♡ 06 ♡

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Ya habían pasado dos días desde que Volkov quedó inconsciente. Horacio iba a verlo cada que tenía tiempo libre, no le importaba si se suponía que estaba en la carcel, ya no le importaba casi nada, él solo quería que todo estuviera bien y poder ser él nuevamente.

Conway pasaba día y noche buscando información y pistas, si volvía a tener otra baja se volvería loco, peor aún si era de su mano derecha.

Horacio se encontraba en el hospital, había ido a ver al comisario un rato con la esperanza de que despertara pero no fue así. La ansiedad so lo comía día a día cada vez más...

-¿Horacio?- se escuchó por aquel pasillo.

Este se giró para ver aquel doctor que tanto le parecía atractivo. Al de cresta se le formó una sonrisa al verlo, hacía tiempo que ya no se veían.

-¡Claudio!- corrió hacia donde estaba este para darle un abrazo.

El nombrado le correspondió el abrazo con una sonrisa en su rostro -¿Cómo estás? Hace tiempo no se te veía por aquí ¿necesitas ayuda?- dijo luego de separarse de aquel abrazo tan cálido que le dio Horacio.

-No, no, solo vine a recoger unas pastillas que me recetaron- le mintió, sabía que si se daba cuenta que seguía en el CNP Conway lo mataba.

Estuvieron un rato hablando hasta que le sonó el teléfono, el de cresta le hizo un gesto a Claudio con la mano para despedirse mientras contestaba.

-Horacio al aparato ¿quiere pasar un buen rato?- contestó con un tono burlesco pero coqueto.

-Ehh... ¿cómo que si quiero pasar un buen rato Horacio?- se escuchó al otro lado del teléfono por parte de Gustabo.

-Perdona, es que pensé que era alguien más- decía mientras trataba de contener la risa.

-Joder...- se mantuvieron en silencio unos segundos, Horacio trataba de no reírse o al menos que no se le escuchara -Escucha, dice papu que si puedes venir, tenemos que poner aprueba a los alumno.

-Vale, ya voy para allá- dijo mientras se montaba en su vehículo y se colocaba el pasamontañas una vez estuviera dentro. Condujo hasta comisaría para encontrarse con Conway y Gustabo o en este caso, Fred. Una vez estaban los tres juntos se dirigieron hacia el norte para planear que hacer.

-Bien ¿se os ocurre algo?- los dos enmascarados se volvieron a ver esperando respuesta alguna por parte del otro.

-Bueno, podríamos hacer un código uno a ver que tal les va- mencionó el menor de los tres, el superintendente asintió haciendo una pequeña curva con sus labios.

-¿Usted vendrá?- preguntó el de ojos azules, le emocionaba que Conway fuera junto a ellos, sin embargo no tuvo respuesta por parte de este.

Cuando llegaron a comisaría Conway se dirigió hacia el fondo del lugar mientras que los subinspectores iban detrás de él.

-Os voy a dar una ubicación en la cual voy a estar ahí una vez termine la persecución ¿de acuerdo?

Los subinspectores asintieron y se quitaron sus camisas y los chalecos para que los alumnos no les reconocieran y se dirigieron a robar algún vehículo que estuviera cerca del lugar.
Cuando se alejaban de aquel lugar Conway no pudo evitar mantener su vista en aquel muchacho de pantalones celestes pero... ¿por qué? Ni siquiera sabía la razón pero no le disgustaba aquella sensación que tuvo por un momento hasta que lo perdió de vista. Ambos amigos se encontraban en el vehículo robado, estaban esperando a que llegara la policía por ellos, esta no duró mucho ya que la cuidad estaba tranquila.

-Suave- decía Dan mientras buscaba lugares en el GPS para perder a los policías -Vale, en la siguiente gira a la derecha y luego a la izquierda.

Estuvieron una media hora en la persecución hasta que se cansaron y llegaron al punto en el cual estaba Conway esperando.

-Muy bien muñecas ¿cómo estuvo?

-El de la mery estuvo muy bien pero el Z... podría mejorar- dijo Fred bajándose del vehículo mientras los alumnos observaban extrañados.

Conway procedió a explicarles a los alumnos que era una prueba para luego irse con los subinspectores a comisaría del norte y que se volvieran a colocar sus pertenencias.

-¿Cómo está Volkov?- aquellas palabras se escucharon por todo el patrulla, Dan levantó su cabeza dirigiendo su vista hacia el superintendente.

-No ha despertado aún...- respondió con un tono de tristeza.

-No quiero que vuelvas a verlo si no vas con máscara, estás de secreta, Dan-mencionó recalcando la última palabra.

El menor asintió y siguió jugando en su celular esperando a llegar a comisaría. Cuando llegaron los tres se adentraron en comisaría para agarrar sus cosas.

-Súper, yo voy a realizar mi 10-10 ¿me podría acercar a mi casa?- mencionó Dan luego de ponerse su ropa normal. El superintendente asintió y se dirigió hacia aquel vehículo para esperarlos.

-¿Está todo bien, Dan?

-Si, si, solo me preocupa un poco Volkov, ya sabes...

-Joder... el cabeza de hormiga va a estar bien ¿de acuerdo?- dijo acercándose para poner una mano en el hombro del menor.

-Sí... eso espero- El de cresta formó una sonrisa para luego ponerse su pasamontañas.

Dan salió junto con Fred para entrar Z en el que se encontraba Conway esperándolos

-Marca ubicación- El menor marcó su nueva casa la cual estaba a unas cuantas de la de Gustabo, luego estiró su brazo para encender la radio mientras que Conway manejaba. -¿Desde cuándo vives a unas casas de mí?- al de ojos azules se le formó una pequeña sonrisa al darse cuenta que ahora el de cresta vivía en el mismo barrio que él.

-Hace unos días, me estaba quedando sin dinero y decidí cambiarme de casa.

-¿No será por tu noviecito?- preguntó Conway con tono burlesco y alzando una ceja.

-¿No súper ¿cómo creé?- respondió con tono nervioso mientras negaba con las manos.

Conway bufó y Fred se rió ante las acciones de sus dos compañeros; no tardaron mucho para llegar a casa de Horacio, este se bajó del vehículo para irse al interior de esta.
Luego se fue a dejar a Gustabo a su casa.

-¿Se queda a tomar algo, viejo?- mencionó Fred con un pequeño tono coqueto.

El mayor lo miró de reojo y es que si por él fuera se quedaba todo el rato que quisiera -Superintendente para ti, capullo.

-Ya Conway, no sea tan amargado ¿viene?- respondió mientras se recostaba en la puerta de aquel patrulla.

-Vale, pero no mucho tiempo.

Ambos se dirigieron hacia dentro de la casa del menor, una vez dentro se retiró aquella incómoda máscara. Conway se dirgió al sofá que se encontraba en la sala del lugar y se sentó allí dejando caer su cabeza hacia atrás.

-¿Qué quiere tomar?- se escuchó desde la cocina por parte de Gustabo.

-¿Tienes Whisky?

-Hombre, por su puesto- El rubio sacó dos vasos y en ellos vació el whisky -¿Está cansado, papu?- el mayor solo gruñó y agarró el vaso para empezar a beber.

Estuvieron un rato hablando y haciéndose bromas entre ellos, Conway terminó emborrachandose hasta más no poder y no podría manejar en ese estado; Gustabo tampoco es que estuviera muy estable como para llevarlo por lo cual le ofreció dormir en aquella casa, no sabía si aceptaría pero aún así se lo ofreció, en cierta parte, le hacía ilusión tener a aquel hombre durmiendo en su casa pero... ¿por qué?

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Ola msjalqb
Estaba escribiendo esto en la noche y al final me quedé ruleada y hasta ahorita lo terminé jsksjsk

Espero que les guste, los tkm <3
Besos en el botón wiii

𝐒𝐢𝐞𝐧𝐭𝐞𝐬 𝐥𝐨 𝐦𝐢𝐬𝐦𝐨? - 𝐕𝐨𝐥𝐤𝐚𝐜𝐢𝐨♡Donde viven las historias. Descúbrelo ahora