You'll be back [Luzito/Luzulito]

7. Plan en marcha

Pov. Luzu

Me desperté por la mañana. En ese momento no sabía que hora era; todo estaba a oscuras, tal y como yo lo había dejado el día después de las elecciones. Una desventaja de querer encerrarme, supongo.

Estaba en el suelo, con Manolo aún dormido a mi lado. Me levanté, no tenía mucha hambre, pero algo debía comer. Una o dos tostadas después, saqué mi libreta, y comencé a leer mi plan. Intentaba ser positivo.

Después de revisarlo un par de veces, cogí algunas cosas y salí de casa en busca de Vegetta. Ya le había dejado una carta para ver si se quería unir a mí para derrocar a Lolito. Esperaba un "sí" de su parte.

Pov. Lolito

Me pasé toda la tarde y noche buscando cerdos. Creí que sería más sencillo, pero era difícil encontrarlos. Tras andar una o dos horas, al fin los encontré. Pero me perdí al volver, así que, para cuando llegué a casa, ya estaba amaneciendo.

Guardé la carne de cerdo, y dormí lo que pude (una o dos horas), suficiente para mí. Y, después de prepararlo todo, me quedó la peor parte: esperar. Me hice el desayuno favorito de Luzu, para no olvidar mi causa, y cogí una mochila con algunas cosas, como una espada, prismáticos, las zanahorias, etc. Lo esencial. 

Al llegar, pude ver que se estaba haciendo unas tostada. Habría sido bonito que desayunáramos juntos, pero  eso debe esperar. Lo ví marcharse con algo de prisa, y me entró la duda; ¿Espiarlo, o seguir con mi plan? Mis celos eran fuertes, pero pensar que podría ser mañana mismo el día en el que podamos estar juntos, me hizo continuar con mi plan.

En cuanto se alejó lo suficiente, me pusé manos a la obra. Me acerqué sin cuidado, esa fué mi perdición. 

Lolito: ¡Mierda! Torretas...

Me escondí como pude de ellas, con bloques, claro. Me tomó más tiempo de lo que pensé por culpa de las malditas torretas, pero, gracias al truco ese de los cojines esos del deco-craft, pude entrar fácilmente. 

Al principio pensé que Luzu habría escondido a Manolo, como la última vez que vinimos a por él, pero no fué así. Estaba a plena vista.

Lolito: Pobre e inocente cerdito. Que iluso es tu dueño al dejarte suelto a tus anchas por la casa. Tan solo y tan expuesto al peligro. No te preocupes, yo te llevaré a un lugar seguro.

Saqué las zanahorias.

Lolito: Vamos, ven.

Salir de la casa fué más sencillo. Por la puerta trasera. Directos a casa. Con las torretas rodeadas de bloques, no había ningún peligro. O, al menos, para el cerdo. Debía procurar que nadie me viera, lo que sería algo difícil teniendo la casa de Auron justo al lado.

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20/07

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