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Capítulo II - picture me.

Pasaron tres días de la desaparición de Stiles. El sheriff hizo lo imposible para poder encontrarlo lo más pronto posible, pero no habían señales de él. Era como si la tierra se lo hubiera tragado.

- Tranquilo Sheriff, Stiles es fuerte, vamos a encontrarlo sano y salvo.
- No puedo estar seguro de eso. Los chicos no lo huelen, Derek está encerrado en la mansión y nadie sabe donde pudo haber ido.

Una chica entró a la oficina de Noah sin preguntar.

- Hey, no puedes estar aquí.
- Tranquilo Parrish, es Cora Hale. ¿Qué hay de nuevo, Cora?, ¿cuándo volviste?.
- Sheriff, hay algo que tengo que decirle.
- Los dejaré solos. - dijo Jordan saliendo.
- ¿Qué sucede, muchacha?
- Es Stiles.
- ¿Ya lo encontraron? - dijo levantándose de su asiento.
- Sheriff, Stiles es un ser sobrenatural.

El hombre se quedó quieto, algo nervioso.

- ¿Qué dices?, claro que no.
- Sé cuando está mintiendo, sheriff, no puede engañarme.
El hombre miró al suelo y observó a Cora. - ¿Desde cuándo lo saben?
- Solo yo lo sé, por eso vengo a buscarlo.
- ¿Le pasó algo? - dijo preocupado.
- Algo así, tiene que acompañarme y por favor, use esto.

La chica le dió una pulsera rara y se la puso en su muñeca. Ambos se dirigieron hasta el coche patrulla de Noah, se dirigieron hasta la salida de Beacon, unos minutos antes de llegar al otro pueblo, Cora le pidió al sheriff que se detenga en una pequeña cabaña.

- ¿Alguien más sabe de esto?
- Solo yo, sheriff.

Ambos partieron hacia la entrada y ya era todo demasiado extraño para el hombre. Animales muertos, cuervos rondando alrededor de la casa, el cielo era más oscuro en esa parte de la ciudad.

La chica abrió la puerta y todo dentro de ella era normal, a excepción de...

- ¿Lucifer?
- Que agradable sorpresa, mi amado Noah.
- ¿Qué? - dijo la menor.
- Es solo un cumplido, linda.
- ¿Qué hace él aquí, Cora?
- Vino a enseñarme mi naturaleza real, papá. ¿o debo llamarte Noah desde ahora?

El sheriff no podía creerlo, ¿qué es lo que Stiles realmente sabía?

- ¿Qué le dijiste exactamente? - le preguntó al demonio.
- La verdad, Stiles es mi hijo y solo mío.
- Eso no es cierto, yo y Claudia criamos a Stiles como nuestro propio hijo.
- ¿O sea que es cierto?, ¿tú no eres mi verdadero padre?

Los ojos de Stiles comenzaron a tomar un tono rojo, mientras este se elevaba hasta el techo de la cabaña.

- Hijo, no...
- Soy adoptado.
- Stiles...
- ¡No te me acerques, humano! -  gritó con una voz doble.
- ¡Stiles!
- ¡Tú tampoco, loba!

Los pájaros que iban pasando alrededor, iban cayendo al suelo muertos, algunos tenían los ojos aterrorizados.

- Stiles, por favor, cálmate. - dijo la menor, no sabiendo como controlarlo. - Piensa en mi hermano. Piensa en Derek.
- ¿El lobo que huyó con la cazadora?, ni siquiera pensó en mi hijo cuando se fué. - dijo riendo el demonio.
- ¿Tú qué sabes lo que mi hermano pensaba?
- Soy el rey del infierno, sé lo que están pensando todos aquí y en todo el mundo.
- Padre, quiero irme de aquí. - dijo Stiles aún poseído.
- Con gusto, hijo mío.

Una puerta de fuego se abrió en medio del living.

- ¡No, Stiles, por favor, recuerda quién eres!
- ¡Hijo!

El chico voló hacia la entrada y la puerta desapareció.

- ¿Qué le hiciste a mi hijo?
- Es mi hijo, Noah, ¿no recuerdas como fue concebido?
- Sheriff, ¿qué está diciendo?
- ¿No recuerdas lo que pasó cuando eras solo un chiquillo de diecinueve años?
- Lucifer, basta y dame a mi hijo.
- ¡Es mío! - gritó el demonio y desapareció.