Mira con una pequeña sonrisa su alrededor, sus compañeros van y vienen, todos ignorando a los demás.
— Yo sé que la vida puede ser hermosa.
Dice decidido arreglando sus ropas, hoy era el primer día de su último año en preparatoria, ve como todos van y vienen, sin prestarle atención o así fue hasta que tropezó e interrumpió a una pareja.
— ¡Lo siento!
— Agh.
Dijo la chica alejándose de ellos.
— Mira lo que has hecho maldito nerd.
Dicho fastidiado mientras caminaba lejos de él.
— Sí, yo se que puede ser hermosa.
Volvió a repetirse.
— ¿Qué puede ser hermosa?
— ¡Ah! Kubo no hagas eso.
Dijo alejándose unos pasos de su amigo.
— Lo siento, llegué temprano y te vi deambular por toda la escuela y me diste curiosidad.
— Te voy a poner una campana en el cuello, eres muy silencioso.
— No es mi culpa, la escuela no es muy grande tampoco.
— ¡Ya llegaron!
Una chica grito alterando a las demás, Miguel miró con ilusión a los tres chicos que entraban a la escuela, siendo observados y admirados por todos.
— Que fastidió, sobrevivieron otro año.
— Sabes que ellos son muy listos.
— ¡Agh! No entiendo porque son tan malos.
Miguel se encogió de hombros y apretó sus puños.
— Me gustaría ser su novia.
— Un sueño.
— Si me juntara con ellos, los chicos se precatarian de mi.
— Tan hermoso.
— Me gustaría que fuesen mejores personas.
Habló Kubo uniéndose a la multitud, multitud dónde había perdido a su amigo.
— Eso sería hermoso.
Dijeron las chicas.
[...]
— Simón, saltarse las clases es tan anticuado y más el primer día.
Dijo Marco mientras comía una paleta de cereza.
— Pero no te negaste mucho.
Marco le mostró el dedo de enmedio logrando la risa de sus dos compañeros.
— Miren lo que tenemos aquí, trío de ratas escurridizas.
— Agh, director Kyle.
— Bienvenidos a su nuevo ciclo escolar, Marco, Simón y Leo. Parece que tendrán una larga suspensión.
— Director, no es lo que piensa.
— ¿Entonces qué es?
— Que estamos tomando un descanso, todos nosotros tenemos permiso, miré, el profesor del taller de fotografía nos mandó a prepararnos para una nueva sesión.
— ¿Seguros?
El pelinegro miró la nota, no podía negar que era la misma letra.
— Lo tiene ahí director, ¿Qué más desea que le digamos?
— Lo estoy vigilando joven.
Marco le guiño un ojo, lamio la paleta de manera sugerente y el director se marchó.
— Muy bien, ¿Quién eres tu don nadie?
— Soy Miguel, Miguel Rivera y necesitó un favor de ustedes.
— ¿Un favor?
Preguntó Leo.
— Que me dejen estar todo un día con ustedes, no es necesario que me hablen, pero si estoy con ustedes y los chicos ven que me toleran no se meterían conmigo después, solo quiero un último año en tranquilidad.
Marco bufo.
— Eres muy gracioso Don nadie, pero, ¿Qué ganamos nosotros?
— Soy bueno falsificando boletas de calificaciones, permisos y notas de ausencia.
— ¿Recetas médicas? Mi entrenador no me quiere dar un descansó y yo lo necesito...
— Simón, callate.
— Igual puedo hacer eso, pero, por favor piensenlo.
— Marco no lo molestes.
— Callate Leo. — Marco tomó el rostro de Miguel, le miró fijamente. — Viéndote bien don nadie, eres muy apuesto y atractivo, tienes buen cuerpo.
— Puede bajar un poco de peso, tiene unos grandes cachetes.
— Se les dice mejillas Simón y yo creó que te ves bien Miguel.
— Sabes, esto podría ser fantástico, un cambio de ropa, un poco de colonia, arreglamos tu cabello. Chicos hagamos que él sea irresistible.
— Hagamos de él todo un galán.
— Será divertido.
— ¡Hagan que sea irresistible! ¿Okay?
Marco dijo lo último con una sonrisa socarrona a Miguel, quien aclaró su garganta para contestar.
— ¡Okay!
Simón y Leo lo tomaron cada uno de un brazo y lo arrastraron a los baños.
[...]
— Deja de dar tantas vueltas, harás un agujero en el suelo.
— No llega Teodora y cuando lo vi estaba actuando raro.
— No eres su mamá, él llegará.
— ¡Ahí vienen!
— ¿Los profesores?
— ¡No! ¡Ellos!
— ¿Quién es aquél que los acompaña?
— Por dios Kubo mira quien viene entrando.
— ¿Miguel?
— Simón, Marco, Leo y Miguel, ¿No crees que sus nombres son tan geniales?
— Parecen Ángeles.
— Estas locas, parecen demonios y yo quiero que me castiguen.
— Bien chicos, todos sentados, hoy tenemos un nuevo compañero.
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Amor en el 20.
FanfictionYo igual necesito otro entretenimiento. Van a ser pequeños cortos de nuestra querida pareja HIGUEL. La imagen de portada pertenece a su autor, todos los derechos a quien corresponda.