Enamorada de Un Mafioso

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Me encontraba arreglando la pequeña pañalera de Noah, al fin después de dos semanas íbamos a poder salir de aquí, André tiene comprada a la policía de aquí para que no lo atrapen por eso nos venimos a este país. Pero para prevenir no hemos salido hasta hoy.

El día que André me dijo que la loca de Carol lo quería a el, quede en shock pero claramente André me dijo que eso no iba a pasar, le había pedido que se divorciara de mi y que se fueran lejos con mi bebé y dejarme a mi aquí pérdida, obviamente André la mando al carajo!

En todo este tiempo no sé a aparecido por aquí, ni ha dado señales de vida es algo que me alegra, por un momento me siento feliz pensando qué tal vez ya nos dejó en paz, pero mi otra parte dice que no que esa mujer está planeando algo.
André ha retomado su "trabajo" casi no lo vemos ya que ha estado ocupado con eso.

Una vez lista agarro la maletita y a mi bebé, lleva un traje cafés de osito muy caliente, y envuelto en un ponchito azul. Bajamos a la sala donde ya nos esperan los guardias que nos acompañarán, André me dejó salir solo si me acompañan los guardias claro tuve que aceptar, y es algo que me hará sentir más segura en una ciudad desconocida.

Me coloco mi abrigo y coloco a Noah en su cochesito, me cruzo la pañalera en mi cuerpo, me aseguro que Noah ya esté bien y salimos del departamento. Iremos caminando ya que así se me apetece pero por seguridad nos seguirá una camioneta de lejos.

La gente se nos queda viendo, bueno quien no? Voy casi rodeada como de 5 guardias. Ya llevamos caminado como 4 cuadras y realmente la ciudad es hermosa todo se ve lujoso los grandes edificios, las grandes tiendas de ropa, realmente todo es fantástico en Rusia igual era así pero no podía darme estos lujos con mi madre y mucho menos salir del país, veo una tienda de ropa de bebés.

- Entremos a esta. Le informo a los guardias, estos asienten.

Dos entran conmigo y tres se quedan afuera vigilando. Me emociono al ver todo lo que hay para bebés camino por los pasillos de ropa agarrando unas pijamas de animalitos.

- Te gustan estos. Le preguntó a un dormido Noah.

- Te parecen bien estos. Le preguntó ahora a un guardia que creo que se llama Matías.

- Todo lo que usted escoja estará bien mi señora. Me contesta este.

Sonrió, como me gustaría hacer esto con André. Sigo en mi trabajo buscando más ropita una vez lista y satisfecha con lo que tengo voy a la caja a pagar, la muchacha me sonríe y da las bolsas con las cosas que compre, el guardia le da una tarjeta de crédito que André les proporciono para todo lo que yo quisiera.

Salimos de la tienda, comenzamos a caminar pero Noah comienza a removerse en su cochesito, paramos un momento ya que no quiero que su llanto se haga presente para eso lo agarro de una vez y lo acomodo bien en mis brazos.

- Mejor volvamos, es mucho por hoy. Digo viendo a los guardias estos asienten.

- Puedes llevarte el cochesito porfavor. Preguntó

- Claro que sí mi señora. Dice Matías agarrándolo.

Coloco la pañalero en el cochesito y comenzamos caminar hacia nuestro apartamento, saco mi pecho y se lo doy a Noah tapando este. Minutos después ya nos encontramos subiendo el ascensor, llegamos al último piso y entramos a nuestro apartamento.

- Como les fue ? Pregunta André asiendo que de un brinco en mi lugar

Este está sentado con un vaso de whisky? No se la cosa que tiene algún licor.

- Pues bien, fuimos a comprarle ropa a Noah. Digo sentandome a la par de el

- Y tu ? No cómpraste. Pregunta.

- Ah no, otro día.

André hace un gesto con las manos a los guardias y estos se retiran dejándonos solos. André deja su vaso en la mesita de cristal que adorna la sala.

- Erick! Grita André y este se hace presente.

- Si mi señor? Pregunta este

- Puedes llevarte a Noah a su habitación. Dice quitándome a mi bebé de los brazos y entregandoselo a Erick.

Este asiente y sale de la sala. André se vuelve a sentar a la par mía con una sonrisa de lado. Entierra su cara en la curva de mi cuello sintiendo como comienza a dar lijeros besos y chupones. Siento una de sus manos colarse en mi vestido.

- No sabes lo duro que me pones cuando usas estás medias. Dice con voz ronca en mi oído.

En un rápido movimiento me pone en su regazo con cada pierna al lado de su cintura. Estampas nuestros labios en un beso urgido, lo sé porque siento su dureza rosar con mi parte íntima.

Este sube mi vestido dejándolo enrollado en mi cintura, siento como de un tirón hace rasgadas mis bragas de encaje haciendo que un gemido se me escape. Con manos temblorosas comienzo a desabrochar su pantalón de vestir negro una vez hecho me elevo un poco para que se los bajé junto a su boxer.

- Ahhh!! Gimo cuando nuestros partes se rozan.

- Esto va hacer rápido nena. Dice André elevandome un poco por las caderas acomodando su miembro en mi entrada, dejo caerme de un tirón haciendo que los dos soltemos un gemido de satisfacción.