en su miraba no había una pizca de duda. Así que asintió con la mirada, confirmando su aceptación a las palabras de la Slytherin.

Pansy comenzó a caminar, tomando uno de los pasillos adyacentes al patio, y Hermione se dejo guiar entre pasillos y puertas ya que ella no conocía por completo aquella zona de castillo, nunca se había atrevido a llegar tan lejos en territorio de las serpientes.

Por fin, Pansy se detuvo frente a una de las tantas puertas, revisó que nadie estuviera viendo e hizo un hechizo mental, con el que se escucho que la cerradura de la puerta había cedido.
Cuando Hermione entro en aquella aula abandonada, seguía preguntándose el por qué del misterio de Pansy sobre la persona que la ayudaría. Pero al llevar la mirada al fondo de aquel cuarto e identificar a la persona que se encontraba allí, dio con la respuesta.

Hermione se paro en seco, y optó por una postura tensa. ¿Acaso se trataba de una broma? ¿Por qué Pansy la había llevado a un lugar tan alejado del castillo y metido en la misma habitación que Draco Malfoy? La chica le había pedido confianza pero era difícil cuando no entendía nada sobre esta situación.

Draco se percato de lo tensa que estaba la chica, por esa razón no se había movido de aquel espacio de la habitación. Pansy se acercó a él, y después volteo hacía Hermione.

La castaña seguía callada y sin moverse de la entrada. No podía creer que Pansy la hubiera metido en la misma habitación que el chico. Miró al rubio con desconfianza y después pasó la mirada a Pansy, quién estaba nerviosa por la reacción de su amiga.

-Hermione...-. Se dirigió Pansy a la leona.- Draco es quién te ayudara a descifrar lo que dice la nota.

-Tienes que estar bromeando.- Dijo la castaña, incrédula.



Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Mar 11, 2021 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Cruel destino...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora