El estúpido de alado [Pausado]

Capítulo 3

Bien la situación era incomoda estaba frente a frente con la novia de Ben, no dije nada y le dedique a darle una mirada fría; Todos nos estaban mirando ella soltó un bufido.

—¿Quién te crees para no responderme eh?—Me miro con una mirada retadora no quería armar un escándalo frente a todos, pero que más daba.

—Mira yo no quiero nada con tu noviecito ese—Hice una mueca de asco—No quiero problemas y ya te aclare tus dudas, adiosito—Dicho eso me retire de mi casillero, y camine para encontrar mi amiga.

Visualice a Mercedes ella estaba con Thomas en el patio del instituto, podía oír sus carcajadas me fui acercando a ellos y cuando estuve con ellos sus caras cambiaron por completo

—¿Éstas bien Rach?, oí por ahí que discutiste con Camila—Un tono de preocupación se notaba en su rostro y luego vino a abrazarme como consuelo.

Y solo podía pensar en cómo los chismes volaban en este instituto.

—Estoy bien no te preocupes—Hice un gesto con mi mano que no importaba eso, Mercedes se despegó de mí y luego miro a Thomas.

—Y cambiando de tema... —Mercedes aclaro su garganta antes de hablar y Thomas frunció el ceño

—Ni te atrevas Mercedes— Dijo Thomas enojado, pero al mismo tiempo Mercedes hablo

—Thomas está enamorado—Luego de que Mercedes digiera eso se tapó la boca con sus manos y rió

—Oh de esta no sales viva he—Thomas procedió a darle cosquillas en la pana e hizo que Mercedes soltase un quejido.

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Estaba en la última clase de Matemáticas y en verdad me aburría, el profesor no paraba de explicar fórmulas que no entendía un carajo; no atendí lo suficiente la clase y mire ansiosa el reloj de la clase solo faltaban 2 minutos. El timbre de salida sonó varios alumnos e inclusive yo Salí corriendo cuando salía del instituto una voz masculina y como no reconocer esa maldita voz.

—¿Quieres que te lleve?—Pregunto Ben con una ceja enarcada yo negué y el bufo—¿Y ahora porque no quieres ir conmigo?—puso una cara de lastima.

Ay si como si fuera que eso funciona conmigo

—Deja de molestarme de una maldita vez—Grite enojada y con pasos apresurados, pero él se puso enfrente mío obstruyéndome el paso—Siempre me sigues Ben ya salte, no estoy de humor—Lo empuje fuerte y así el me dejo pasar.

—Rach... —No le hice caso y seguí mi camino pero él me acompaño—Me preocupo por ti ¿qué te pasa?—No le respondí y se quedó un silencio reinando entre ambos.

Maldita sea porque me sigue

—Ya deja de seguirme de una jodida puta vez, pareces un chicle—Luego de eso él se apartó de mí y yo sentí un alivio.

Llegue a mi casa y olía el olor de la comida me adentre a la cocina, y visualice a mi madre sirviendo la comida en la mesa esto en verdad era algo nuevo; mi madre nunca dejo su celular esto era simplemente raro.

—Hola madre—Le di una sonrisa y luego le di un beso en su frente.

—Hola cielo, me puedes ayudar a poner la mesa van a venir los vecinos de alado sube a tu habitación a cambiarte

—¿Desde cuando te juntas con ellos?—pregunte curiosa mientras ponía los platos, mi madre soltó una risilla

—La Señora Isabela es muy amable, mientras tú estabas siempre en tu escuela me empecé a juntar con ella, y me callo bien me ha contado muchas cosas sobre su hijo como se llamaba... —intento recordar mientras ponía los cubiertos en la mesa—Ben.... sí el hasta me contó que el asiste a la misma universidad que tú