Capítulo X - close your eyes

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La mañana fue bastante buena, la manada se despertó y bajaron al oler un aroma exquisito, todos bajaron al comedor enorme y vieron a todo el aquelarre desayunando.

- Buenos días. - dijo Mallory.
- Buenos días a tí. - habló Isaac guiñándole un ojo, el rizado llevaba solo un pantalón de pijama puesto.

Theresa sonrió y alzó su mano para que la manada se siente. Stiles y Derek bajaron tomados de la mano, pero el chico se sentía extraño.

- ¿Cómo te sientes, Stiles? - dijo Theresa.
- No lo sé, me siento... raro.
- Vamos chicos, siéntense y coman que hoy será un largo día.

Stiles se sentó junto al lobo, el mayor le sirvió café, dos media lunas con chocolate, tocino y huevos junto a jugo de naranja, pero todo el olor le hacía sentir asco, salió de la mesa y corrió hacia el baño para vomitar. El chico se levantó y se recargó en el lavabo, se miró al espejo y observó unas ojeras en sus ojos.

- ¿Qué? - dijo bajo.

Se tocó el rostro y estas volvieron a su color natural.
- Stiles, ¿estás bien? - dijo Derek del otro lado. El chico abrió la puerta para que este entrara.
- Sí, ya estoy mejor. Pero no dejo de sentirme extraño.
- Tranquilo, estoy aquí. - el mayor le abrazó.
- ¿Qué pasó anoche?
- ¿Anoche?, anoche tuve la mejor noche de mi vida. Algo rara pero fue la mejor.

Stiles rió y le acarició el cabello.
- Se nota, desperté con algo dentro de mí hace unos minutos.
- ¿No recuerdas lo que pasó?
El chico empezó a recordar todo y se golpeó la frente.
- Ay no, debe ser mentira. - susurró.
- ¿Qué?, ¿qué cosa?
Se tocó el estómago pero no sintió nada extraño.
- Estoy loco.

Stiles sonrió y abrazó a Derek por la cintura.

- Vamos a comer, ya me siento mucho mejor.

El menor bajó nuevamente a la mesa y se sentó con normalidad.
- ¿Cómo se siente el bebé, Stiles?
El chico observó a Isaac como si le hubiera salido otra cabeza. - ¿Qué?
- Que si estás bien, ¿me estás escuchando?
- Lo siento, rulitos, estoy algo distraído esta mañana.

El rubio sonrió y siguió comiendo. Theresa se veía pensativa.

- Lo que ocurrió anoche, nunca lo había visto antes.
- Stiles es el anticristo, ¿no? - dijo Cora. - Es único.

La manada rió, pero el aquelarre estaba aterrado, ellas no sabían que tanto poder tenía el chico, pero lo sentían, era algo inusual.

- Lo siento, perdí el control...
- Pero no en tu totalidad. - terminó Zoe. - No sé si tu padre te lo dijo, pero... si hubieras perdido completamente el control, hubieras matado a todos aquí, excepto a tu alma gemela.
- Me dijo algo, pero... no creí que fuera cierto.
- Además, hiciste algo que es muy anormal.
- Anoche había luna menguante y pasó a ser luna llena en un segundo. - dijo Liam. - Me afectó mucho.

Stiles se levantó y abrazó al lobo menor.
- Lo siento, Li, enserio.
- No fue nada, Peter me controló y...
- ¿Peter?, - interrumpió Derek - ¿Y dónde está?
- Salió muy temprano, dijo que iba a caminar. - habló Lydia.
- Hizo mucho más que controlar a Liam. - rió Malia.
- ¡¿Qué?! - gritó Stiles.

El chico subió hasta la habitación y se dió una ducha rápida. Cuando salió del baño, Derek estaba sentado en la cama.
- Sti, ¿qué vas a hacer?
- No voy a dejar que juegue con Liam.
- Peter no va a hacer eso.
- ¡Has visto como es!, ¡Es tu tío!
- Y por eso lo digo, desde que volvió del infierno, Peter ha cambiado.
- De todas formas, no voy a dejar que juegue con sus sentimientos.
- Sti.
- ¡Es mi cachorro! - gritó y pegó a Derek a la pared con sus poderes ahorcándolo, pero lo bajó inmediatamente. - Der, lo siento.

El chico corrió hasta el mayor y lo abrazó, este se tocaba el cuello respirando aceleradamente.

- Lo siento, lo siento, no quise hacerlo. - el chico empezó a llorar, pero se alejó rápidamente, colocándose su ropa. - Tengo que alejarme de todos.
- Stiles, no, está bien, estás protegiéndolo.
- No, no hablo de eso, me estoy descontrolando de a poco.
- Nada va a pasar, bebé. - el mayor acarició su mejilla y éste se dejó.
- Es la segunda vez que me llamas así.

El menor cambió rápidamente de humor y tomó una mochila que tenía con algunas cosas que Derek no logró ver ni sentir. Ni oler.

- Vuelvo en unos minutos para las pruebas y nos vamos, ¿si?
- Está bien, Sti.

Stiles le besó fugazmente y salió de la habitación, casi escapando de todos. Liam estaba esperándolo al final de la escalera con la cabeza agachada.
- ¿Estás enojado conmigo?
- No, Li. - Stiles le abrazó y besó su cabeza. - Es solo que me preocupo por ti. Tengo que hacer unas cosas y vuelvo, se bueno y dile a los demás que volveré en unos minutos, ¿está bien?
- Sí, mamá. - dijo el chico sonriendo, luego se dió cuenta de lo que dijo, se sonrojó y se golpeó la frente. - Lo siento.
- No, está bien, pequeño.

Stiles rió y le revolvió el cabello. El chico salió de la mansión y caminó con pasos apresurados hacia el bosque, llegó hasta el fondo de este y se sacó la mochila de su espalda. La dejó en el suelo mientras se arrodillaba y lloraba.

Abrió el objeto y del fondo sacó cuatro animales muertos, una oveja rebanada en varias partes, una cabeza de un león, un aguila con sus alas rotas y una paloma sin cabeza y sin alas.

- Me sorprendes con estas ofrendas, hijo.
- No sé como hice todo esto, solo sé que desperté lleno de sangre de cabeza a los pies.
- Tienes que liberarte, tu verdadero ser está por salir. Lo que me acabas de traer son cuatro animales sagrados.

» La oveja que simboliza a las personas puras. El león, que representa a Dios. El aguila y la paloma blanca que simboliza el nacimiento de Jesús. Tu verdadero yo va a ser liberado y al parecer... - El demonio miró y tocó las bolsas en los ojos de Stiles y las acarició. - será muy pronto.

Lucifer desapareció mientras que el pequeño Liam aparecía detrás de un árbol, asustando a Stiles.

- ¿Qué es esto, Stiles?
- Li...

El chico se desmayó antes de decir otra palabra, Liam lo tomó en sus brazos, dándole golpecitos en su rostro.

- Stiles, Stiles, despierta. - Liam lo sacudía pero él no despertaba. - ¡Stiles!, ¡Ayuda, por favor!

El menor aulló alertando a la manada, Derek corrió hasta donde se escuchó, llegando hacia Liam y Stiles, el resto llegó a los segundos después.

- Liam, ¿qué pasó?
- No lo sé, seguí a Stiles porque vi que no estaba bien. Pero... - Las lagrimas del menor aparecieron en su rostro.
- ¿Qué fue lo que pasó? - dijo Isaac.
- Se desmayó y no despierta, ¡no despierta!

Derek sintió sus latidos, el chico estaba bien, pero aún estaba preocupado, era su luna. El mayor cargó a Stiles en sus brazos y lo llevó a la mansión nuevamente.

- ¿Qué crees que pasó?
- El principio. - susurró Lydia. - El principio del fin.

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