Revelación de la familia Real

capitulo 10

El sol daba sus primeros rayos de sol que abrasaba a todos con un calor bastante leve que los despertaba un tranquilidad y paz. Pero toda esa paz se acabó cuando alguien llegó gritando de emoción de forma eufórica.

—¡Amigos! ¡Llegaron! —seguía gritando sin parar totalmente emocionado.

Todos despertaron de forma abrupta y violenta. Kopa le había pegado una patada por instinto a Ono, Beshte casi aplasta a Kion con su cuerpo y Fuli casi le muerde el cuello a Bunga.

—¡Bunga! —gritaron todos con cierto enojo menos Kopa.

—Perdón chicos, pero estoy emocionado de verlos nuevamente. —mencionó el tejón abrazando a sus amigos por su retorno.

—Nosotros también te extrañamos Bunga. —exclamó Ono ya alegre y emocionado.

Cuando Bunga tomo un poco de distancia para poder conversar, Kion vio una fea cicatriz que atravesaba desde el pecho hasta su estómago.

—Bunga... tu... —a Ono no le salían las palabras ante la gran cicatriz que poseía Bunga.

—Ah sí... la herida... —se apresuró Bunga a su amigo. —Rafiki hizo lo mejor posible, pero más importa que estoy vivo. —decía con un optimismo peculiar de él, pero lo demás no lo graban entender esa felicidad que Bunga irradiaba a pesar de saber que casi muere.

—Y me alegro por eso. —dijo sonriente Kion ocultando su inquietud por el estado de su amigo. —Al menos no está muerto. —pensaba.

—Vamos donde los demás, estarán felices de verlos.

Bunga los llevo donde Janja, Jasiri y Rafiki quienes seguían durmiendo.

—¡Miren quien esta acá! —gritó nuevamente sin cuidado.

Los tres despertaron desorientados y fastidiados, pero al ver al grupo de amigos nuevamente reunidos saludaron felices ignorando a Bunga.

—Hola a todos, ¿Cómo les fue en el viaje? —preguntó Jasiri.

—Bien, la verdad muy bien. —respondió Fuli.

—¿Y ese león quién es? —juzgó Janja al ver el león adolescente.

—¿En serió?, ¿otra vez? —quejó Kopa tras escuchar a Janja y recordar que Kion tuvo la misma reacción.

—¿Dije algo malo? —dudo la hiena adulta.

—Para tu información... hiena... yo soy Kopa. —respondía de la misma forma que Janja

—¿Crees que puedes contra un león adulto? —pregunto Jasiri de forma más calmada y pasiva dándole confianza a Kopa a responder.

—Sí, estoy más que seguro. En donde vivíamos Kira y yo, casi todo el tiempo peleábamos contra los ataques de chacales y son bastante difíciles de vencer. —explicó Kopa aún un ofendido.

—Si tú lo dices, confió en ti. —le volvió a decir Jasiri.

—Bien, estaba pensando en cómo podemos atacar. —interrumpió abruptamente Rafiki la presentación. —Tendrían que atacar sigilosamente a cada una de las integrantes de la Guardia sin ser vistos, dejarlas inconscientes de un solo golpe y dejarlas lo más débil posible para que cuando sea el momento del ataque, no puedan defenderse.

—Es un buen plan Rafiki, mis hienas podrían ayudar. —sugirió Janja.

—Perfecto, toda ayuda sea de utilidad. —mencionó Kira.

—Está bien hermana, chicos, síganme.

—Esperen un poco, olvidan algo. —interrumpió la chita.