~Elizabeth~
Alexter y Cristian habían quedado en realizar una pijamada pero era obvio que algo se traían entre las manos.
Yo me encontraba demasiado aburrida y Eiden al parecer se encontraba en la misma situación que yo, los dos quedamos en que a las 10:00 pm nos veríamos de la cocina ya que yo me sentía un poco sedienta y mi garganta me raspaba, al ser una vampira necesitaba a alguien que me ayudara a controlarme y qué mejor que mi tua cantante para ayudarme.
Cuando entré en mi habitación no cerré la puerta ya que así se me dificultaría la salida; me cambié en el baño y como broche de oro puse una película para mayores de 18 años con escenas no aptas para todo público y subí el volumen, cómo sabía qué habitación de mi hermano estaba al lado de la mía era obvio que esté vendría corriendo para saber qué pasaba, después de eso salí de mi cuarto como alma que lleva el diablo y me dirigí directo a la cocina. Claro sin antes dejar mi celular grabando para ver la reacción de mi hermano, eso sería algo épico.
Ya en la cocina Eiden me dio un poco de sangre para que tomará esa sangre no era de él, sino de un ciervo que le habían traído las sirvientas para que se alimentaran. Al inicio empecé a tomar la sangre demasiado rápido pero poco a poco fui controlando mi sed y disminuyendo la velocidad con la que ingería está, hasta que un ruido me sacó de mis hermosos pensamientos ya que al parecer alguien se dirigía a la cocina y algo y me decía qué ese era mi hermano y Alexter.
Eiden y yo decidimos comer una manzana para disimular un poco y funciono, pero al ver la cara de enojo de mi hermano y Alexter casi muero porque me trague un pedazo de manzana completo, atragantarme como la menza que soy.-Pero en que estaban pensando ustedes dos.-expreso Cristian -¿Acaso querían darnos un ataque o qué?
-No, ademas no es mi culpa que ustedes dos sean muy curiosos y no respeten la privacidad de cada uno -dije alzando una ceja.
Cuando finalizamos nuestra charla de la privacidad la cual concluyó en que nadie en este castillo la tendría en especial yo, pero en mi parecer resultó ser algo muy injusto ya que yo no tenía culpa de que mis dos compañeros sean muy celosos. Así que para cambiar de tema e interactuar más decidimos hacernos algo para comer yo pensaba en unas palomitas pero no, cómo los señores querían jugar a MasterChef terminaron haciendo grupos Alexter y Eiden eran un grupo ellos se encargarían de hacer un postre, y Cristian y yo no encargaríamos de sé hacer otro. Claro el ganador no lavaba los trastes como premio.
Todo estaba yendo correctamente hasta que Alexter por cortar unas frutas término cortándose y haciendo que es el líquido carmesin me tentara a atacarlo. A los pocos segundos sentí como mis instintos vampiros toman el control de mí y decidí que lo mejor sería alejarme de ellos. Recordé que una vez en una revista apareció un lugar hermoso creo que se llamaba paramos, pero allí no había casi gente así que sería el lugar perfecto para tranquilizarme y me tele-transporte allá dejando a todos con la incógnita de lugar en donde me encontraría.
El lugar era muy tranquilo y todo iba a la perfección hasta que escuché que las pajas que se encontraban en el suelo crujían ya que alguien se aproximaba, eran dos niños los cuales estaban llevando un pequeño balde creo que este podría ser para coger agua pero creo que eso podría ser muy peligroso.
Escuchaba a la perfección los latidos de su corazón y eso no ayudo en nada a tranquilizarme, esta situación cada vez empeoraba y sin darme cuenta yo ya estaba caminando hacia ellos, los niños me vieron pero no hicieron nada, al parecer no se daban cuenta de lo peligrosa que podía ser en este estado. Me abalancé a uno de ellos provocando que esté soltara un grito y cuando estaba apunto de clavar mis colmillos en su cuello algo me tomo del cabello y me lanzó lejos haciendo que el niño quedara donde se encontraban y yo aún nos 30 metros de él.Mire furiosa a el ente que se había interpuesto entre mi presa y yo, pero para mi sorpresa encontré que ésta era una chica pelirroja con ojos azules verdosos muy bonitos pero su aura era muy fuerte,era el aura más fuerte que había visto. Ella se encontraba en frente de los niños intentando protegerlos pero realizó algo muy raro a mí parecer ya que puso sus manos en las frentes de los niños y ellos se fueron completamente felices como si nada de esto hubiera pasado, eso hizo que mi ira incrementar aún más.
-¿Quién eres para interrumpir entré mi presa y yo? -pregunte a la extraña.
-Yo soy la descendiente del Dios Sol, y estoy aquí para mantener el equilibrio de las cosas y evitar qué comentas algo te lo cual luego te arrepentirás -expresó optando una postura relajada.
-Dices que me voy a arrepentir, si tengo hambre y sólo buscó comida -exprese.
-Eso es algo que no puedo responderte sólo tú sabes, pero como ese acto no se dio es algo que por el momento igual no entenderás - me dijo como si supiera todo provocando que me lanzara encima de ésta.
Ella era muy buena luchando y se podría decir que era una buena oponente pero yo también, en una hora de peleea y todavía no existía una ganadora así que ya me estaba cansando de esto y cree una daga aunque esta logró esquivar todos mis ataques, logré hacerle un rasguño en su mejilla y cuando el líquido carmesin salió me sentía un poco victoriosa, lo más raro fue el olor de la sangre de ésta no era como el de los demás si no era un honor dulce y muy tentador.
-Ya me cansé de estar jugando -lo dijo y me lanzo al suelo haciendo que en este quedará una marca de lo sucedido. -Tu reina de ésta hablando, compórtate vampiro -lo dijo con una voz autoritaria, haciendo que un escalofrío recorriera por mi cuerpo y me tranquilizara.
-¿Quién eres tú? - se lo pregunte con un poco de miedo.
-Ya te dije quién soy. Nos veremos en otro instante -aseguro - Pero algún día necesitaré de ti, te pediré un favor y espero que no te niegues en cumplir lo que te pediré.
Después de esas palabras desapareció pero yo ya no me encontraba en aquel lugar por el contrario me encontraba en mi habitación, me sentía tan cansada que decidí cerrar mis ojos para poder pensar en todo lo que había sucedido. Ni siquiera me importó estar sucia por el momento no más importante era saber quién era aquella pelirroja y ¿Qué era lo que había hecho en mi con tan sólo decir unas palabras?
ESTÁS LEYENDO
Mi Mate El Lobo Negro
Người sóiBlanco y negro dos colores totalmente distintos pero fundamentales, que siempre han existido. Lo mismo pasa en esta historia, dos manadas una del norte regida por los lobos negros y otra manada en el sur gobernada por los lobos blancos. Como todo re...