Capítulo 2

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En alguna parte del mundo.

Jamsen

El 15 de abril de 1975 estaba yo Jamsen a mi centro de trabajo, baje por el subterráneo, era la manera más sencilla de llegar al otro lado donde se encontraba mi auto.

Introducción

Jamsen trabaja en un programa de televisión. Llegó ahí por sus irónicos comentarios en el periódico ya que era columnista de los diarios. Después de varias entrevistas en televisión que ganó por estos comentarios tan bien argumentados, ganó el cariño y respeto de las personas que veían los programas en los que fue entrevistado. Por este talento que demostró, su manera de desenvolverse llamó la atención de algunos productores y fue invitado a participar en su primer programa como colaborador del gran Jacko Sánchez en el canal 7. Llevaba apenas 3 meses de trabajo y tanto el cómo su compañero se volvieron un éxito en la sociedad. Entrevistaban a los políticos, y con tanta elegancia e ironía hacían que sus entrevistas resultarán bastante divertidas para la sociedad, que veía como lograban en este programa burlarse de los políticos, que en su mayoría eran corruptos. También entrevistaban alguna celebridad o cantante del momento. Su elocuencia, sarcasmo, chispa y naturalidad fue lo que hizo que en tan poco tiempo tuvieran muchos admiradores en su país, e iban creciendo. Jamen parecía un tipo muy despreocupado, pero en realidad era muy dedicado a su trabajo, puntual, respetuoso, muy modesto con sus palabras, sofisticado y serio, pero carismático. Para el programa de televisión para el que trabajaba le favorecía bastante su carisma, gracia y su semblante bien parecido. Esto hacía que entre todos sus admiradores abundaran un poco más las señoritas.

Jamsen

Mientras bajaba las gradas con un paso ligero me fijaba en el ambiente de derredor, estaba frío, los focos alumbraban con una luz muy pálida, y las paredes color blanquecino hacían de este lugar algo tenebroso. Había salido temprano a comprar un café camino al trabajo, pero no pude estacionar mi auto allí, estaba prohibido. Distraído y apurado tropecé con alguien, casi se cae de las gradas, la rodeé con mi brazo, fue tal el impulso que logre sentirla, su cuerpo cerca al mío, su aroma perfectamente detectable desde la corta distancia en la que nos encontrábamos, logre des concentrarme de todo por un segundo. Luego de que se estabilizara ella siguió su camino, volteé hacia atrás para verla subir las gradas, pero ella no. Lo único que pude ver fue su peinado con un listón amarrando su media cola, y su uniforme escolar.

Proseguí mi trayectoria saliendo del subterráneo, subí a mi auto y partí. Llegué a tiempo a la reunión programada de las 7:00 am.

En la reunión se hacían coordinaciones, sobre el equipo de grabación, programación de las entrevistas de la semana, horarios, escenario etc.

Terminando la reunión de la mañana me quedé un rato más. Volví a revisar nuestras entrevistas, y las programaciones de esta semana. Para el día miércoles, el ministro de economía estaría con nosotros en el programa. Jacko y yo nos reuniríamos más tarde como a las 5:00 pm para practicar nuestras preguntas, sabía que quería sorprenderlo tanto a él como a los productores. Para hacerlo tendría que investigar más sobre el tema. Primero pasaría por imprenta, para recoger unos papeles que necesitaba y que Mario, nuestro guionista me había pedido recogerlos.

Subí a mi auto y conduje, no tenía mucho tiempo, así que me apuré. Nuestro canal suele trabajar con la imprenta de la calle Múnich, por el centro, pero Mario tenía un buen amigo en la calle Sarre, alejada de la ciudad, en una zona no muy reconocida, con calles simples y no bien asfaltadas lo bueno de ese lugar pudo haber sido que tenían una biblioteca cerca, allí estaba la imprenta de su amigo con el que tenía confianza y a donde fui a recoger los papeles.

Buscando la imprenta correcta me perdí. Entre por la calle equivocada y mi decisión de caminos desde ahí no fueron las correctas. No podía encontrar la imprenta, mientras conducía, pude fijarme que en la otra esquina había un joven con apariencia deplorable y al parecer estaba acorralando a una joven. Pasé por ahí con mi auto y toqué tan fuerte la bocina que aquel hombre se distrajo y la joven pudo escapar y se fue rápidamente. Al verla correr observe el mismo peinado, uniforme y contextura de la señorita de la mañana. Fue extraño. Después de unos momentos logré encontrar la bendita imprenta.

-Buenas tardes ¿Es usted Franco? -Pregunté al hombre de la imprenta-

-Sí, buenas tardes en que puedo ayudarle. - respondió aquel hombre.

- Buenas tardes vine a recoger el encargo de Mario.

- ¿Qué paso con Mario?

- Si el está ocupado, tiene mucho que hacer, no le dio tiempo, por eso estoy aquí.

Franco empezó a caminar y vi cómo le pidió a un joven que trajera algo.

-Tome- Dijo Franco entregándome los papeles en un sobre- Tiene que firmar aquí por favor para afirmar que recibió los papeles.

Firme, regresé a mi auto, y en la trayectoria vi la biblioteca. Nunca había ido ahí, realmente no me parecía confiable, sin embargo tal vez debía visitarla para saber cómo era realmente.

Al llegar al estudio, le di los papeles a Mario, minutos después me reuní con Jacko. Como a las 9:00 pm empezó nuestro turno del programa, nuestro equipo de filmación hizo algunas pruebas. Mario revisó nuestras líneas y empezamos. Terminamos como a las 10:00 pm. Llegué a mi departamento a las 11:00 pm. A pesar de estar cansado me quedé pensando en la entrevista del miércoles.

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