Taehyung sonrió, arreglando el cartel de "Bienvenido" el cual le habían ayudado a hacer Giyoon, su hijo mayor de doce y ShinHa de seis. Era una gran pancarta llena de manos y dedos cortesía de sus hijos, con la poca y torpe ortografía de ShinHa y miles de caritas por parte de Giyoon. Estaba un poco nervioso, recorría el pasillo de la sala a la cocina con una sonrisa, viendo con un brillo especial en los ojos al ver su dedo anular abrazado por aquel anillo de plata.
El sonido del auto sacó a Taehyung de su ensoñación, quien corrió de nuevo a la sala junto a sus hijos.
—¿Cómo se ve papi?— le preguntó a los niños dando una vuelta.
ShinHa aplaudió contento, diciéndole peshiosho papi, con una sonrisa de diente faltante. Taehyung vió a su hijo mayor esperando lo mismo.
—¿Qué piensas tú Giyoon?—le preguntó, el mayor le devolvió una sonrisita tan parecida al hombre que era su marido, Giyoon era tan parecido a su padre.
—Que luces estupendo papi, papá va a morirse— dijo divertido.
—Entonces, antes de que papá suba del garaje denle un abrazo a su padre— extendió los brazos y sus hijos corrieron hacia él.
Después de que le diera varios besitos a sus pequeños, les dijo que subieran quería darle una sorpresa a su esposo, hoy cumplían su dieciocho aniversario juntos y Jungkook volvía de un largo viaje del extranjero. Taehyung quería que fuera especial.
Nervioso se paró en medio de la sala, cuando vió el cabello negro de su marido. Cuando el mayor entró, se quedó parado en la puerta sosteniendo su abrigo en la mano, miró a su esposo y el gran cartel que tenía detrás. Tae deslizó una brillante sonrisa en sus labios, la cual fue muriendo al ver la mirada fija de su marido casi taladrarle.
—¡B-bienvenido!— dijo torpemente.
Los zapatos de Jungkook repiquetearon sobre el suelo de madera.
—¿Taehyung?—dijo el mayor con tono molesto, se tomó del puente de la nariz frustrado.
El rubio se quedó mudo. Sabía que significaba esa mirada.
—Quería darte la bienvenida—su voz sonó suave y baja.
Jungkook frunció el ceño.
—Te dije que vendría cansado— volvió a decir groseramente torciendo la boca- iré a dormir, mañana saludaré a los niños— dijo suspirando irritado—Buenas noches.
Con la mirada en el suelo, Taehyung sintió como su corazón se quebraba en pedazos. Jungkook pasó de su esposo, quien estaba a los pies de la escalera y por un momento un olor a perfume, que se mezclaba un poco con el aroma a menta de su esposo se deslizó como una pequeña víbora hacia su nariz, y su corazón dudó al igual que su lobo, quien se removió en su interior viendo como su esposo se perdía escaleras arriba sin siquiera recordar su aniversario.
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Fementido (KookV)
ספרות חובביםTaehyung y Jungkook llevan dieciocho años felizmente casados, con dos hijos y una hermosa casa. entonces lo inimaginable ocurre, la traición, el desamor y un posible divorcio. -Cuando menos lo esperé algo se quebró, ¿Lo escuchas Jungkook? Eso fue mi...