Capitulo Diecisiete

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— Recuerdame de meterlos a la misma institución mental...— murmuró Haz a Sam a lo que ambos rieron — Sigo sin entender — Harrison elevó sus manos al aire.

— Estamos en California, Tom la conoce bien si, pero no hay nada aquí que sea completamente familiar para el, en cambio , en Inglaterra, ahí nació hermano, pasó la mayoría de su vida ahí, ahí está su hogar, ese podría ser el detonador, podemos llevarlo a la casa de navidad, a la casa del árbol, la escuela...-

— ¡La escuela! — todos saltaron asustados después de que gritara — ¡Chicos, chicos! — golpee a Harry en el brazo — ¡La cápsula del tiempo!

Flashback

Iremos a prisión — exclamaron Harry y Sam al unísono mientras sujetaban una pala

— Cállense idiotas pensaran que estábamos enterando una cadáver ¡Hola señora Sanderson! — saludó Tom mientras la señora Sanderson apresuraba el paso  junto a sus perros y saludaba con una sonrisa. — No creo que la escuela se moleste ¿ustedes?

— Nah — dijimos Harrison y yo.

— Además, cápsula generacional — dijo Charlotte señalando la caja — ¿es una palabra cierto? — reímos mientras Tom y yo seguíamos cavando, sus ojos estaban puestos en mi mientras sonreía — Apresúrense chicos que la ceremonia de graduación está por comenzar

Metimos la caja metálica con nuestros recuerdos y memorias en la hueco, comenzamos a cubrirlo rápidamente, Tom colocó una placa de cerámica con el grabado: Los Holland, Los Osterfield y Darcy Jones estuvieron aquí, recuérdenlo, Spider-Man piso estas instalaciones. Abrir si Harry logra graduarse de la universidad.

Ahora ¡corran! — corrimos en  dirección a la ceremonia, algunos birretes volaron por los cielos mientras sujetaba fuertemente la mano de Tom y gritamos emocionados...

Fin del flashback

Todavía no podemos abrirla — dijo Sam — Harry nunca curso la universidad — el mismo le lanzó un cojín a la cara a su gemelo

— Lo se, pero eso puede ayudarlo a recordar, solo el sabe el significado de lo que metió en aquella caja de metal, aparte, yo si curse la universidad, han pasado cuatro años desde que la enterramos, creo que es tiempo de desenterrarla.

— Tiene un punto — concordó Hazza — seamos realistas, Harry nunca ira a la universidad.

— ¡Hey!

— Pero, no creo que Tom este en condiciones de viajar — dijo pasando por alto el reproche del ruloso.

— Será dado de alta en un par de días si no estoy mal, podemos partir la semana que viene.

— Darcy pero la universidad...-

— Mande un correo anoche, me mandaran los trabajos por correo para que no me atrase, cuando vuelva haré las evaluaciones finales. — asintieron — entonces...— estire mi mano

— Nunca dejamos a uno de nosotros abajo, yo voy — Harry colocó su mano encima de la mía

— Si hay una oportunidad de que Tom recuerde a Darcy, cuenten conmigo — Sam se unió a nosotros, posamos nuestros ojos en el rubio

— Siempre me arrastrarán a sus idioteces — reímos — pero tienen razón, quiero que Tomarcy vuelva — solté una carcajada — no enterrare un cadáver de una vez aviso — colocó su mano junto a las nuestras — no crean que se han salvado de la institución mental he — dijo señalándonos a mi y a Harry

— Lo dice el que piensa que enterraremos un cadáver.

Estallo a carcajadas, alzamos nuestras manos al aire, había esperanza, había una oportunidad de que Tom recordara, Tom me recordara, aun que me cuestionaba si seria lo mejor, tal vez merecía su olvido, dolería, si, pero por un tiempo, olvido lo que ocurrió en Nueva York, olvido lo ocurrido en aquel aeropuerto, olvido lo nuestro, me olvido, y eso estaba bien en cierta parte, no tendría que sufrir, no tendría que hacerlo sufrir mas, no sentiría aquella culpa que mostró en mi departamento. Iniciaba literalmente de cero, de cero conmigo, y eso estaba bien, aun que quisiera negarme a aceptarlo. Obviamente, dolía, años de amistad, de momentos juntos, momentos por los que valía la pena pelear. Era confuso, no quería que recordara lo nuestro, pero no quería perderlo, siempre hay cosas buenas y malas en las cuales pensar, las cuales complican tus decisiones, y aquí estaba una de ellas.

[...]

— Eso podría ser de gran ayuda — acepto el doctor con bata blanca —en verdad podría despertar su memoria, pero, no quiero ser...-

— Mejor no doc, no queremos sus malas vibras — interrumpió Hazz levantando la mano para que el doctor guardara silencio — con todo respeto — se apresuro a decir, el doctor se limito a reír y sonreír, después se alejo por el pasillo. 

— Bueno, ¿vamos? — pregunte señalando la habitación de Tom, todos asintieron en respuesta, nos adentramos en la habitación, Tom se encontraba leyendo un libro, EL libro, nuestro libro. — Buena lectura. — levanto su mirada y sonrió al vernos

— Harry me lo trajo, lo cual encuentro sumamente insultante para mi dislexia pero, ahí vamos, es bueno, me gusta — mi  mirada se poso en Harry, el solo se limito a guiñarme un ojo, si, ese era Harry Holland. 

— Si, es un gran libro...— el sonrio, cerro el libro y nos miro atento.

— Vamos a casa hermano — sus ojos cayeron en Sam — Vamos a Kingston.

— ¿En serio? — pregunto emocionado mientras se incorporaba en la cama — ¿de verdad?

— ¡Si! Bueno, aun no le mencionamos nada a nuestros padres, pero se que estarán de acuerdo, Inglaterra te extraña Tom — dijo Harrison mientras tocaba lentamente su hombro. 

— Tus padres vinieron a verme hoy — carajo — no les habías dicho que...-

— ¿Que no puedes recordar? No, decidí saltarme ese paso — agache la mirada — se pondrían a hacer demasiadas preguntas a las cuales no tengo respuesta..., pero se enterarían tarde o temprano, tal como ocurrió, con razón tenia como cincuenta llamadas perdidas de ellos, ni siquiera sabia que ya estaban en Los Angeles. 

—Bueno... entonces, ¿cuando partimos? — pregunto el. 

— Te dan de alta en dos días, para el viernes supongo que ya estaremos partiendo Inglaterra — el asintió emocionado.

— Déjame llevarte a casa Tom...— murmure. 

[T.H] There Will Always Be You And Me, Somewhere. [2]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora