q u i n c e

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Jisoo entró al gran comedor con paso lento, todos en la base parecían calmados, eso hasta que el coronel al mando entro, junto con todo su equipo.

-¡Atención!.-Gritaron sus acompañantes.

Jisoo lo supo, lo supo cuando volteo a ver a todos lados y no vio a Lisa, hacía solo dos días que estaba en la base y esperaba verla ahí, junto a los grandes, con los que manejan todo, pero no, ella no estaba ahí.

-Nuestros soldados junto a la fuerza armada estadounidense han atacado hoy a un grupo de soldados, se sabe que ellos planeban escapar sin la aceptación y papeleo que se necesita, les recuerdo compañeros, para salir, necesitan pedir su baja y esperar por la aceptación de las oficinas, aquel soldado que trate de salir o escapar sin un permiso, se convertirá en un enemigo de la nación, lo cual nos da el derecho de poder atacar sus acciones.

-¿Cómo han logrado salir señor?.-Pregunto una voz de la cual nadie se hizo cargo.

-Estamos investigando eso, hasta que el problema de seguridad se resuelva, les ordeno permanecer el mayor tiempo posible en las literas.

Los mayores se fueron y todo el comedor volvió a quedar en silencio, un silencio tan ensordecedor que Jisoo logró escuchar cuando alguien se sentó a su lado.

-Hola Jeongyeon.-Saludo amablemente mientras tomaba lo que sea que le habrían servido de postre.

-Hola Jisoo.--Jeongyeon sabía perfectamente que no debía decir aquello, sin embargo su corazón aún latía fuertemente, necesitaba sacarlo.

-¿Algo importante?, todos en esta base estan tensos, pero tu amiga mía, tú estas que explotas.

-¿Puedes venir a mi litera esta noche?.-Preguntó sin más.

Jisoo un poco desconcertada asintió como respuesta, no sabía si era bueno o malo, pero sabía que tenia que ver con su amiga desaparecida.

Jeongyeon se levanto rápidamente con su plato aún con comida, miro a todos lados, asegurándose de no ser tan escandalosa.

-Jisoo, trae a Moonbyul.-Dijo antes de desaparecer entre la multitud de soldados que salían del comedor.

(***) {Jisoo}

Al llegar la cena, el sol ya se había ocultado, la lluvia caía sin cesar y el frío no ayudaba en nada.

Esperé en la puerta del comedor hasta que vi a Moonbyul aparecer entre los pasillos, se veía perdida y triste, pero no tenía elección, Jeongyeon es de mayor rango, sea lo que sea que quiera, debo llevar a Moonbyul conmigo, no quiero terminar haciendo mil lagartijas mañana.

-Hey.-Salude de manera ruda, no podía evitarlo, había estado practicando toda la tarde y esa falsa faceta ruda se queda contigo un buen rato.

-Soldada Jisoo.-Saludo con cansancio.

-Acompañame.-Le dije comenzando a caminar.-Jeongyeon quiere hablar con nosotras.-Confesé mientras nos escabullimos entre los solitarios pasillos.

Note como me miro con esperanza, que se convirtió rápidamente en enojo, al punto en el que sus manos ahora estaban empuñadas con fuerza.

-Estupida, se ha desaparecido tres días.-Se quejo entre dientes.

Solté un suspiro ahogado y toqué la puerta.

-Solicitó permiso para entrar mayor.

-Entra.-Escuche su voz con lejania.

Cuando entramos notamos que no había nadie más en el lugar, a diferencia de nosotras que compartíamos literas con otros 20 soldados, ellos tenían un cuarto bastante grande solamente para dos, extrañamente su compañera no estaba ahí.

f i x y o u ; j e n l i s aDonde viven las historias. Descúbrelo ahora