𝐷𝑜𝑢𝑏𝑙𝑒 𝑙𝑜𝑣𝑒 [𝐸𝑛 𝐸𝑑𝑖𝑐𝑖𝑜́𝑛]

十九

Levi bufó al sentir un peso en su hombro derecho. Era Ymir, apoyando su codo sobre él, observándolo con ojos maliciosos y una sonrisa burlona.

—Oye, ¿tú nunca sonríes? —inquirió, pellizcando una de las mejillas ajenas. No pudo evitar soltar una risotada en el momento que Levi se removió con brusquedad—. Tal vez ahora se te quite esa piel de fantasma, ¿no lo crees, enano?

—¿Podrías madurar?

Levi agradeció internamente la aparición de Petra, ya que, tal vez, podría soltar un par de oraciones que arruinarían el —muy— planeado paseo. Expulsó un suspiro lleno de alivio al ver como la chica más baja, proporcionaba empujoncitos leves en la espalda baja de Ymir, alejándola del lugar. Era mejor ignorar todo lo referente a ella. Sabía que todo era con el fin de fastidiarlo. Dio un rápido vistazo a su alrededor, inconscientemente una mueca de disgusto se dibujaba en su rostro. No podía negarlo. 

Sí, estaba de mal humor. 

De todos los lugares y planes que existían, nunca se le pasó por la mente que estaría en la playa, en una cabaña alquilada con un grupo de, aproximadamente, siete personas.

Él odiaba la playa. Odiaba que el sol lo colocara como un camarón, odiaba que la arena se le metiera en los pantalones y odiaba que le arrojaran esa agua salada que hacía que sus ojos se irritasen.

—Trata de divertirte —comentó Liam, extendiéndole su morral y un par de mantas—. Recuerda por quien viniste aquí. No lo arruines.

Él asintió, desganado. Era cierto. La única razón por la cual accedió se encontraba con su mascota en brazos hablando con Sasha y quien parecía ser su novio a unos pasos de distancia.

Podría soportarlo,

Sólo sería un día, 

Solamente...

—¡Enano, apresúrate!

Si Ymir se callara.

~♥︎~

—¿Te molesta que hayamos venido aquí? —Mikasa tomó asiento a su lado, removiendo su sombrero. Ambos se encontraban en la orilla, el agua mojando sus pies— Sé que el sol no es tu mejor amigo.

Negó con su cabeza

—Admito que no es mi lugar favorito, pero el día está bien para estar aquí. Además, Bobby parece estar feliz.

Mikasa giró y sonrió levente al observar a Bobby jugando alegremente con Liam.

Antes de iniciar a contarle como se planeo todo sin que él lo supiera, Petra se acercó a preguntar si quería ir a cambiarse con las demás chicas. Ella aceptó y luego de murmurar un leve "Ya vuelvo"  se encaminaron juntas a los baños de la residencia. Ya ahí, cada una de las chicas poco a poco quitaba sus vestidos, shorts y blusas. Mikasa se sonrojo al sentir todas las miradas en ella.

—¿Tengo un bicho en la cara? —preguntó, sarcástica.

—Ese enano es un suertudo —musitó Ymir— ¿Quién diría que tendrías ese cuerpo, Mikasa?

—No es nada especial —desvió su mirada. En su día a día, solía usar ropa con una tallas más grande. Rara vez usaba ropa ajustada o reveladora. Admite que en parte, no le extraña del todo la reacción de sus compañeras.

—¿Bromeas? —intervino Sasha—  ¡Levi babeara al verte!

Oh, cierto.

Un fuerte ardor acaparó sus mejillas. No había caído en cuenta que Levi la vería en traje de baño. En el gimnasio usaba top deportivo, el cual exponía un poco su abdomen. Ahora era distinto, enseñaba parte de sus senos y trasero.