Eres Especial - Meling [Nanatsu No Taizai]

1. Compañeros.

Pov's King:

Elaine: ¡King! ¡Apúrate! ¡Ya nos tenemos que ir a la escuela! -gritó sin gentileza desde la entrada de la casa-.

King: ¡Sí, sí! ¡Ya voy!

Solo me faltaba... ¿Dónde diablos estará? Siempre se me termina perdiendo y es la hora y no entiendo cómo...
¡Ah!, aquí está: el cargador de mi celular.

Bajé las escaleras y me dirigí hacia la puerta, encontrándome con Elaine haciendo un puchero por mi "tardanza".

King: Ya estoy aquí, tranquila -dije sosteniendo mi maleta-.

Elaine: Hermano, recuerda que nosotros, los chicos nuevos, tenemos que llegar aprox. 2hrs antes... -mencionó dirigiendo su mano hacia mi hombro para enfocar mi mente en lo que ella decía-.

King: Sí, lo sé. -le respondí yo apartando su mano con cuidado para aliviar su preocupación- Ya nos podemos ir.

Vi como a Elaine le brillaron los ojos, en serio se notaba su emoción al entrar a una nueva preparatoria.
Nos quedamos esperando el carro que mi padre había contratado para que nos llevase a la escuela, ya que él estaba muy ocupado como para trasladarnos. Típico de él.

Era increíble el tiempo que habíamos pasado con él los últimos años y no, no lo digo de buena manera, todo lo contrario... Puedo contar los minutos con los dedos de una sola de mis manos y eso es lamentable.

El auto estacionado frente a nosotros me había sacado de mis pensamientos, así que ayudé a mi hermana a guardar su maleta en el baúl y posteriormente la mía; esa preparatoria era como un internado y esa idea no me agradaba mucho, pues yo ya estaba acostumbrado a la comodidad de mi cuarto de una casa que conocía a la perfección... Pero esto de un cuarto desconocido en un lugar desconocido no era precisamente de mi agrado.
Luego, entramos al auto y emprendimos el viaje hacia nuestro nuevo "hogar", sí es que así se le podía decir.

[...]

Elaine: ¡Hermano! ¡Despierta, maldita sea! -su voz estusiasmada vaya que era ruidosa-.

King: ¡Ah! ¿Qué ocurre, Elaine? -dije con un notorio fastidio al ser despertado del plácido sueño que había llevado acabo los últimos 30 minutos-.

Elaine: Ya llegamos -se podía notar el brillo en su mirada- Oye... Hasta en un viaje de media hora tienes la capacidad de dormir profundamente, eres alguien increíble.

Y fue por la manera en la que me miraba que me di cuenta que no lo decía de buena manera, era increíble, sí, pero no de fascinación, sino de horror, pero... ¿Qué podía hacer? Amaba dormir y la mayor parte del tiempo mis pensamientos intrusivos no me dejan, entonces, ¿Por qué no he de aprovechar cada oportunidad que se me presenta?.

King: Ay, ya Elaine -reproché- Simplemente estaba restaurando energías para este primer día.

Y no mentía, algo me decía que esto sería realmente agotador.

Bajamos del auto y cogimos todas nuestras maletas, el chófer nos ayudo con algunas y poco a poco nos íbamos adentrando en esa preparatoria... Y wow, ¡Vaya que era enorme!
Nos acercamos a la recepción de aquel lugar, en donde nos atendió una bella señorita, los detalles de su apariencia no importaban mucho más que tenía los labios pintorreteados de rojo y las uñas realmente largas.

Recepcionista: Buenos días, ¿En qué le puedo ayudar?

Chófer: Buenos días para ti también. Lo que pasa es que estos chicos tienen una inscripción aquí.

Recepcionista: Ya veo... -nos había mirado de reojo antes de volver a hablar- Sus nombres por favor.

Ambos dijimos nuestros nombres completos y la chica se puso a buscar en su computador.