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"Vamos,sólo tienes que entrar,hablar con Tamaki y salir,ya has entrado otras veces,(T/N),¿porque estas tan nerviosa?"
Una joven de cabellos (c/p) se encontraba frente a la puerta del famoso Host Club de Ouran,debatiendo se de si entrar o no,por alguna razón se sentía nerviosa,sus manos temblaban levemente y caminaba de un lado a otro como si hiciera guarda en la puerta. Tal ves era el hecho de recordar lo apuestos que eran todos y cada uno de sus integrantes,o tal vez que le costaba comunicar se con la gran mayoría de personas,quizás eran ambas cosas,en este momento se arrepentia de ser parte del Consejo estudiantil.
"Tu puedes (T/N),si esperas a que comiencen a recibir visitas será peor"
Con decisión tras su intento de alentar se a si misma,se puso de forma correcta,mirando la gran puerta fijamente,tomó una bocanada de aire para luego con pasó firme acercar se y abrir la sin más.
...O eso planeaba,pues al tocar la perilla los nervios volvieron a ella,sus manos volvieron a temblar acompañadas de sus piernas,había ensayado incontables veces lo que diría de camino al lugar,pero no contaba con lo difícil que le sería algo tan simple como entrar. Sentía que iba a desmayar se en cualquier momento,¿porque la habían mandado a ella?¿no podrían elegir a alguien más?
Y entonces recordó,todos en el Consejo tenían un club asignado para supervisar,se habían elegido de forma en que estuviesen familiarizados con el tema del club,no obstante,el consejero estudiantil había pedido personalmente que ella fuese al Host Club,sabía que la chica sufría de aquel nerviosismo al tener que hablar con cualquier persona que no fuese su hermana,el creía que pasar tiempo con aquel singular club podría ayudar la.
Ella sabía que tenía razón,aunque quería poder hablar con más personas,le aterraba la idea de estar en un lugar llena de la abrumadora cantidad de chicas que llenaba el aula cada día,quería salir corriendo,pero nada en ella le respondía,algo en ella le decía que no tendría que decir mucho,pues conociendo al consejero,seguramente se habría tomado la molestia de ir a explicar la situación a los miembros del club,sin embargo,no podía pensar en algo que no fuera en miedo y nervios.
"N-No puede ser tan malo,ellos tratan con toda clase de chicas,seguro podrán entender me,¿verdad?"
Intento motivar se una vez más,está vez inhalando y exhalando varias veces para intentar tranquilizarse. Pasaron unos segundos que para ella fueron horas,y por fin se atrevió a abrir la puerta. Aquella cegadora luz,el aire fresco y el agradable olor a rosas frescas la inundó por completo,cada que había llegado a abrir esa puerta era como entrar al mismo cielo al cual la recibían tan bellos ángeles.
Pero la típica frase de bienvenida no la había recibido esta vez,en su lugar las atentas y curiosas miradas de los integrantes del club la observaban asomar se tímidamente por la gran puerta.
