Enamorada de Un Mafioso

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André lleva encerado toda la mañana en su despacho, no se que haya pasado con ese asunto de las noticias, Erick lo único que me dijo que André se alegraba que no haya salido mi foto o la de Noah también, eso era un peso menos.

Me encuentro en la terraza sentada en un sillón muy cómodo que adorna este lugar, Noah se encuentra en su moisés al lado mío. Pero unos gritos hacen que me desconcentre de un libro que estaba leyendo.

- Pero no puedes hacer eso. Grita Erick hacia André quien se dirige hacia donde estoy.

- Oh claro que puedo. Le contesta este.

- Te quedarás aquí con Erick y unos guardias tengo que viajar. Dice levantando a Noah de su moisés.

- Viajar? A donde? Preguntó confundida

- Tengo que ir arreglar algo a Rusia. Dice tranquilamente.

Pero que carajo! Se volvió loco? Como piensa volver a Rusia si de hay es donde estábamos huyendo.

- Te has vuelto loco? Digo levantandome del cómodo sillón.

- Lo mismo le dije yo. Bufa Erick cruzando sus brazos.

- Tengo que arreglar unos asuntos y se necesita de mi presencia. Dice André con Noah es sus brazos.

- Entonces arreglaré una pequeña maleta para Noah y para mí. Digo intentado salir de hay hacia la habitación

- Que ? Preguntan los dos al mismo tiempo.

- Si, si tú te vas nosotros iremos contigo. Digo decidida

- Dacota iré por asuntos de mi mercancía que no se está distribuyendo bien, no iré de vacaciones. Bufa este

- André no puedes dejarnos aquí. Digo entrando en modo histérico

- Claro que puedo, si es para que estén a salvo lo haré. Dice decidido 

Lo veo alegarse con Noah hacia una esquina de la terraza viendo la ciudad que tenemos al frente de nosotros, ahogo un grito con la palma de mi mano, Erick solo me ve con una sonrisa burlona saliendo del lugar.

Vuelvo a tomar asiento intentando concentrarme otra vez en mi libro pero no puedo, André nos dejará aquí y el se irá no es que nos este abandonando verdad ? Realmente necesito calmarme estoy pensando cosas que no son.

- Alguien tiene hambre. Me saca de mis pensamientos André.

Me entrega a Noah quien hace pucheros adorables, desabotono mi blusa sacando mi seno del sujetador poniendo mi pezón en la boquita de Noah. Este comienza a succionar, André ve fijamente a Noah o a mi seno? Creo que es la segunda opción ya que sus pupilas se le comienzan a dilatar.

No sé como carajos pero André de un movimiento me pone en su regazo, chillo de la impresión y sostengo bien a Noah en mis brazos.

- André pero... Trato de hablar pero este le corta.

- Yo también tengo apetito. Dice con una sonrisa pícara sacando mi otro seno del sujetador.

Siento sus helados labios en mi pezón que se pone rígido por su tacto, un gemido alto se me escapa cuando comienza a succionar como lo está haciendo Noah joder! Chupa, lame y muerde mi seno haciendo que tenga que callar mis gemidos con la palma de mi mano.

Despega sus labios de mi sensible seno.

- Estaré fuera por tres días, te quedarás protegida y Erick estará para lo que necesites. Habla juntando nuestras frentes.

- No puedo ir contigo? Preguntó esperanzada a que me diga que si

- Sabes que no, solo serán tres días si. Trata de tranquilizarme.

- Solo tres días. Repito suspirando.

Noah termina de alimentarse, antes que marina se lo lleve a su hábitacion André se despide de el, bajamos de nuestro piso. Unas camionetas ya lo esperan para llevarlo al aeropuerto.

- Promete que te cuidarás André, salimos huyendo de hay para que ahora tu vayas. Digo con temor palpable en mi voz.

- Regresaré si, arreglaré todo esto y volveremos hacer esa familia que tanto quiere. Promete besando mi frente.

- Que quieres decir con eso? Preguntó confundida.

- Te amo si? Regresaré lo prometo. Dice besando por última vez mi labios y subir a la camioneta.

Veo a estas perderse por las calles de la ciudad, suelto un suspiro, que quiso decir con eso? Ojalá y sea algo bueno para nuestras vidas.

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Me encuentro en mi habitación, nerviosa, asustada, histérica, y sobre todo preocupada. André hace dos días que tuvo que haber vuelto ya hace una semana que se fue, el me prometió que solo iban hacer tres días con hoy ya son cinco.

Noah está acostado en la cama el también ha estado algo inquieto, también extraña a su padre, le he preguntado a Erick si sabe algo o a Matías pero los dos siempre me responden que no saben nada, que tenga paciencia y que esté tranquila.
No puedo tener paciencia y estar tranquila sabiendo que André está en el país donde lo iban a meter preso por el resto de su vida.

- Mi señora. Oigo que me llaman del otro lado de la puerta.

- Adelante. Digo dandole paso a Erick y Matías.

- Pasa algo? Preguntó viendo a estos que se encuentran nerviosos

- El señor Black está al teléfono, quiere hablar con usted. Dice Erick dándome el teléfono

Sonrió recibiendo este, al fin de digna a llamar este.

- André, amor dime qué ya vienes en el avión. Hablo sosteniendo el teléfono en mi oído.

- Escúchame bien, ya no volveré con ustedes el piso donde están es suyo te pasaré una mensualidad para Noah y para ti, Erick y Matías se quedarán contigo. Dice con voz fría.

Pero que carajos ? He escuchado bien? No, no, no André no puede hacerme esto.

- André ... Pero que dices? Preguntó temerosa.

- Ya escuchaste bien, Noah se quedará contigo yo no tengo tiempo para cuidar a un niño, pronto te llegarán los papeles del divorcio también, solo te pido que se cuiden si? Habla este y acto seguido cuelga.

- André? André. Hablo pero este ya me ha colgado.

Dejó caer en teléfono, siento como todo me da vueltas. André me ha abandonado, nos ha dejado. Siento náuseas y voy corriendo al baño.

- Mi señora. Oigo que me llaman Erick y Matías.

Vacío todo lo que tengo en mi estómago, lágrimas salen de mis ojos por la fuerza de las arcadas, siento como me sujetan mi cabello. Una vez he desvaciado todo me dejó caer en el suelo. Lloro con todas las fuerzas, mi llanto se escucha en todo el baño.

Erick trata de tranquilizarme pero no puedo, siento que no puedo respirar. Todo a mi alrededor comienza a dar vueltas oigo a lo lejos como Erick llama a Matías tratan de que mis ojos no se cierren pero logro caer en un oscuro sueño, con el único pensamiento de que André nos ha abandonado.