Strawberries And Cigarettes 💦|| AkaFuri ||

SEIS

"- Escúchame bien, Kazu-kun, lo que tienes que haces para saber si le importas o no a un tsundere es ponerlo en una situación en donde tienes que hacer elegir, o dejar su tsunderismo para no perderte, o no hacerlo, obviamente, si elige la primera, estás muuuuy tontito por ti. -. Su madre levantó un pulgar, con una gran sonrisa en el rostro.

- Entiendo, pero, ¿Como puede llegar a una situación así?

- Observa, sígueme en silencio y que papá no te vea -. La mujer se levantó de su asiento y se dirigió a la cocina, Kazunari la siguió con sigilo, y una vez allí, quedó detrás de una pared para poder velos bien.- Querido...

- ¿Humm...? -. El hombre la miró por sobre su hombro, él ya se había adelantado con la cena mientras su esposa e hijo hablaban de quién sabe que.

- En los últimos días e estado pensando si... Si me estás envitando o no, ya sabes, casi no me miras ni me hablas, gruñes cuando te abrazo y no me dices que me quieres... -. Su madre cubrió sus labios y bajó la mirada, fingiendo tristeza.

'es una excelente actriz, rayos, obviamente que papá hace eso, es un Tsundere después de todo'

- ¿Qu-?

- ¿Ya no me amas, querido?

- Y-yo... -. el hombre desvió la mirada, un leve rubor cubrió sus mejillas y trató de cubrirlo inútilmente con su mano.- N-no es eso... Es solo que...

- ¿Qué?

- N-no es que no te a-ame...

- ¿Entonces...?

- Y-yo...

- ¿Me amas...?

- ... S-si... Te... Te amo...

La mujer sonrió triunfante, abrazó a su esposo y le dió infinidad de besitos en el rostro, mientras que este la dejaba ser, primero debía calmar su alborotado corazón.

'¡Diablos! ¡Eso fue súper tierno, mamá! ¡¿Ustedes no es que ya pasaron los cuarenta?!'

Kazunari al menos ya tenía una referencia de la cual guiarse..."

Takao mordió su labio del nerviosismo. Tenía miedo.

Tenía mucho miedo.

Está bien que a su madre le haya funcionado, porque ella ya estaba segura de los sentimientos de su padre, pero él no, Takao no sabe exactamente los sentimientos de Midorima, quería seguir hablandole por las mañanas, molestándole por las tardes y abrazarlo cada que puede, pero si en verdad a Midorima le molestaba e incomodaba su presencia, no podría hacer nada, porque Kazunari no quería que Shintaro le dijese eso.