Capítulo 14

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Esa tarde fui a la biblioteca a buscar a Yanela, pero ella no vino.

Al día siguiente volví en la mañana a buscarla a su casa. Cuándo salió y me vio era muy temprano, fingió no verme y siguió. Decidí seguirla. Bajé y la alcancé.

-Basta, ya no te vayas-Dije en frente de ella-

Trato de esquivarme, pero no pudo.

-Tengo que irme.

-Te llevo.

-No, ¿Por qué?; ¿Por qué haces esto? Ya vete, te dije que no quería verte.

Intenté algunos días, pero nunca acepto.

Un día en la biblioteca volvió:

-Lo siento- Dijo con una sonrisa y una hoja de papel-

Volteé y la tomé de los brazos y le di un abrazo.

-Estas aquí- Le dije mientras la abrazaba-

-Lo lamento. - Dijo ella-

- ¿Por qué?

Se soltó de mi abrazo.

-No debías verme llorar.

-Yo lo lamentó. -Dije.

-Bueno también deberías -Dijo sonriendo-

Sonreímos:

- ¿Por qué llorabas?

-Me caí.

-No parecía llanto ni golpes de una caída- Dije-

-No viste como me caí- Dijo sonriendo-

Ella no sabía que yo sabía lo mucho que sufría. Decidí tomarlo a mi favor ayudarla sin que sepa que yo sé que sufre. Ayudarla como amigo y no por compasión.

Después de algunos días volvimos a ser amigos como antes.

Aunque quería hacer más por ella. Quería que comiera bien, así que pensaba como hacerlo por lo menos hacer eso ya que no puedo llevarla al colegio y ahorrarle esa inmensa caminata.

Después de un tiempo insistiendo, logré invitarle un café. Lamentablemente ella pagó, eso no fue parte de mi plan sin embargo no me dio opción de negarme.

¿Estas hablando conmigo?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora