Revelación de la familia Real

capitulo 11

Todos se despertaron más temprano de lo normal, el sol aún no salía ni asomaba algunos rayos de sol.

—¿Qué haremos en este rato? —preguntó Kopa.

—Entrenar. —dijo decidido Kion. —Aún nos falta el combate y ya el sueño se perdió.

—Tiene razón, vamos. —motivó Ono a los demás.

Salieron de la cueva para encontrarse con alguien inesperado.

—Miren quien tenemos acá... Zazú tenía razón. —hablo terroríficamente Simba. —No crean que su ataque será exitoso, todos en Las Praderas los consideran enemigos y no les dará un paso fácil hasta la Roca del Rey.

—Eres un cobarde Simba, te ocultas para no pelear. —insinuó Kion.

—Kion, Kion, Kion... tan inocente como siempre. Ya verás que cuando estén perdiendo, el primero en correr y huir será Kopa.

—¿Por qué no lo averiguas ahora? —amenazo el adolescente.

—Guarda tus energías para mañana cachorro... y espero que sepas, al menos moverte. —insulto el león adulto.

—¡Simba, vete de acá ahora! —amenazó Rafiki apuntándole con su bastón dispuesto a pelear.

—Ya me voy, nos vemos en un rato... tal vez mañana o cuando quieran. —dijo retirándose. —Si es que logran llegar a Las Praderas. —mencionó sarcástico retirándose de una vez.

—¿Qué hacemos? Todos en Las Praderas nos consideran enemigos y no nos van a dejar pasar fácilmente.

—Eso no lo sabemos Beshte, puede ser mentira.

—No creo que sea mentira, Simba es muy bueno persuadiendo. —contestó Kion.

—Debemos seguir con el segundo plan. Atacar de frente y primordialmente a Vitani. —insistía Bunga.

—Aunque tenemos que ver como persuadirla y tratar que no use el rugido de los ancestros. —sugirió el mandril. —Pero no veo cómo podemos hacerlo.

—¡Ya sé, tengo una idea! —dijo el cachorro de león. —Podemos raptar a una de la guardia y tenerla junto a nosotros en la batalla así no usara el rugido y tendremos ventaja.

—Buen plan Kion, ¿pero a quién? No creo que Vitani sea capaz de traicionar a Simba por el bienestar de alguna de sus compañeras. —refutaba Ono

—Bueno... creo que si funcionara, porque Vitani es muy leal con sus compañeras como ellas con Vitani y además no todas son muy buenas guerreras, Kasi y Tamaza no son muy hábiles a la hora de la batalla, Kasi debido a que es muy delgada no tiene una gran fuerza y Tamaza no es que pelee muy a menudo, a veces a la hora de pelear suele quedarse paralizada o huir hacia Vitani para que la defienda. —opinó Beshte.

—Sugiero que sea Tazama, sin ella no podrán anticiparse a los movimientos de nosotros, ya que no tiene a su vigilante. —sugirió Rafiki.

—Muy bien, pero todavía nos falta una cosa la cual tenemos que tener en cuenta y es que todos los habitantes no ven como traidores hacia el reino y no dudaran en detenernos. —aclaró Bunga

—Rafiki. —llamo la atención el hipopótamo.

—Dime Beshte.

—Tal vez pueda hacer que mi padre entre en razón y haga lo mismo con los demás hipopótamos, de todos modos, él siempre me ha querido y apoyado sin importar que suceda.

—Beshte, no sé si tu padre te ayude o si los otros hipopótamos igual lo hagan, no siempre se puede contar con la familia, por ejemplo, a Kion lo exiliaron y solo siendo un cachorro. —refutó el mandril.