Perfectas Imperfecciones

Capítulo Nueve

Volvimos a casa de Jay, antes de que todos se pregunten donde estábamos, aunque obviamente ya todos se lo estában preguntando.. por que cuando volvimos nos miraron como si les debiéramos dinero.

- ahm pasaré al baño, permiso- dije ante la incomodidad del momento.

Entre al baño, cerré la puerta y me sente en el piso. Si, en el piso por que tenía que organizar lo que siento ahora.

Creo que me he enamorado de Jay...

No soy de las que esconden su sentimiento a sí misma, me gusta y ya.

Suspiro, me miro al espejo: me sentía bien, es decir, yo me sentía hermosa, por que alguien me ve así y ahora yo me veo así, radiante y en mi cara ya no veo ningún tipo de sufrimiento, veo a una persona segura.

Salgo de allí, y veo abierto el cuarto de Jay.. así que entro, cuidando que nadie me vea.

Una habitación acogedora, sencilla, fotos de el y sus amigos..

- Creo que este no es el baño, querida.

Me voltee sobresaltada.

Su madre estaba allí. Sentí el impulso de empujarla, salir corriendo, cambiarme De ciudad, nombre, y que Nadie nunca me consiga.

- Si, lo siento, buscaba a Jay. - logre decir. Tragándome mi dignidad.

- Pues aquí, no está.

- Ah me dí cuenta, y ¿donde está? -trate de sonar tranquila.

- En la sala. - me miró, diría que horrible.

Así que caminé y antes de pasar por la puerta le sonreí falsamente a la madre de Jay.

Me re incorporé a la sala y seguimos una conversación, donde la única que no participaba era su madre.

Me despedí de todos y me fuí

Al llegar a casa mi mamá aún no había llegado, así que subí a mi habitación y me comencé a ccambiar y a desmaquillar y oí la puerta abrirse.

- ¿Cielo? ¿Estas allí? - era mamá.

- ¡aquí!

- Ah hola ¡cariño! ¿Como te fue? - me preguntó con los ojos entrecerrados y sonriendo, al mismo tiempo.

- Estuvo.. - me pare a pensar en lo hermoso que fué.. - fué increíble mamá.

- Ya veo - y se sentó en la cama- y.. me vas a contar o ¿te tengo que rogar?.- dijo sonriendo.

Así que le conté todo menos el beso. Decidí guardar eso más para mi.

Su sonrisa desvaneció.

- Ronnie, creo que no deberías tratar de ser algo más que amigos con Jay.. - Ay dios mamá de Jay sal del cuerpo de mi mamá.

- Mamá no creo que eso pase.. pero ¿por que no?.

Mi mamá se levantó y me dijo:

- Descansa. - y me dió un beso.

- ¡no! ¿Qué? Ya va espera.  ¿Por que de repente crees que Jay no es apto para mi? Yo sé que el te agrada, es un buen chico.

Mi mamá se tenso. Y se podría decir que sus ojos se aguaron.

-  algo mamá? - dije preocupada.

- Estoy cansada. Deberías dormir, eso haré yo. Adiós, te amo. - y así, me dejó parada con mi intriga, cerrando la puerta.