Mi niñero (abraham mateo) (tu) Hot

Lista.

Pasé a dejar a Magui a su casa y conduje directo a la mía, ahora me emocionaba mucho la idea de llegar a mi casa y ver a Abraham, poder abrazarlo, estar cerca de él, escuchar su voz, oler el perfume que solo él tiene, o simplemente mirar sus ojos cafés y su perfecta sonrisa, que me tomará en sus brazos y me hiciera sentir como nadie más, como nunca antes me había sentido...

Salí de mis cursis pensamientos sacudiendo mi cabeza ligeramente mientras estacionaba el auto.

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Estábamos cenando mientras hablabamos de que podíamos hacer el fin de semana, o sea, mañana, ya merecía un descanso de la escuela, según yo, no me bastaba con mi pasada suspensión, yo exigía vacaciones. Hablando de vacaciones y descansos, ¿como estarían mis padres? Nos mensajeabamos rara vez y por las Stories de mi mamá, no solo habían ido por cuestiones de trabajo, se veia que aprovecharon bien el viaje, y pensándolo bien, me alegraba bastante, de no haberme quedado, jamás hubiera conocido a Abraham.

-¿Que piensas tan concentrada? Jajaj, parece que te me vas, linda.

-Estaba pensando en mis padres, hace unos días que no me escriben para nada.

-¿Ya intentaste escribirles tú, o marcarles?

-No... Quizá mañana lo haga, por ahora - Bosteze - quiero dormir.

Abraham me miro con ternura y gracia, se paró, llevo nuestros platos y me dio un beso en la frente, yo solo cerre mis ojos y sonreí cálidamente recibiendo el beso.

-Pues a dormir, pequeña.

Dioooos, me daba un no sé qué al escuchar como me decía, no sabía que, o sea, no puedo describir ese sentimiento, ¿como es que estas aquí? Que debí haber hecho para poder sentirme así, con tanta vida, calidez y amor, creo que jamás podré explicar lo que sentía.

Me pare de la mesa y caminando atras de mi, abrazándome por la cintura subimos a mi cuarto.

Abraham se sento en mi cama y yo tomé mi pijama y me metí al baño, era un short y una blusa larga lo que me puse, salí y ahí estaba él mirando su móvil, se paró de la cama y yo me acosté, hablamos un rato mientras él estaba a mi lado, hasta que llego un momento en el que me perdí en sus ojos, tenían algo, no sé, pero me hacian perderme en ellos, como si quisiesen decirme algo.

Abraham se inclino a besarme y aun acostada se lo correspondi, daba cortos y largos besos en mis labios, en algún momento, necesitamos una posición diferente, y ahora estaba sentada en mis almohadas y el estaba encima mio.
Tenía mis muslos en sus manos, lo cual me ponía nerviosa y elevaba por completo mis hormonas.
Seguía besándome y perdí el control de mi misma, tomé su playera de manera que quedara claro que en ese momento sobraba, se la quitó y, dios, jamás me sentí más pequeña, tomó mi cintura y enseguida quite mi playera, Abraham me ayudó a quitármela de manera desesperada.
Aquella vez que estabamos a punto de hacerlo no estaba completamente segura y él lo entendió, jamás me presionó.

Pero desde ese momento supe que sería él, lo haría con él.

Estaba lista.